Recordar

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Hace poco tenía miedo de que al centrarme en el presente, en lo que está frente a mí, se me olvidara lo que no está frente a mí. Me daba miedo que aquello, por habérseme olvidado, hubiera dejado de existir. Pero hoy comprendí que las cosas no pueden olvidarse, no pueden dejar de existir tan fácilmente. Que estés en un cuarto no significa que lo que esté en el cuarto de a lado no exista. Si se te olvidó lo qué hay ahí, tan sólo es cuestión de que vayas a ese cuarto para que lo recuerdes. Lo mismo sucede con la mente. Sonará gracioso, pero hoy al despertar se me había olvidado por completo que ayer habíamos pedido pizza y que estaba en el refrigerador. Simplemente estaba pensando en mis cosas, cuando por alguna razón pensé en la cocina y entonces me acordé. Me sorprendió mucho que para mi mente la pizza no existiera poco antes de que yo pensara en la cocina, pero al pensar en ella volvió a existir. Tan sólo es cuestión de ir al lugar adecuado para recordar lo que allí había... Se trate de un lugar real o mental.

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