Capítulo 22

63 8 2
                                    

Moshi Moshi Starcitos! Espero que se encuentren muy bien, siento la tardanza con la actualización. Fue una semana muy complicada entre tantos trabajos, pero ahora ya estoy segura de decir que estoy libre y seguiré con ustedes hasta el final.
En fin, disfruten este capítulo con un pequeño lemon 7w7. Es recomendable escucharlo con la canción para mejor experiencia.
Sin nada más que decir, disfruten✨

—Rave🍁

🔓

Llevaba pensativa por mucho tiempo, su rostro era indiferente pero a la vez, desolador. Su corazón fue robado por el chico con el que antes fue su abusador y se convirtió en una compañía que ella no deseaba perder. Sin embargo, también estaba dolida. Elliot, ahora solo lo podía considerar un compañero. Intento como pudo enamorarse o demostrar mínimo un poco de amor hacia el, pero no lo consiguió. Al menos nadie le diría que no lo intento, verdad? Lo que si, se sentía culpable pues al inocente compañero no le había revelado aun de las "aventuras" que tuvo con su amante en medio de su relación. Lo apreciaba demasiado, tenia que intentar decirle esta confesión aunque eso costará su confianza. Esperaría hasta el cumpleaños número 5 de Shopie, en ese día seguramente secretos serán revelados y relaciones se fomentaran o se romperán, solo el destino podía decidir ahora.

La muchacha escucho los golpes en la puerta, indicando que su enamorado había llegado. Soltó un respiro para tranquilizarse, y se dirigió para abrir. Al darle la bienvenida al chico, este se había quedado anonado con el vestuario extravagante y dulce que se había colocado. Consistía en un resplandeciente vestido rosa, llevaba diseños de botones blancos en la parte baja del vestido, y en la parte superior un encaje de un listón en la cintura. Solo podía pensar en lo adorable que se veía. Mientras que el vestía un atuendo informal y decente.

–Ya Díaz, deja de babear y mirarme así–. Exclamo la menor teniendo sus mejillas marcadas con el tono carmesí, le avergonzaba que el chico fuera tan tierno con esos gestos por ella.

–Lo-Lo siento Star! Yo... Es que... Wow... Te ves tan encantadora con ese vestido. Y me haces recordar... A la Star del pasado, esa niña extrovertida que vestía siempre vestidos infantiles cortos para su edad–. Star formo una carcajada en medio de su sonrojo, le gustaba que Marco por lo menos recordará detalles de lo que fue su bella amistad cuando eran unos simples niños. Eso era algo nostálgico que ambos recordaron al mismo tiempo, como si se pudieran complementar.

–Jaja, ojalá no cambies esa actitud de idiota enamorado–. Dijo con broma, recibió una queja por parte de su compañero que la hizo divertir más.

Entraron al departamento, y lo primero que se encontró fue una cuna especial para bebé junto con la pequeña criatura sentada y entretenida con sus pequeños dedos sobre el sofá.

–Star, por qué tienes a un bebé?–. Cuestiono confundido viendo a la rubia tomar al bebé entre sus brazos y sentarse nuevamente al sofá.

–Te olvidaste? Soy cuidadora de niños los fines de semana. Ya sabes, me llama un padre y me deja al niño o bebé para cuidarlo el tiempo que requiera–. Contesto moviendo lentamente a la bebé entre sus brazos, su acompañante se sentó a su lado admirando como Star cuidaba al menor–Se llama Camila, no es un encanto? Tiene una hermosa sonrisa. Anda, saluda–. Añadió suavemente. El castaño saludo a la bebé con caricias suaves en la cabeza, provocándole pequeñas risas que contagio a ambos adultos.

–Te ves tan linda con un bebé en brazos–. Alago admirando a la chica con dulzura.

–Díaz, no te ilusiones. Ya se desde el día en que fuimos al bar que quieres tener mil bebés conmigo–. Advirtió con un humor acompañada de una carcajada al ver el rostro sonrojado del chico.

My Most Precious SecretDonde viven las historias. Descúbrelo ahora