Sweet Treat ˓ Jenlisa (Original)

Three

Lisa se encontraba ahogada en sus pensamientos mientras bebía sorbos cortos de su vaso de leche esa mañana luego de todo el caos que había provocado el día anterior; Seulgi le había acompañado toda la noche ya que la pelinaranja se sentía realmente mal.

-Ahora debo irme, tengo una clase pronto-. Dijo la amiga mientras tomaba sus cosas

Tan pronto habló, el celular de Lisa tuvo una llamada entrante, era Wonbin, su hermano mayor, aquella no dudó en contestar rápido mientras llevaba su vaso en manos.

-Hola-. Dijo por vía telefónica

De un momento a otro, el vaso resbaló de sus manos y cayó fragorosamente contra el suelo, provocando que este se rompiera en pedazos.

Seulgi sobresalto y corrió hacía Lisa que se encontraba con una expresión vacía en su rostro.

-Es mamá, ella está en el hospital-. La menor pronunció

Sin esperar más, corrió hacía su habitación a sacar unas cuantas cosas para irse directamente hacía el centro de salud donde su madre estaba internada, Seulgi la acompañó hasta allí y se apresuró en ir hacía la clase que le esperaba.

-Si necesitas ayuda, no dudes en llamarme-. Recomendó a su amiga

-Gracias, Seulgi-. Exclamó mientras se alejaba por el pasadizo de aquel gran hospital

Por suerte, allí estaba Wonbin esperándola mientras platicaba con una persona que probablemente sería el doctor que atendía a su progenitora, apresuró su paso y llegó hasta ellos.

-¿Cómo está Mamá?-. No dudó en preguntar

-Mamá tiene que entrar a cirugía pronto-. Respondió el mayor mientras se rascaba nervioso la nuca

-Doctor, haga lo necesario, por favor-. Rogó Lisa exaltada

-Eso haremos-. Este tocó el hombro de la pelinaranja con la intención de brindar algo de tranquilidad en el momento tan tenso

Habían pasado unas cuantas horas y los dos hijos de la señora Yiren se encontraban sentados en la sala de espera.

-Su madre está fuera de peligro ahora, muchachos-. Pronunció el médico mientras bajaba la mascarilla que cubría la mitad de su rostro

El corazón de Lisa revoloteó de tranquilidad y dio un suspiro fuerte.

-Muchas gracias-. Dijeron a unísono

-Deben dirigirse hacía la recepción, deben firmar unas cuantas hojas y recibir algunas indicaciones; su madre no tardara en despertar, pero debe tomar mucho reposo-. Indicó el doctor para luego retirarse

Sin más, ambos bajaron al primer piso de las instalaciones, era hora de cubrir los gastos que se habían generado durante la estadía y cirugía de su madre.

-Es demasiado dinero-. Murmuró Wonbin

Aquel centro de salud era una de los mejores en la ciudad, no solo por su gran disposición de maquinaria  especializada en la salud, sino también por la gran calidad de doctores que trabajaban ahí; su madre definitivamente había estado en las mejores manos.

-Podemos dividir la deuda por la mitad-. La pelinaranja recomendó tragando saliva

Y así fue, Lisa usó su tarjeta de crédito para cubrir su parte, pero aquella no fue recibida por el servicio.

-Su tarjeta parece bloqueada, ¿Está al tanto del pago de sus gastos?-. Habló la señorita mientras observaba atentamente su pantalla de ordenador

Lisa sabía que tenía una ligera deuda pero no pensó que podría llevar cargos por aquello a tal punto de que su tarjeta fuera bloqueada.

-No dispongo de efectivo ahora-. Lisa se encogió de hombros

Lisa no tenía dinero y sabía perfectamente que la indemnización de su trabajo no cubriría ni la mitad de ambas deudas, sumando el hecho de que ahora su madre necesitaría cuidados luego de su operación por su estado delicado.

Una migraña invadió su cabeza y cerró los ojos con fuerza tratando de aligerar su dolor, pero fue en vano.

-Puede acceder a un plazo de pago, pero debe firmar aquí y dejar su documento de identificación-. Dijo extendiendo una hoja y un bolígrafo

La pelinaranja no tenía otra opción que aceptar el método.

-Si no cumple con su deuda al hospital en el plazo de una semana, el banco va a tomar medidas aún más drásticas por sus débitos pendientes-. Recalcó la trabajadora

Lisa solo asintió apenada.

-Puedes empezar hoy mismo si requieres el dinero urgentemente, Seulgi me habló de ti y estoy encantado-. Pronunció el castaño, hermano de Seulgi

-Muchas gracias y sí, puedo comenzar hoy-. Habló Lisa mientras observaba todo el local

Seulgi le había comentado del negocio de su hermano Jake, pero ella definitivamente había omitido el decirle que era un restaurante que lucía realmente fastuoso, estaba segura que ahí solo concurría gente de dinero.

-Tu uniforme está allí, el lugar pronto abrirá-. Señaló el joven mientras sonreía

Lisa se dio una vuelta por el lugar luego de tener su ropa puesta, el espacio era grande, tenía barra propia aparte de las mesas donde servían los deliciosos platillos, del techo caían numerosas lámparas colgantes doradas, que hacían ver al lugar aún más costoso.

La pelinaranja se preguntaba cómo el joven tenía tanto a su poder, Seulgi nunca le había comentado aquello, solo que su padre les otorgaba una vida estable económicamente; es una suerte, pensó, mientras mordía su labio inferior.