No puedo amarte (Hiro x tú) **En Edición**

Cap. 15

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Hiro se despide de mi en cuanto marca la media noche, al llegar a casa hay una inmensa alegría que no puedo ocultar. Leo el papel una y otra vez ¿estoy soñando? Me pellizco para asegurarme, no. Es verdad.

Acaricio la suave caja de caramelos, en ese momento un nombre que no había oído en años pasa por mi cabeza, Sara.

Recuerdo esa noche, siempre lo hago. Jake y yo solíamos desvelarnos cuando mamá y papá salían. En la televisión estaban pasando una de esas películas antiguas, para mi hermano y para mí el cine era algo que nos apasionaba. Alguien llamó a la puerta, en aquellos días yo no tenía miedo de que fuera un mafioso o la policía quién estaba detrás de la puerta, no, más bien esperaba a mis padres con una sorpresa, algún tipo de dulces o pastelillos, pero no fue así. Un hombre de la policía local me miro y fue cuando sentí un inmenso dolor. Todo se detuvo. A la mañana siguiente, vimos a mi tía llegar a la casa, su mirada compasiva era algo que jamás habíamos visto.

El funeral se llevó a cabo en nuestro antiguo hogar ¿cómo una chica de 10 años podría sobrevivir algo como eso? Mi tía tenía que volver a California y, sin el dinero nuestra última oportunidad era el orfanato. Fue cuando mi amiga Sara me propuso algo que me cambiaría de por vida.

Una joven de 14 años me había ofrecido un trabajo y parecía demasiado fácil, era muy buena fingiendo, además nos ofrecían un hogar y protección, cualquier niño hubiera caído como yo lo hice. Sara y yo nos separamos después de mi segunda misión. No perdí contacto con la hermana de mi madre y ella creía que una vecina se había ofrecido ser nuestra tutora para no tener que mudarnos, aún cree eso.

Las misiones eran algo sencillas, primero fuí una huérfana, después una alumna y al final una jóven prodigio...

A pesar de ya no estar juntas, Sara y yo seguimos en comunicación.  Ella se encontraba en San Fransokio realizando una misión, Tadashi, así se llamaba el chico que acabó con mi amiga.

- Lo amo _____, hablo en serio. Huiremos si es necesario. Prométeme que estarás bien- Fueron las últimas palabras de mi amiga. Dos días después ocurrió un accidente en la universidad donde Tadashi y Robert Callaghan murieron. Mi jefe busco a Sara pero nunca la encontraron.

-¡____!- Jake me despierta de mis pensamientos. Cuando reacciono mis manos están fuertemente agarradas al sofá y me veo envuelta en una capa de sudor. -¿Estás bien? ¿Cómo te fue con Hiro?-

-Bien, creo- Una sonrisa aparece en cuanto toco la caja que él me dió.

-Conozco esa mirada ¿Lo amas cierto?-

-¡No! Él es sólo una misión-

-Sabes que no puedes amarlo- Jake se sienta y me toma de la mano- No quiero que nos pase lo mismo que a Sara, no puedes permitirte amar- Sus palabras son frías de verdad mi hermano ha madurado.

-Lo sé- digo tristemente.

Amo a Hiro y mucho pero al aceptar ser su novia puse en peligro todo, no tengo otra opción, tendré que robarle ya su información.