𝘕𝘶𝘦𝘴𝘵𝘳𝘰𝘴 𝘊𝘰𝘳𝘢𝘻𝘰𝘯𝘦𝘴♡ -𝐃𝐚𝐦𝐢𝐚𝐧 𝐖𝐚𝐲𝐧𝐞

𝘌𝘱𝘪𝘴𝘰𝘥𝘪𝘰 𝘝𝘐𝘐𝘐

"Si quieres soportar la vida, prepárate para la muerte"

—Sigmund Freud

   La verdad tras ser más cariñoso con Rossi estaba más cerca de lo que parecía, le resultaba tonto y a veces... preocupante... como si sus sueños fueran una premonición apunto de ocurrir frente a él y lo agobiante resultaba siendo en no poder hacer nada para evitarlo por que hiciera lo que hiciera terminaba acabando en el mismo resultado... Rossi se iría de su lado. ¿Era egoísta querer estar junto con ella para toda la vida?

-Lo es. —Golpeo el saco de boxeo sin piedad.

   Y aún sabiendo que era un pensamiento egoísta quería luchar contra lo que le impidiera estar con Rossi.

   Golpe tras golpe lo ayudó a aliviar su ansiedad pero no del todo... y menos al tener el color rojo en el saco, lo atacó como si de una persona se tratase, una a la que parecía ser su peor enemigo. El odio hacía aquel color era visible.... ese tipo... estaba cerca...

-Tranquilo campeón es solo un saco. —Ella estaba aquí, régulo su respiración dándole una última patada al saco.

-Lo sé. —Contestó ido, Alejandra se acercó a él limpiando su sudor con una toalla.

-Pero no lo parece, es el segundo saco que deformas en la semana. —Bostezo rascándose detrás de la oreja. -¿Qué tienes? 

-Nada. —Rossi no le creyó.

-¿Qué es lo que quieres preguntarme? —Reconocío esa mirada al instante, siempre la ponía cuando quería preguntarle acerca de su pasado. -Reconozco esa mirada, así que pregunta lo que quieras preguntar no te voy a morder ni nada.

-¿Qué tan cercana eras a Red? —Sorbio su nariz, se sentó en el suelo cruzando sus piernas al igual que sus brazos.

-Te dije que éramos amigos. —Aunque le hubiera gustado ser más que simples amigos.

-¿Lo quieres? —Alzó la ceja bastante aturdida.

-Es obvio... era mi amigo... —Flexiono su cuello a la izquierda, evitando el contacto visual. -Lo estimó mucho por lo que hizo por mi.