Pesadillas

Introducción

Nunca me he puesto a pensar en qué momento de nuestra vida es que dejamos de recordar, como muchas personas han dicho antes, "desde que tengo memoria". Es algo incierto, ya que, si pudiésemos recordar desde que éramos recién nacidos, nuestra personalidad sería otra. Estamos hechos de recuerdos, como una vez escuché por ahí, el mundo se compone de historias, no de partículas, si, vaya manera de romantizar el mundo real.

Desde niño me he considerado una persona tímida y asustadiza, eso no quiere decir que no me gustasen las obras o las películas de terror. Aunque "It" el payaso me asustase, yo seguía mirándolo en el televisor, quería ver si de verdad el trabajo en equipo podría vencer un ente maligno, un ente que se alimenta de los humanos. Y algo que entendí en mi pubertad fue que nosotros mismos nos atormentamos con ideas en nuestra cabeza, ideas que le dan "poderes" a las cosas más insignificantes de nuestro alrededor. ¿Acaso no le temías al coco de pequeño? ¿O a ir a la nevera por un bocadillo cuando todas las luces de tu casa están apagadas? Yo le temía más al patio de la casa donde crecí, era de no más de tres metros cuadrados, sin embargo le temía bastante de noche, también de día pero era por la noche cuando me resultaba imposible salir tan siquiera a dejar la basura. Pero hay una historia detrás, si puedes descifrarla en alguna de estas historias, felicidades, eres una persona muy observadora.

Pesadillas comenzó como una obra en la cual todos los sueños que había tenido últimamente eran expresados en relatos con un poco de exageración, dramatizando con el objetivo de empatizar con el lector, que estoy bastante seguro de que este también ha tenido sueños en los cuales ha despertado casi con lágrimas en los ojos. Una mañana desperté, había tenido una de las pesadillas más fuertes de todas, y como spoiler te diré que es por eso que "La Caída de Todos Nosotros" existe en esta obra. Mis ojos estaban ya bastante húmedos, un nudo en mi garganta y un frío fuera de lo normal. Eran las cuatro de la madrugada, en una hora más tenía que estar en mi lugar de trabajo, no era complicado llegar, a pie hacía unos quince minutos aproximadamente, y en auto menos de cinco. Ese día tuve que tomar un taxi, me sentía bastante atormentado aun, luego de aquel sueño horrible. No me tranquilicé hasta que llego mi antigua jefa, gracias a su platica me pude distraer un poco de lo que aún tenía en la cabeza.

Demonios, viejo, no sé cómo definir el género de esta obra, está claro que es producto de mi imaginación de niño de primaria. Pero bueno, es a través de la imaginación que el ser humano ha creado entretenimiento para todos. "Pesadillas", lejos de ser una lluvia de ideas, es la interpretación del subconsciente mío de la realidad y de aquello a lo que muchos como yo tememos.

Imaginemos que duermes pensando en alguna película que viste antes de dormir, imaginemos que se trata de "Saw", aunque bien esta no es del todo una película de terror, hay escenas en las cuales es impresionante la manera en la que se tortura o se manipula al cuerpo humano. John Kramer era un genio, si bien lo hemos visto en muchas reviews de la saga, parecía un hombre inofensivo, y eso lo volvía aterrador. En fin, es muy probable que en tus sueños te veas a ti o a algún ser querido dentro de esa trampa para osos, o buscando una llave dentro de un frasco lleno de ácido. Despiertas, y el sentimiento que hay después de eso no es bueno, aún tienes la noción de estar en aquella trampa tratando de escapar.

Pero una película de terror no es lo único que provoca que el ser humano tenga pesadillas, pueden ser incluso sucesos "reales" que llegan a marcar a la persona casi de por vida.

Para no volver esto más largo, te dejo aquí un poco de mi, unas cuantas historias, producto de una pesadilla. Gracias por quedarte hasta esta parte, espero que lo hagas también al final de cada capitulo. Puedes buscarte debajo en los agradecimientos.

AGRADECIMIENTOS

A mis padres, Aurea y Daniel, gracias a ustedes no tendría la inspiración para escribir, vencer el miedo a ser leído y escuchado.