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Hermana, un título que muchos tienen pero pocos lo aprecian, vaya que ser una hermana era totalmente ¡increíble!, ver a los pequeños correr hacia ti con esos bellos ojos llenos de ternura y felicidad, la inocencia que reflejaban sus actitudes y apariencia. Era algo totalmente hermoso.

Pero.... Ser madre, también es algo lindo, a pesar de que los niños no sean tuyos, sientes ese apego emocional hacia ellos, sientes el cariño que te comparten con un simple abrazo, las tiernas y aneladas palabras "te quiero mamá", vaya que muchas darían lo que fuera por escuchar tan espléndida frase.

Lamentablemente para Krone no era haci.
Un sol yaciente en el cielo junto con el sus rayos se hacian paso a través de la ventana de la habitación de la morena, odiaba que le dieran justamente en los ojos. Tan molestos rayos.

Se levantó de su cama bufando hasta que su mirada se paro en el malgastado bebé de juguete en la silla de su escritorio.

- Otro día más en este basurero, ¿como amaneciste cariño? - la pregunta salió de sus labios con calidez tomando aquel juguete tan desecho en sus brazos - oh~ no llores cariño, tal vez hoy tengamos algo nuevo y divertido -

Una sonrisa se decoro en su rostro, sentía que algo nuevo hiba a pasar hoy y su sentir nunca le fallaba.

Con sumo cuidado puso el juguete a un lado de una silla para comenzar a tender su cama. ¿Que sería lo nuevo? ¿Talves una nueva práctica? Dios, esta curiosa, ¿que era aquel presentimiento?

No era algo malo, ¿que era entonces eso que tanta felicidad traía a su vanidoso corazón?. Ya tendida la cama, se dispuso a tomar un baño y ponerse el vestido que señalaba su posición en el lugar.

Hoy le tocaba cuidar a los recién nacidos, ciertamente estaba alegre por ello, nada le hacia más feliz que cuidar a los niños. Amaba demasiado a los pequeños, todo en ellos le trasmitía una ternura irrefutable.

Ya estando totalmente arreglada salió de la habitación para hacer la misma rutina de todos los días: desayuna, entrena y práctica, descansa, haz las tareas que te inculcan y si tienes tiempo, camina por la sede, sin acercarte a los dormitorios de los superiores o la zona exclusiva de ellos.

- ¡Ey, Krone! ¿Que tal has Estado? - una de sus amigas se había acercado a ella en el momento que estaba caminando hacia el área de pediatría.

- Magnífica Lisa, ya sabes lo de siempre, esperanzada en que haya algo más útil que hacer fuera de la sede - respondió

- vaya, ¿has escuchado el chisme? -

- esas cosas son malas para todas nosotras Lisa - Krone río por lo bajo, la ingenuidad y curiosidad de su amiga siempre le traían algo de alegría a su día.

- ¿Quieres saber o no? -la chica pelinaranja pregunto soltando un bífido por lo que dijo su amiga

- escupelo Lisa -

- bueno..... Un niño de la planta dos a descubierto el secreto, hoy lo traerán para transportarlo - concluyo la noticia viendo el rostro sorprendido de su amiga, ella al igual que Krone, odiaba esas ocasiones especiales.

- ¿Uno de cuantos es esta vez? - ya habían llegado al área de pediatría abriéndose paso entre las enfermeras que hiban y venian. Llegaron a la puerta de la habitación donde se encontraban todos los bebes, Krone estaba apuntó de abrir la puerta aún sorprendida esperaba la respuesta de su amiga.

⋇⋆✦⋆⋇ BRUKEN HEART⋇⋆✦⋆⋇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora