Capítulo 4. Estar Presente

617 66 52
                                    

Durante los siguientes meses uno pensaría que las cosas continuaron de maravilla pero la realidad es que no, tiempo antes de que saliera embarazada del segundo bebé, tuvo una pelea fuerte con Luis Miguel, lo que tuvo cómo consecuencia su separación por un tiempo, claro que el parecía arrepentido y ella decidió regresar a casa con el pequeño, aquel patrón de "nos arreglamos, todo funciona bien y luego volvemos a lo mismo" había regresado, uno de los problemas fue por Michelle, no pasó mucho tiempo después de aquella charla en la que la primogénita charló con su madrastra de un amor que comenzaba a sentir cuándo decidió confesar la identidad de esa persona.

Pensarán, ¿Qué hay de malo en eso? Bueno su gran "amor" era nada más que el mánager de Luis Miguel, todo lo que podía salir mal, pues salió extremadamente mal, Aracely iba prácticamente sola a sus controles, a comprar lo necesario para el nuevo bebé y claro cuidar de Migue, el "papá" se aparecía borracho o simplemente ni aparecía, claro que para las fotos en la revista Hola si estuvo, fingir ser buen padre/esposo ante las cámaras era muy fácil, pues Aracely trataba de comprenderlo por todo lo que había sufrido años antes, no puedes exigirle a una persona que dé amor, cuándo nunca lo recibió, pero claro tampoco significaba que ella fuera su tapete, sólo que aquí existía otro factor determinante, lo amaba y aún en el fondo creía que iba a cambiar.

Hasta que el comenzó a engañarla, eso había sido suficiente, colocó una sonrisa en su rostro y salió a trabajar todos los días, aún con aquella panzota que se cargaba, sus papás vinieron desde México para cuidar de Migue, pues cómo Luis se había mandado mudar a uno de sus departamentos, tenía la total libertad para hacer lo que se le viniera en gana, ya que los papeles del divorcio se estaban preparando, claro estaba que Aracely se quedaría con los niños pero compartirían la custodia aún así, por suerte siempre fue una mujer precavida, sabía que el dinero nunca dura para siempre, no tenía un gran sueldo cómo conductora pero pues era un ingresó, sus papás se comprometieron con ayudarla pero ella se negó, tenía una cuenta en el banco, a lo largo de los años fue depositando dinero en ella.

Luis se haría cargo de los gastos que llevaban en el hospital pero saliendo de allí, toda la responsabilidad caía sobre Aracely, bueno no toda pero si gran parte, ya que recibiría lo que a los niños les toca, el embarazo de Dani fue difícil emocionalmente, no podía permitirse el lujo de llorar por aquel amor que terminó de aquella manera tan fea, sus hijos no tendrían a su papá cerca pues era artista y parecía más interesado en ello, se sentía culpable por tener que hacerlos pasar por esa situación, de todos modos el apoyo que recibió de su familia la ayudó a sobreponerse, no importaba lo que viniera de aquí en adelante pues ambos serían amados incondicionalmente.

El 18 de Diciembre, Aracely despertó abruptamente a las 8:00 de la mañana, sintiendo esos dolores tan horribles, fueron al hospital enseguida y ya desde ahí le avisaron a Luis quién no tardó mucho en llegar, fue la primera vez que estuvo a tiempo después de tantos meses, las contracciones fueron subiendo de intensidad rápido, Doña Coco se encargó de tranquilizarla pues estaba preocupada por Migue, habían salido tan pronto que no se detuvo a preguntar con quién lo dejaron, pero el estaba bien, su tío Leo lo vigilaba, exactamente a las 10:20 comenzó a pujar, Daniel nació a las 10:45 con tres kilos y medio, tenía 53 centímetros al igual que Migue, todo apuntaba que sus dos niños serían altos en un futuro.

Estuvo algo avergonzada la primera hora de vida del pequeño, ya que ella había jurado que está vez se trataba de una niña, después de pedirle perdón varias veces, dejó el tema atrás, ella y Luis se encargaron de registrar el momento con fotografías dejándole saber a ese pequeñito que ambos estaban muy felices por su llegada, porque así era, el amor entre ambos murió pero Luis quería mucho a sus hijos. Sin poderlo evitar Aracely entro en una depresión post parto, era normal por todo lo que había pasado durante el embarazo y claro lo que vino después, quiso refugiarse en el trabajo volviendo a la tv con Corazón Salvaje, claro que llevar la maternidad junto con el trabajo le fue demasiado difícil, casi no los veía por estar trabajando y bueno a su padre no lo veían por la misma razón.



- Mamá? -- cierra la puerta dejando el paraguas en su sitio -- Ya llegué! Me dieron libre ya que la lluvia está haciendo imposible grabar hoy -- dejá su bolso sobre el mueble -- Dónde andan mis amores?

- Estamos aquí en la cocina hija! -- alza la voz para que la escuchará

- Por suerte estamos en la recta final -- sonríe cargando a Migue quién estira los brazos a ella -- Hola mi cielo -- besa su mejilla varias veces

- Mamá -- la abraza del cuello esbozando una sonrisa

- Ay no tienen idea de lo mucho que los extraño -- lo aferra a ella -- Cómo se andan portando?

- Ay hija, tú sabes que bien -- sonríe mientras le da de comer a Dany -- Ellos son unos angelitos

- Mamá, me siento culpable por dejarles todo a ustedes -- suspira

- No te preocupes, tú estás trabajando para darles un futuro de aquí en adelante -- la encara -- Eso sí Aracely, tienes que tratar de estar más presente, sino Dany terminará olvidando quién eres

- Ay mamá, ni lo digas! -- carga mejor a Migue -- Ya todo esto se está acabando, prometo tomarme unos meses para estar aquí presente

- Hija no necesitas hacerme promesas -- toma la servilleta -- Sabes lo que haces, yo sé que te mueres de amor por ellos -- sonríe -- Haz todo lo que tengas que hacer y luego ven a abrazarlos

- No sé que sería de mi sin ti! -- va y besa su mejilla

- Uhmm -- se queja Dany teniendo la boquita abierta

- Mejor no me distraigas -- ríe -- Aquí hay hambre y se pondrá de mal humor si no se le quita

- Uy! Que carácter -- niega riendo -- Vente Migue, dejemos que ellos terminen aquí mientras tú y yo vemos caricaturas -- va con el a la sala



Y Justo cómo Doña Coco le había advertido, Dani olvidó quién era su verdadera mamá, tampoco disfrutaba mucho estar en los brazos de Ara, sólo quería los de su Tita, por otro lado Migue, cada que la tenía ahí cerquita no se le despegaba, todo el tiempo la jalaba del dedo para enseñarle cualquier cosa, hasta su calcetín de perritos con tal de que ella riera o saliera dándole elogios por tan bonito calcetín, luego de aquella llamada de atención decidió no tomar otro proyecto para quedarse en casa con sus dos hijos, no tardó mucho en ganarse de nuevo a Dani, aunque fueron días duros, luego llegó su primer cumpleaños que lo festejó con ambos padres presentes y lo mismo con Migue que cumplía los dos años.

Te Amo! Entiendes?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora