Thousand Passion

2

Este capítulo contiene Lemmon! No he querido hacerlo muy exagerado puesto que representa la primera vez entre Luffy y Nami. Poco a poco irán cogiendo experiencia ;)

Le costó dormirse pero por la mañana se levantó decidida. Había jugado con ella. Había hecho con ella lo que ella les hacía a los hombres, provocar. Nadie podría ganarla en ese juego.

Cuando Robin abrió los ojos vió a Nami prácticamente vestida, eso le extraño. Normalmente los días de resaca Nami dormía más que ella.

- Buenos días -dijo la morena.

- Luffy no tiene nada de inocente -fue lo primero que dijo la pelirroja- ¿Que tal estoy?

- Guapa como siempre- declaró la morena con una sonrisa. Vestía un vestido blanco ajustado con prominente escote- Aunque te he visto más engalardonada para conquistar a otros hombres.

- No quiero conquistarle... -se apresuró a decir Nami. La morena la miró interrogativa- quiero hacerle pagar por lo que me hizo.

- Como quieras llamarlo - dijo Robin riéndose- Pero creo que primero deberías darte una ducha, ¿no? Ayer bebimos mucho. Ambas olemos a alcohol.

La ducha le sentó de maravilla. Reflexiono y decidió que lo mejor era ir al cuarto de cartografía ese día. No podría mirar a Luffy sin ver a su nuevo yo. Cuando salió del baño la morena pudo ver que su amiga había desestimado la opción de conquistar al capitán, al menos de manera consciente. Vestía unos shorts azules, una camiseta de tirantes negra y un moño desordenado.

Desayuno rápido y anunció a todos los presentes que pasaría la mañana en el cuarto de cartografía. Debían mantener el rumbo, así de sencillo.

Se encerró en el cuarto y puso unos cuantos mapas sobre la mesa. Durante el desayuno Luffy la había mirado como de costumbre, no había ni rastro del coqueta de la noche anterior. "¿Seria el alcohol?" se preguntó a si misma.

- ¡Yoosh! Aquí estoy Nami - dijo la voz de Luffy des de la puerta. Nami le miro por encima de las gafas.

- ¿Qué haces aquí?

- Todo hacen cosas y Robin me dijo que si venía aquí podría ayudarte - declaró el moreno acercándose a la mesa y observando los mapas.

- No hay nada en lo que puedas ayudarme Luffy - suspiró la pelirroja- siéntate ahí si quieres mientras trabajo- el capitán hizo un puchero pero accedió.

El rato fue pasando, Luffy jugaba con su sombrero mientras Nami dibujaba el mapa de la última isla que habían visitado. De pronto no oyó a Luffy jugar por lo que supuso que se había dormido. Alzó la mirada para comprobarlo. No estaba dormido, la estaba mirando fijamente con esos ojos negros.

- ¿Pasa algo? - preguntó la chica un poco sonrojada.

- Eres increíble, ¿lo sabías? shishi

- Gra...gracias - contestó Nami un poco sonrojada pero volviendo a su trabajo. El capitán se levantó y se situó tras su butaca, observando como dibujaba la chica.

- ¿Vamos a ignorar lo de ayer Nami? shishi- la pelirroja dio un respingo. Estuvo a punto de tirar la tinta pero Luffy la sujetó rápidamente para que no destrozara el mapa. La apartó de la mesa.

- ¿Lo de ayer?- preguntó la chica manteniendo la calma.

- Iba borracho pero no tanto shishi ¿Tu no te acuerdas?- susurró el chico en su oreja- Te dije que no te escaparías.

- ¡¿Eh?!- dijo la chica levantándose de golpe y mirando al chico - ¿Quién eres tú? ¿Qué has hecho con Luffy?

El chico empezó a reír.