No pude dormir,el ardor se extendía desde mi estómago a mi garganta,traté de mantener mis constantes quejidos en mi almohada pero a mitad de la noche Edward despertó,no era mi intención preocuparlo pero nunca me había sentido así,era como si de fuego se tratase.
-Ar,que pasa?-negué con la cabeza,ante mi falta de palabras pareció entender de que se trataba-te sientes mal-afirmó y yo asentí.-vamos a un hospital,no puedes estar así-negué frenéticamente,no quería estar allí encerrada una vez más.-sabes que voy a llevarte de todas formas-advirtió.
-No,por favor-dije esas tres palabras con todo el dolor dentro de mí,mi cara se contorsionó ante aquel ardor profundo que arrastraba aquella pequeña oración que había logrado articular.
-Deja de hablar nena-dijo preocupado.-vamos,has estado así todo el día,ahora creo que es momento de que dejes de resistirte-suspiré en rendimiento y me levanté como pude,pero al momento de ponerme de pie caí sobre la cama nuevamente,Ed casi corrió hacia mi.-Deja que me vista y te ayudaré-asentí lentamente.Observé a Edward mientras se colocaba su camiseta gris y sus ajustados jeans negros junto con sus converse y un camperon negro,vino hacia mí y me colocó su sweter negro de lana que cubría hasta la mitad de mis muslos,deslizó mis shorts de pijama y en su lugar me puso un pantalón suelto color gris,hacía mucho frío fuera de las colchas,por último usé mis converse viejos y no me importó parecer una vagabunda,Ed me cargó hasta su auto y puso en marcha hacia el hospital,el cual estoy segura de saber cada una de sus instalaciones,ya que,eh pasado demasiado tiempo allí adentro.*
Media hora después me encontraba esperando sentada en la camilla a que el doctor apareciera para revisarme,Ed se encontraba a mi lado.
-Sabes qué? no me agradaba mucho este lugar,porque pensaba que mi madre iba a morir-me hablaba para que olvide el dolor-pero ahora sé que todos pueden ser salvados-me susurró al oído con una pequeña sonrisa en sus labios,yo cerré los ojos ante el sonido melodioso de su voz profunda,él realmente me tranquilizaba.-el cancer no es nada fácil,pero ya ves,mi madre pudo con eso porque quería vivir,ahora tú podrás-hizo una pausa-si tú quieres vivir,lo harás-me miró a los ojos-quieres vivir ahora?-su pregunta me dejó helada,yo quería vivir en realidad? No. 'no' siempre fue la respuesta,pero por una vez en mi vida me lo estaba preguntando realmente,no le respondí.Edward pareció notar el debate mental que estaba haciendo-Tranquila,sé que si,tú sabes que si-respondió por mí,pero la duda seguía allí,su pregunta rondando mi cabeza.El doctor entró a la habitación,esfumando todo rastro de distracción hacia mi problema.
-Arami Luey,qué fue esta vez?-dijo refiriendose a mis visitas frecuentes.
-Ella tiene un problema con la comida-contestó Edward.
-Hay muchos centros para tratar estos trastornos alim...
-No ese tipo de problema-interrumpió Ed-ella no estuvo comiendo por un tiempo,ya sabe,por la depresión-hico un gesto como para obviar esa parte-en fin,ella intentó comer unas veces pero termina vomitandolo todo y hoy...-me miró-Que fue exactamente lo que paso?-debía contestar.
-Vomité sangre,mucha-dije e inmediatamente se intencificó aquel ardor en mi garganta.La expresión del doctor no fue una buena,era lo que esperaba.
-Bien, necesito analizarte,hacer pruebas de sangre y demás.
-Eso significa que...-alentó Edward.
-Debe estar aquí unas horas,entre veinticuatro y cuarenta y ocho horas.-Solté un bufido desde mi lugar y me recosté en la camilla esperando que comience con sus pruebas.
-Arami-llamó Ed-debo volver a casa,mi madre no puede estar sola,pero en la mañana vendré.-Asentí con pena y Ed me abrazó,se fue de allí.
-Bien pequeña,dame tu brazo-dijo el doctor Miller con una jeringa en su mano,le tendí el brazo derecho,él observo mis cortes con desepción y sacó sangre de el-voy a llevar que analicen esto,vuelvo en un momento.-Lo ví salir y esperé.
En cuanto estuvo de vuelta hizo que me sentara,hizo los análisis rutinarios y luego me dejó allí,no sin antes otorgarme una almohada extra y un anestésico para mi garganta,un efecto colateral de dar lástima.
*
Desperté alrededor de las once de la mañana,Edward a mi lado con su cara habitual de preocupación,le sonreí de lado con los labios sellados y tomé la anestesia para mi garganta,no tardó mucho en hacer efecto y pude hablar con menos dolor.
-Hola Ed-sonrió,una de esas sonrisas aliviadas,pero la sonrisa más bonita que jamás había visto.
-Hola nena-dijo con la voz ronca,tal como todas las mañanas.-Como estás?
-Mareada,cansada,adolorida y jodida,pero al menos me dieron una almohada extra-bromee y Ed rió,no sé si era su risa la más adorable o estaba demasiado enamorada de él,ambas.
-Sé lo que significa-me miró complice y ambos dijimos al unísono-Es un efecto colateral de dar lástima-reí porque yo le había dicho eso hace un tiempo atrás,aún lo recordaba.
-Woah,aún lo recuerdas.
-Claro que sí,cómo olvidarlo-rió.-Ahora en serio,sabes algo de los resultados?
-Sé lo mismo que tú,nada.-y como si fuera llamado el doctor Miller entró en la habitación con los resultados.
-No son buenos-dijo directamente.
-Adelante,quiero escuchar mi sentencia de muerte-dije segura,Edward me miró asustado.
-Bien,tu peso es muy bajo,pesas cuarenta y tres kilos-dijo muy serio,me sorprendí un poco-pero eso no es todo,tus huesos se vuelven frágiles por falta de calcio y no tienes los nutrientes necesarios para mantener tu cuerpo Arami-El rostro de Edward decayó relativamente demasiado.
-Voy a morir?-dije con un sentimiento que ni yo reconocí.
-No queremos que eso pase-afirmó el dr.Miller.-Por lo que te conectaremos a suero,de allí obtendrás los nutrientes que precisas y en cuanto a la comida-pausó-comerás porciones muy pequeñas para ir acostumbrando a tu sistema
-Usted no entiende,ayer vomité por un puto pedazo de sandwich y pretende que coma?
-Tranquila Ar-habló el ojiverde-él sabe lo que dice.
-Exactamente,será un proceso díficil y llevara tiempo
-De cuánto tiempo estamos hablando?-preguntó mi amigo.
-No es preciso pero tal vez,unas ocho semanas aunque podría extenderse ,todo depende de cómo Arami responda a el tratamiento.
-Dos meses?-dije alterada-no puede ser,no es posible,esto no está pasando-susurré rápidamente.
-Nena,podrás con esto-afirmó Edward,aunque no logré creerle.
-Bueno,podremos comenzar en dos semanas-dijo el doctor y se retiró.
-No puedo creer que esto esté pasando-lloré.Ed me abrazó lentamente pasando sus brazos sobre mis hombros y proporcionando caricias a mi cabello,con susurros de aliento.
*
Tres días faltaban para mi internación,para que comenzara el tratamiento y eso coincidía con la fecha de mi cumpleaños,cinco de julio.Por supuesto que en cuanto saliera del hospital ya las vacaciones de 'invierno' habrían terminado y perdería al menos un mes de clases,eso si todo saliera bien.
*
Me encontraba sentada en la cama de Edward esperando a que trajera mi sorpresa de cumpleaños,no había tenido una en años y no puedo negar que me emociona un poco,sobre todo viniendo de Edward.
-Feliz cumpleaños nena-dijo entregándome un panda de peluche de casi mi tamaño,junto con una cajita de color rojo,enseguida salté a sus brazos y el me recibió sujetandome por la espalda.
-Muchísimas gracias Ed-sonreí ampliamente mientras me bajaba de él y tomé la cajita en mis manos,la abrí con cuidado y me sorprendí al encontrar aquel colgante,el que tenía forma de avión de papel,el que Ed siempre llevaba puesto,me lo estaba dando.
-Te gusta?
-Sabes que lo amo-rió ante mi apreciación exagerada a su collar.
-Bueno,ahora quiero que lo tengas-me lo quitó para desabrocharlo-date la vuelta-obedecí poniendome de espaldas a él,aparté mi pelo y sentí el frío metal sobre mi pecho,sonreí aún más.
-Graias Ed,eres el mejor-le dije y lo besé en la mejilla.
-Espero que siempre pienses así-me sonrió y lo abracé fuertemente,me correspondió de igual manera,sabía que era hora,debíamos despedirnos,en cuanto nos separamos Edward me miró por última vez y salí con mi peluche y mi valija,estaba por abrir la puerta principal cuando su mano en mi brazo me detuvo.
-Que pasa rul...-no pude terminar mi oración,sus labios estaban sobre los míos,me besaba con la misma desesperación que yo a él,mi corazón latiendo fuertemente en mi pecho,mis ojos cerrándose grabando este momento en mi mente,si fuese por mi,haría que el tiempo se detenga aquí y ahora.
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Nothing's ever easy.
Teen FictionLa vida nunca es fácil,todo parecía derrumbarse,muchos intentos de terminar,de darle un fin a el sufrimiento, pero ¿cuántos queremos ser salvados? por mucho que eso sea negado,todos necesitamos a alguien. Algo que está presente siempre: uno de los p...