Eighteen ~ Calum Hood

Curiosidad

Después de algunas horas en completo silencio mi mamá llegó disculpándose, Calum solo negó y le dijo a mi madre que no se preocupara que yo estaba bien, habló algunos segundos con mi madre y cuando terminaron de hablar entró a su casa y ni siquiera se despidió, en eso terminó el encuentro con el extraño vecino que me caía extrañamente bien y a quien por alguna razón desconocida le tenía confianza.

Al otro día después de la escuela, suspiré corriendo hacia mi casa esta vez sí llevaba sombrilla aunque igual me estaba mojando pero solo los pies, vi a Calum sentado en su pórtico de nuevo con un cigarrillo y una cerveza, así que frené de golpe y con mucha curiosidad corrí hacia él, suspiró estresado y apagó su cigarrillo en el cenicero y me vio

─ Veo que al fin entendiste que debes traer sombrilla –habló burlándose de mí y yo gruñí.

─ Si, lo entendí –lo observé mientras se levantaba, aquellas bolsas negras debajo de sus ojos lo hacían ver tan mal que me preocupé bastante, pero no comenté nada, realmente no creo que el desee hablar de esos temas con una extraña─ Te traje tu chaqueta creo que es correcto que al menos te la devuelva –el me observa en silencio y suspira para después con suavidad jalarme al pórtico

─ Te estas empapado niña tonta –suspira─ Gracias ─abre la puerta de su casa e ingresa para hacer una serie de cosas, primero pone su cigarrillo y su cerveza en el mueble de la cocina y después regresa a tomar la chaqueta de mis manos y ponerla en el sofá, yo como toda niña tonta entro a la casa y el gruñe viéndome algo desesperado

─ ¿Solo comes pizzas? –el me observa y gruñe mientras yo veo su casa con total confianza como si lo conociera de años, me enfoco en unas fotos de la sala e ingreso para revisarlas el me observa mucho más sorprendido como si no comprendiera que rayos estoy pensando.

─ ¿A ti no te enseñaron que entrar a casas de extraños te puede traer problemas como una violación y asesinato niña tonta? –el gruñe observándome harto mientras yo camino por la casa como si fuera mía

─ Si, pero tú eres confiable –lo veo y el suspira tocando sus sienes bastante harto de mí y mi actitud tan confianzuda de vida─ ¿Quién es ella? –señalo la foto de la chica muy parecida a él y sonrío─ Es linda, ¿Es tu hermana? –El gruñe tratando de ignorarme pero suspira

─ Si, y no te importa sal de mi casa niña –yo lo ignoro completamente mientras veo su casa en silencio y sigo caminando por ahí, lo estaba desesperando pero quería saber más de él pues me daba curiosidad

─ ¿No sabes cocinar? –el gruñe viéndome caminar por toda su casa

─ No te importa –habla serio y toma su cerveza y camina a la sala enojado─ Sal de mi casa enserio.

─ ¿Vives solo? –hablo curiosa ignorándolo nuevamente y el bufa cansado

─ Mira niña tonta sal de mi casa y deja de hacer tantas preguntas, eres estresante y torpe tus padres debieron enseñarte a no confiar en la gente tan fácilmente y menos en los hombres las chicas que hacen eso terminan mal, torpe niña tonta –camina hasta mí y con delicadeza me saca de la casa, genial ya tenía dos insultos en mi apodo

─ Yo solo tengo madre –él gruñe cansado mientras me mira desde la puerta y bufa

─ Pues con más razón –me cierra la puerta en la cara y yo suspiro saliendo del pórtico y caminando a casa en silencio.