Eso es mío (Lestrick)

La confesión que nadie escuchó

La anécdota de la fiesta pasó a como Lester conoció a Patrick en primer lugar; en algún punto de la conversación Chilly Willy tomó dos latas de lo que creyó gaseosa y las bebieron gustosos, haciendo la conversación repentinamente chistosa. Fue entonces, cuando Lester dejó caer su lata al suelo y esta rodó hasta Chilly, que el chico se dio cuenta de lo que le había dado para beber.

-Oh,sh..

Lester soltó una fuerte carcajada y se quitó una lagrima del ojo

-Y entonces me fui sin una zapatilla, ¿puedes creerlo?

-Les,amigo, ¿no quieres un poco de agua?

-Quiero otra soda

Chilly Willy se puso de pie para buscar entre las cajas otra bebida. Lester bajó la mirada a su pie y lo miró unos momentos

-Recuerdo.. que cuando estaba en la casa de Patrick accidentalmente cayó café sobre mi pie. La cama estaba en llamas y creí que él estaría furioso conmigo pero...

Willy tomó una lata de refresco de fresa y se volvió con una sonrisa torcida, enseguida la borró al ver a Lester sollozando con las mejillas coloradas

-Él estaba preocupado, por mi quemadura. Incendié su cama y todo lo que hizo fue ser amable conmigo, incluso me ofreció su baño

-Lest..- se contrajo cuando el rubio soltó un grito

-¡Y todo lo que hice fue mentirle a la cara! No merezco que me ame, soy una persona horrible

-Hey,hey- Chilly se acercó con precaución y lo rodeó con un brazo, -No eres una mala persona, cuidaste de él en el hospital y le hiciste compañía

-Pero le mentí, tantas veces que ya no se si algo de lo que dije fue verdad

-¿Cuál es tu duda?

Lester miró al chico a los ojos con expresión lastimera

-Nada

-¿Cómo?

Lester se agarró la cabeza

-Nada,nunca le dije nada. No le dije lo que pienso, lo que siento cuando estoy con él. No le dije absolutamente nada mas que mentiras

Willy creía que el efecto de la cerveza accidentalmente consumida se estaba yendo y Lester estaba regresando a su constante estado nervioso.

-¿Y qué es lo que sientes?

Uno pensaría que el recuerdo mas preciado de Lester sería la apasionante noche que pasó en el cumpleaños de Patrick, pero eso no fue mas que una ilusión. El momento que mas atesoraba era el de la primera vez que sus manos se tocaron.

-La primera noche que pasé en su casa..

-¿Cuando llovía?

Lester asintió y se miró las palmas

-Él tomó mis manos suavemente y las llevó a sus mejillas, estaban cálidas comparadas a sus dedos. Su mirada era la de un niño buscando cariño; se veía indefenso, con miedo. Muy diferente a como es generalmente

-¿Sentiste lastima?

Lester se sonrió y apretó las manos contra su pecho, como si quisiera guardar esa emoción muy dentro suyo.

-Sentí amor. Esa noche.. me enamoré de Patrick

Willy apretó el agarre en su hombro y lo sacudió levemente

-Es bueno que lo aceptes. Ahora debes decirle

Lester entonces se levantó de la caja alejándose del chico y sacudió sus manos

-No,no. No puedo hacer eso

-¿Why?

-Patrick no.. Él jamas.. No podría soportar su mirada de burla

-¿Burla?- Chilly se puso de pie torciendo la cara en una mueca de confusión, -Patrick está desesperado por ti

-¿C-Cómo dices?

-Cuando le dije que vi a Johnny en tu casa con Martin se volvió loco. Ahora se que eras tú, eso explica porque enfureció

-¿Estaba celoso?

-Hasta inició una pelea por defenderte

Lester se agarró el brazo y mordió el labio. Él bien sabía lo que Patrick sentía, se lo había dejado mas que claro, pero creía que estaba enamorado de la ilusión que había creado aquella noche. No de Lester

-No creo que eso signifique algo

-Significa todo, mi amigo. ¡He is crazy for you!

Willy le regaló una gran sonrisa que no pudo evitar devolver

-Debes volver al hospital

-¿Y si no quiere verme?

-No puede moverse, no podrá echarte

-No se si..-

-¡Suficiente! Nos vamos pero ya

Tomó a Lester de la muñeca y lo arrastró fuera del almacén, fuera de su casa y lejos de esa calle de mala fortuna. Lo obligó a caminar a toda prisa, aun si sus pies se enredaran siguió tirando de él hasta que llegaron al hospital. Ingresaron y Willy le dio un empujón hacia el pasillo antes de despedirse y partir hacia el lado contrario, al cuarto de Johnny. Lester miró el largo pasillo, tomó aire, ajustó el talón de su zapatilla y caminó, dispuesto a dejar todo en claro de una vez por todas.