Capitulo 10

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     Miro mi celular por ya perdí la cuenta, Dios podía ser tan insistente mi amigo. Claro que si Saint era la perseverancia con piernas cuando de fastidiarme se tratara. Vuelvo a poner mi celular sobre el mostrador boca abajo y revuelvo mi pelo con furia para no gritar. Es que cuando le conté o mejor dicho se dio cuenta y me hizo confesar que había besado a Mew su primera reacción fue la de golpearme pero después fue la de darme las mil y una razones porque esto no era bueno, lo graciosos era que yo mas que nadie lo sabia. Ya había pasado una semana de eso y para variar y como buen cobarde que soy le evite de todas las formas posibles. 

-No es una buena imagen para mi consultorio que el enfermero mas atractivo del pais parezca un desquiciado al recibir a mis pacientes.- Dijo mi jefe apoyándose sobre el mostrador.-Dia difícil?

-Vida difícil-dije casi sin pensar.

-No se si podría resolverla pero podría tratar de hacerla entretenida y muy pero muy excitante-dijo en tono sensual y guiñandome un ojo

-De verdad eso te funciona?-le dije divertido

-Aunque no lo creas, si. He robado muchos corazones-

-De algún banco de órganos, porque de otra forma no lo entiendo

La carcajada que dio hizo que la gente que estaba en la sala de espera se volteara a verlo.

-Te recuerdo que estamos en un consultorio medico. Tu consultorio medico- dije 

-Ay Gulf,  es imposible no enamorarse de ti. Eres divertido, guapo y terriblemente sexy-dijo mientras se limpiaba una lagrima.- Sal conmigo, dame esa cita que tanto tiempo te he pedido, soy capaz de rogarte si hace falta- y se casi se trepo al mostrador para agarrar mis manos.

Era irónico que me dijera eso ya que la única persona de la que esperaba oír esas palabras hace quince años me había dejado llorando y embarazado y que cuando me lo dijo fue hace una semana en un auto y el estando casado. Dios podía ser todo tan complicado para mi. Millones de razones me venían a la cabeza diciéndome que esto era lo correcto y que lo otro llevaba los carteles de peligro y fracaso por todos lados. Mi cabeza lo entendía pero mi corazón al parecer no. Volvió a sonar mi teléfono dándome la oportunidad de  no solo zafarme de su agarre sino de no contestar. Acepte la llamada

-Debe haberte pedido matrimonio para que aceptes mi llamada como escape-dijo Saint. Gire para mirar la entrada y verlo parado mirándonos divertido.- Te espero para que vayamos a comer y no te atrevas a negarte ni a ponerme excusas-dijo

Lo mire y sonreí mientras asentía.  Mi jefe se giro y al verlo le sonrió 

-Acaso están telepáticamente conectados que siempre aparece cuando debes contestarme algo importante-dijo.

Y era verdad cada vez que me había acorralado para que le diera una respuesta para salir, siempre aparecía Saint a interrumpir para el y a salvarme para mi.

-Somos siameses separados al nacer-dije divertido mientras tomaba mis cosas para salir y dejaba mi puesto a mi reemplazo que iba llegando.- Hola Sam. todo sin novedad, solo quedan dos personas para atender por el doctor cuando se le ocurra volver a trabajar-dije

-Otra vez tratando de enganchar a Gulf, Doc. -dijo divertida

-Siempre -dijo- nunca me cansare de perseguirlo, bien vale el esfuerzo. Dame 5 y pasa a mi siguiente paciente. Hasta mañana mi bello Gulf-dijo y volvió a guiñarme un ojo mientras se iba.

Salude a mi compañera y camine hacia la salida para encontrarme con Saint en la puerta.

-Siéntate un minuto conmigo, necesito que me ayudes con algo-dijo y puede ver en sus ojos una mezcla de miedo y ansiedad.

Aunque el tiempo pase.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora