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Japón es, sin duda, uno de los países con mayor tradición mitológica. Podemos encontrar espíritus y fantasmas japoneses en centenares de leyendas cuentan desde la creación del archipiélago, hasta las gestas más increíbles de grandes guerreros y humildes campesinos. A menudo, estas historias tienen sus raíces en el sintoísmo, religión autóctona del país basada en la veneración de los kami (神) o espíritus de la naturaleza.
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Una creencia que desde siempre buscó una relación causa-efecto entre los fenómenos naturales y paranormales y los kami. Así pues, no es de extrañar que a lo largo de los años hayan surgido innumerables historias de seres del inframundo en el folclore tradicional del país asiático. En el artículo de hoy de Go! Go! Nihon haremos un repaso a las categorías de seres fantasmales más importantes que pueblan la rica mitología japonesa. ¿Preparados para pasar miedo?
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La importancia de los seres paranormales en el folclore japonés
En la actualidad, los japoneses han colocado a fantasmas, demonios y espíritus en un lugar destacado de su rica cultura. La televisión, el cine, las artes escénicas, el manga o el anime se han convertido en el principal vehículo para la internacionalización de la mitología fantasmal japonesa.
Los nativos son de la idea que el mejor antídoto contra el calor bochornoso es un buen escalofrío. Por eso, la tradición de dedicar el verano a estos fantasmas japoneses se remonta 1.500 años atrás. Se les conoce como obake (お化け) o bakemono (化け物), “monstruos” en su traducción más genérica. Dentro de la mitología japonesa existe una amplia tipología de bakemono que van desde los clásicos fantasmas, pasando por demonios, duendes, espíritus de humanos, de animales e incluso de objetos como sombrillas.
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Yōkai (妖怪)
Dentro de los fantasmas japoneses los yōkai son criaturas vivas no humanas. Parte fundamental del folclore y la cultura japonesa, aparecen frecuentemente en las series de anime. Gran cantidad de Pokemon, así como personajes de las películas La Princesa Mononoke, Mi Vecino Totoro o El Viaje de Chihiro de Studio Ghibli están inspirados en los yōkai.
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Según el rol que interpreten dentro de la mitología japonesa, estos seres asumen distintas apariencias: desde animales, ogros, demonios o semihumanos, pasando por objetos y transformaciones humanas. Otra de las peculiaridades de los yōkai es que pueden ser inofensivos, tiernos, aterradores e incluso violentos y peligrosos. Y juegan con ventaja, ya que son inmunes a cualquier ataque que provenga de un ser humano vivo. De actitud arrogante, lo más común es tener problemas con ellos si decidimos no evitarlos. Según la tradición, para librarse del acoso de un yōkai lo mejor es acudir a un monje que cuente con la bendición de Buda. Yūrei (幽霊)
Se trata de la versión japonesa de lo que podríamos entender como fantasma, es decir lo que sería los fantasmas japoneses. En occidente, los fantasmas interactúan con dificultad con los seres del mundo físico. Puertas, ventanas y objetos varios pueden moverse, incluso romperse a su paso pero, generalmente, son de carácter inofensivo. Buscan comunicarse con sus más allegados para poner fin a algún asunto que no pudieron terminar en vida.
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En el caso de los yūrei japoneses, se trata de seres humanos que, sin abandonar su cuerpo, se quedaron en la tierra atormentados por un fuerte sentimiento de rencor, odio, o incluso de amor.
En los grabados, pinturas, manga y series de animación japonesas los yūrei suelen mostrarse como mujeres vestidas con ropajes blancos, pelo largo negro y la cara desfigurada. Sadako, protagonista de la conocida película de terror The Ring, es un claro ejemplo de este tipo de bakemono. Estas películas pusieron de moda en occidente el género cinematográfico del j-horror o Japanese horror, del que también es claro exponente La Maldición. Que los yūrei sean caracterizados muchas veces como mujeres se debe a que los japoneses creen que estas sienten emociones más profundas y fuertes que los hombres. Los yūrei pueden ser peligrosos ya que suelen buscar venganza contra aquellos que les causaron dolor en vida. Solo desaparecerán cuando hayan saciado su sed de venganza.
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En próximos capítulos nos adentraremos más en la rica mitología fantasmal japonesa.
