No puedo amarte (Hiro x tú) **En Edición**

Cap. 14

                       Hiro:

Estoy muy nervioso por nuestra cita, para ser honesto nunca he tenido mucha suerte con las chicas y las pocas personas que llegue a hablarles solo me buscaban porque les ayudaba a hacer su tarea.

Quiero que hoy sea especial, si Gina acepta salir conmigo esto será algo que recordaré el resto de mi vida. La camisa que traigo puesta no la había usado desde hace años, me sorprende que aún me quede, parece un smoking, es una combinación de formal con algo casual jeje.

Estoy en frente de la puerta de Gina, no traigo flores o una caja cursi de corazón con chocolates dentro, quiero ser distinto a todos los adolescentes enamorados por eso en vez de traer algo tan común como ese tipo de regalos yo traje una caja con caramelos de cereza (además es más probable que los acepte).

Gina abre la puerta, estoy hipnotizado, se ve tan hermosa. Su cabello amarrado y su vestido azul le combinan. Nada pasa por mi cabeza más que el nombre que empieza con G. Admito que si esto no es amor, no sé lo que es.

-Hola Hiro-

Su voz me hace volver a la realidad, no puedo creer que le vaya a pedir que sea mi novia. -Hola Gina- parece que tengo frío por que mis palabras suenan así.

-Entonces.... ¿Nos vamos?-

-Diviertase Sra. Hamada- dice Jake a lo lejos.

Ha pasado mucho desde que nos conocimos así que ahora sólo le seguimos la corriente a Jake, seré sincero él es la mejor persona que he conocido (aparte de Gina, claro está). Es un buen chico, desde que comenzamos a hablar siempre me ha motivado a demostrar mis sentimientos hacia Gina, por él hoy estoy aquí.

-Jake ya sabes que hacer- veo que la chica señala un arma con la mirada, aún me pregunto por que necesitarán un arma. He querido decirle que no se preocupe que todo estará bien porque yo soy el líder del grupo de superheroes de la ciudad, pero eso podría ponerla en peligro.

-Sí- el muchacho responde y esboza una sonrisa.

-Adiós Jake- ambos nos despedimos con una expresión alegre.

Antes de llegar a la costa me aseguro de que no vea nada para no arruinar la sorpresa, una cena ''romántica".

-Hiro dejame ver- dice entre risas

-En un momento- también digo entre risas.

-Esta bien- puedo sentir como sonríe, sus mejillas son muy suaves.

Le quito el vendaje a Gina para que pueda ver lo que he preparado por semanas, no es mucho pero di lo mejor de mí en esta cena.

-Oh Hiro...-

-¿Y bien? La especialidad de la casa, spaguetti-

Cuando terminamos de comer noto que ambos tenemos mucho en común, tal vez seamos nerds pero también somos personas. Ella tiene una mirada perdida en el mar y sus ojos brillan con la luz de la luna, quisiera observarla así todo el día pero tengo que decirle la razón de el porque está aquí.

-Gina... Yo...- quiero decirlo, de verdad quiero hacerlo pero simplemente no puedo. No dudo en darle la caja con los dulces, sabía que si mi voz no lo hacía un papel lo haría por mi.

-Repito, no eres como los demás Hamada- antes de que diga algo más lee la nota que escribí. Recuerdo bien lo que hay escrito:

<<¿Quieres ser mi novia Gina Blueman?>>

Su expresión cambia a una llena de alegría, en cuanto menos lo espero estoy perdido en el sabor de sus labios, ella sin dudarlo me besó.

-Supongo que eso es un sí je- estoy feliz, ¡Fue mi primer beso!

-¡Sí!- Gina vuelve a besarme, la calidez de sus labios me hace sentir amado. No me había sentido así desde hace años.

No hay nada que pueda arruinar este momento.

                       _____:

El calor de Hiro me recuerda al de mis padres, siento una felicidad que no había experimentado en mucho tiempo. Nada puede arruinar este momento ¿O sí?

Abro los ojos, a lo lejos veo a las mismas personas que me atacaron cuando espíe a Hiro.

No puedo permitir que él vea como los dejo nockeados  así que no dudo en aventarlo al agua.

El agua salada hace que los ojos del nerd se irriten y tenga que cerrarlos. Tengo tiempo. Cuando se acercan uso mis conocimientos para dejarlos inconcientes.

Todo pasa muy rápido, Hiro abre los ojos y aunque están rojos parece que no logra ver la evidencia.

Comienzo a temblar, la adrenalina de los ataques se pasó demasiado rápido. Hiro no pregunta, me coloca su suéter en los hombros. No sé qué decir, acabo de cometer un gran error.