Capitulo 5

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Un deseo

Ya habían pasado 2 años, 18 ahora tenía 15 años, Julián 16, ya pronto iba a cumplir los 17 años, ambos lobos vivieron juntos con los dragones y en esos dos años se volvieron hermanos, aunque 18 simplemente no quería decirle su pasado pero Julián lo entendió, literalmente, solo quería aprender más de los lobos-dragones.

18 se había vuelto más animal, ya tenía pelaje en gran parte de su cuerpo, incluyendo la cara, pero sorprendentemente ella se podía transformar en un tipo de loba-dragón bastante grande, literalmente media 5 metros en esa transformación y podía volar bastante alto y lejos, era la protectora de la ciudad sin duda alguna.

18 se había vuelto más animal, ya tenía pelaje en gran parte de su cuerpo, incluyendo la cara, pero sorprendentemente ella se podía transformar en un tipo de loba-dragón bastante grande, literalmente media 5 metros en esa transformación y podía vo...

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Eso sí, había empezado a tener un carácter bastante explosivo, sus traumas del pasado estaban regresando y en un punto recordaba mucho su pasado al punto que podía quedarse un día entero recordándolo, extrañaba a su abuelo y lloraba por él, pero siempre escondía sus sentimientos pues quería parecer fuerte para todos.

18 tambien adquirió un mal hábito de ser nocturna.

¿Porqué mal hábito? Pues no dormía lo suficientemente, en el día también estaba despierta y no descansaba bien, Meteoro la intento converser pero no funcionó, solo Julián la lograba dormir tocando el piano para ella, aunque la tenía que obligar o engañar para que se quedará en la habitación el suficiente tiempo para que le afectará.

Regresando al día que ocurre este evento...

Era una noche lluviosa, 18 estaba transformada y en uno de los techos de un edificio, recordando su pasado... Está vez un recuerdo que siempre le causaba gracia...

- abuelo quiero una hermana - dijo la pequeña híbrida a su abuelo que estaba cocinando.

- jejeje ¿Una hermana? ¿Porqué? ¿No prefieres ser solo tu? -

- si pero me gustaría algo de compañía, mamá nunca está, mis primos no pueden venir todos el tiempo y tú y Tía están siempre ocupados, me siento solita... - dijo con algo de tristeza.

Su abuelo la vio y puso una cara algo triste sabiendo que su hija nunca le iba a dar una hermana a su nieta, así que solo sonrió y se puso a la altura de la menor.

- te seré sincero, tu mamá no creo que te pueda dar una hermana, pero si siempre le pides a la luna ese deseo desde el corazón, te lo dará, aunque no siempre de la forma que esperas -

- está bien abuelo -

18 abrió los ojos al recordar el recuerdo y ese deseo, recordaba que siempre le pedía a la luna que le diera una hermana, pero nunca pasaba nada, aunque también le causaba un poco de gracia como se la pasaba noches enteras aullando de manera no muy afinada.

Luna Azul [El Lamento De Un Lobo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora