Zee abrió los ojos y se dio cuenta de donde estaba, tenía un horrible dolor de cabeza y vagos recuerdos de la noche anterior, los cuales azotaban su mente bruscamente.Una vez más, su novio había huido de él y él había buscado un consuelo en varias botellas de cerveza y en su amigo.
De repente miró su teléfono que estaba en la alfombrilla del coche, ya que había ido a parar allí luego de desmayarse hablando con su amigo.
Lo recogió y entonces vio que tenía diez llamadas perdidas de Jimmy y varios mensajes preguntándole donde estaba, este seguro se había quedado muy preocupado.
Sin demorar más, encendió el coche y se fue a casa donde poco después tras salir de la ducha, llamaron a su puerta y entonces abrió.
-Oh joder, Dios mío gracias que estás bien...te busqué por toda la cuidad, ¿Por qué no me cogías el móvil?- habló abrazandolo.
-Perdona amigo, me bebí unas cervezas y me quedé dormido...Lo siento por asustarte- se disculpó el moreno.
-¿Qué pasó?,Tú no sueles beber así- preguntó Jimmy muy desconcertado.
-Saint, eso pasa.
Su amigo volvió a abrazarlo fuertemente pues le preocupaba mucho ver como este sufría así por su novio.
Él mismo no sabría que hacer, la verdad ni se lo imaginaba pues si Tommy lo olvidara, seguramente se volvería incluso más loco que Zee, sin duda era una situación horrible.
Dos semanas después
El abogado estuvo muy liado con todos los casos que temía, deseaba ver al castaño más que a nada e el mundo y hablar con el pero había comprendido que este no lo recordaba y quizás jamás lo haría, por lo que debía aprender a vivir sin él aunque se muriese por dentro.
Deseaba escuchar su voz, sentir sus besos, quería tenerlo en su cama pero no le quedaba más remedio que aguantarse y soportarlo, este no lo quería cerca y él no lo presionaría más.
Además, si este algún día quería volver a verlo de nuevo, May sabía donde encontrarlo, así que se centró en el trabajo, sus clientes y sus juicios y también en sus charlas, sus reuniones con Jimmy y las asociaciones para seguir luchando contra la homofobia.
Por su parte, la anciana abuela de Saint estaba muy preocupada por su nieto pues éste no salía de casa y pasaba los días encerrado en su habitación, de la cual solo salía para comer algo o ver un poco la tele.
Incluso Mean había venido a casa para verlo pero no había querido recibirlo, estaba muy demacrado, mucho más delgado y sus ojos destilaban tristeza.
Este se veía cada vez más hundido en un pozo muy profundo y no sabía como salir, ya que sentía como si le faltase algo, como si estuviese incompleto.
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18. Amantes silenciados - Zaintsee Terminada
FanfictionZee Pruk es un abogado con las ideas muy claras, el cual tiene un sueño altruista que le traerá sorpresas inesperadas y también muy agradables, aunque inevitablemente mucho sufrimiento. Saint Suppapong es por el contrario, un chico sin pelos en la...