𝘌𝘱𝘪𝘴𝘰𝘥𝘪𝘰 𝘐𝘝

648 95 8
                                    

"Como siempre, cuando me alejo de ti, tomo dentro de mi tu mundo y tu vida"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"Como siempre, cuando me alejo de ti, tomo dentro de mi tu mundo y tu vida"

—Frida Kahlo

   Empujaba el carrito, mientras una platica entre los dos ocurría

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

   Empujaba el carrito, mientras una platica entre los dos ocurría. Damian quien tenía su sudadera roja se puso la capucha de la misma ocultando su identidad tras ésta.

-¿Vas empezar? —El precio de las papas era elevado pero valían la pena al comer el puré de papas.

-¿De qué hablas? —Miro los pepinos agarrando tres.

-Ocultarte. —Dijo eligiendo ahora tomates y jitomates.

-¿Esto? —Señalo su sudadera. -Ya te lo he dicho, es molesto que se me queden viendo. —Rió. -¿De que ries loca?

-¿Te da pena que te vean? —Tomó cinco bananas. -¿O vergüenza? —Damian carraspeo.

-¿Yo?, ¿vergüenza?, jamás. —Rossi agarro una sandia de gran tamaño poniéndola en el carrito.

-¿Y que me dices del día en que entre a tu cuarto y... —Sus ojos se abrieron lanzándose directamente a callarla. -Hmm.

-¡Dijiste que lo mencionarias nunca! —La gente a su alrededor se les quedaba viendo algunas se quedaban "eligiendo verduras", pero claramente se quedaron cerca para escuchar mejor.

-¿De qué hablas histérico? —Dijo después de apartar la mano de Damian de su boca.

-¡De eso! —Sudo frío. -Dijiste que del cuarto no saldría.

-No estoy hablando de ese día aunque ahora que retomamos el tema... ¿por qué te estabas viendo al espejo con una cara tan extraña? —Jaló del cordón de su suadera haciendo que su rostro fuera ocultado por la capucha de la misma al menos no era ese día sino otro pero... era igual de humillante.

-Me estaba peinando para... para... —Titubeaba no era frecuente y resultaba fuera de otro mundo.

-¿Raven? —Preguntó empujando nuevamente el carrito. -Pero si en tu familia todos son la guapura en persona... dudo que necesites peinarte para verte "mejor". —El pelinegro pateo su espinilla. -Vete calmando Damian yo no me llevo así contigo además... sabes que tengo razón. —Advirtió subiéndose a la parte baja del carrito para alcanzar una caja de galletas. -Tu padre, tu abuelo y... ¿tú bisabuelo? han sido galanes de telenovelas y tú no eres la excepción. —Una señora de la tercera edad se acercó, haciéndola callar inmediatamente.

𝘕𝘶𝘦𝘴𝘵𝘳𝘰𝘴 𝘊𝘰𝘳𝘢𝘻𝘰𝘯𝘦𝘴♡ -𝐃𝐚𝐦𝐢𝐚𝐧 𝐖𝐚𝐲𝐧𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora