EL MUNDO ES UN PAÑUELO

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Los personajes no me pertenecen, exclusivamente a sus creadores. Mundo alterno época actual. Contenido Adulto. Sexo explícito. Queda advertido.

El mundo es un pañuelo.

Albert seguía con su labor maratonica, finiquitando todo para su viaje a Escocia. Cerraría todo. En su mente estaba la idea de vivir en ese país.

Se le veía  desmejorado anímicamente y más por lo que se había enterado. Había  descubierto las trampas de Niel Legan, su asesor y mano derecha. No podía creer lo ciego que fue, en confiar en él, nunca imaginó que él estuviera manipulando la información, acerca del paradero de Candy. Para él fue una gran sorpresa y decepción de todo lo que se enteró.

Flash back

Un mes atrás... Albert tenía algunos días de descanso, aunque podía viajar a Escocia, para ver a sus pequeños, decidió quedarse en América. Aprovecharía esos días para buscar personalmente a su diosa. A pesar de lo ocurrido con el escándalo y sus consecuencias, contaba con la amistad de Terry y Stear, amigos desde la infancia, aunque no había tenido tiempo para reunirse con ellos, no ha perdido contacto con ellos. Las maravillas de las redes sociales, acercan a las personas. Había quedado con ellos esta noche, tomarían una copa como antaño, como cuando eran solteros.

Quedó con ellos en un bar muy exclusivo y como siempre causó revuelo su llegada al lugar, su equipo de seguridad. Albert entró al lugar y vio que sus amigos ya estaban esperándole, se acercó.

- ¡Dichosos los ojos!. Dijo Stear en son de broma. Un gusto volverte a ver, varios meses sin saber de ti, ¿Verdad?

- Es verdad Albert, eres todo un magnate en ascenso, leí en los periódicos, que tienes de rodillas a los japoneses. Dijo Terry socarronamente... abrazandose como antaño.

- ¡Que graciosos!.  como siempre. ¡Amigos!. La conversación se tornó amena y divertida, se pusieron al día con sus cosas, como hombres de negocios y cargos importantes su vida era muy buena en todo sentido. Bebían y chanceaban como adolecentes, recordando anécdotas de toda la vida. Entonces sin esperar más Stear comentó.

- ¿Y qué tal, llevas lo del escándalo?. ¿Qué dice tú asesor?. Sabes amigo debo decirte algo muy delicado referente a él... Stear guardó silencio, ya qué quizá no sea buena idea, tocar el tema.

- Pues, creo que ya se calmarón las aguas, todo fue muy intenso, pero creo que todo salió bien. Y referente a Niel, es eficiente, responsable, me funciona. Contestó Albert. - ¿Por qué la pregunta?.

- Sabemos que no es buena idea comentar lo sucedido con lo del escándalo, pero hay algo muy importante que debes saber, acerca de Niel. Comentó Terry serio.

- Creo que no es buena idea retomar ese tema, ¿No creen?. Dijo Albert, dando un sorbo a su copa- Además no entiendo que tiene que ver Niel con lo que sucedió.

- Solo te puedo decir que Niel es una basura y te odia, de hecho por eso insistimos en reunirnos. Dijo Stear. - Esto es muy grave.

Albert fruncio el seño, al ver a sus amigos muy serios, se dio cuenta que era importante, así que tendría que escucharlos.

- Muy bien. ¿Qué pasa?- preguntó Albert preocupado. Y Terry habló.

- Iré al grano, hace como tres meses nos topamos con Niel en un bar, andaba muy pasado de copas, se acercó a nosotros y nos invito unos tragos, al principio nos disgustó, pero empezó a blofear acerca de que tú no eras nada sin él, que tú te adjudicaste la negociación de los japoneses, negocio  que había logrado él. Y que tu jamás valoraste su esfuerzo en la negociación. Que si hubiera nacido en cuna de oro como tú, también podría haber sido un grandioso hombre de negocios, pero que aunque tú lo tuvieras todo, él te había ganado en algo.

LUJURIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora