"Muérdeme" Lumity TOH Vampire! Amity

Perder

Amity se sentía cada vez más extraña. Podía notarlo.
Tres días y su malestar solo aumentaba. Su olfato se hizo todavía más agudo, al igual que su oído, y al igual que su estúpida sed. Pero había nacido un nuevo problema: sus dientes se estaban deformando. Específicamente cuatro de ellos.
Odiaba admitirlo, pero sea lo que fuera su nueva enfermedad la estaba cambiando. Empezaba a ser más agresiva y grosera con todos sin darse cuenta, a excepción de Luz.
La morena era otro de sus problemas. Había admitido amar a la latina desde hace tiempo, pero cada vez que estaba con ella su repentina e incontrolable sed aumentaba. ¿Qué tenía Luz de especial? ¿Porqué el sentimiento de sed empeoraba cuando aparecía ella?
Estaba perdiendo la cabeza.

-Señorita Blight, ¿Podría leer a partir de la página 87? -preguntó tranquilo el profesor.
-Váyase al carajo.

Lo había hecho de nuevo, había sido grosera sin querer serlo. Ya había sucedido por lo menos tres veces en ese día, pero no podía explicarlo, era como si no fuese ella en ese momento.

-Señorita Amity Blight, este comportamiento no es usual de usted. Pero le daré una oportunidad más -comentó el maestro firme y abrió su libro de nuevo. -Puedes empezar a leer a partir de la página 87.
-¡Le dije que se fuera al carajo, anciano! -gritó exaltada, muy diferente a lo que su mente pensaba.
-¡Suficiente! Vaya a la dirección.

La pelimenta tomó furiosa su mochila y salió endemoniada del salón mientras cierta morena la veía preocupada desde el pasillo anterior.

Luz quizá era distraída, pero no estaba ciega. Sabía que algo estaba afectando a Amity.
La había estado ignorando todo el día anterior y lo que llevaba de ese, eso la hizo sentir mal. ¿Estaba enojada con ella?
Vió a la protagonista de sus pensamientos salir enfurecida de la clase, tenía una hora libre, así que la siguió.

La pelimenta entró a la dirección preocupando a la morena. ¿Estaría en problemas? Amity no era alguien que se metiera en muchos problemas.
Esperó para cuestionarla cuando saliera, por suerte solo fueron unos minutos. Amity salió y Luz la encaró.

-Amity, tengo que hablar contigo -expresó preocupada. Y miró triste al suelo. -Porfavor.
-Luz -la pelimenta sonrió al verla, pero la molestia en su garganta repentinamente apareció. -Me tengo que ir.
Evadió a la morena para irse, pero Luz la tomó de la muñeca.
-Estás evitándome desde ayer -su mirada decayó. -¿Estás enojada conmigo?
La peliverde se sintió culpable por hacer sentir a Luz así, pero cada minuto con ella su garganta parecía querer matarla. Se soltó violentamente de su agarre y caminó con rapidez alejándose de ella.

Consideraba ya estar lo suficientemente lejos de la morena, pero su garganta seguía atormentándola. Apretó su cuello tratando de calmar la molestia hasta que vió algo, o mejor dicho, alguien conocido. Era Viney, la amiga que Luz le había presentado dos días antes, solo torció la cara. Estaba dispuesta a desaparecer de ahí.

-¿Amity? -preguntó insegura de si realmente era ella. Amity caminó rápido para alejarse de ella, pero la castaña la alcanzó. -¿Has visto a Luz? Llevo buscándola mucho rato, dijo que tenía hora libre.
La pelimenta estaba hasta de todos, Viney no era la excepción. Pensaba dejarla con la palabra en la boca e irse a casa, debía admitir que se sentía realmente mal, pero el fuerte mareo la hizo derrumbarse. La castaña corrió a su dirección totalmente preocupada.

-¡Por Belos! ¡¿Estás bien?! -se acercó a ella, cargándola por los hombros. -Te llevaré a la enfermería.

Todos miraron a la popular Amity Blight siendo cargada por una chica del salón vecino mientras se dirigían difícilmente a la enfermería. Los rumores se extenderían rápidamente.

Viney recostó a una semiconsciente peliverde en la camilla más cercana mientras buscaba desesperadamente a alguien del personal. No había nadie.

La de cabello bicolor estaba en la peor de las situaciones, el dolor en su garganta era anormal y no podía ni siquiera mover un maldito dedo, era como si estuviera paralizada. Su corazón vió un vuelco, escuchó como la voz desesperada de la castaña se volvía más baja, y después todo quedó en silencio.

Viney observó que Amity ya no respiraba frenéticamente y se asustó.

"¡¿Está muerta?!

Pensó muerta de miedo, acercó su mano temblorosa hacia la nariz de la inconsciente chica y suspiró aliviada al notar que seguía respirando.

Pero su alivio se esfumó cuando una mano presionó fuertemente su muñeca. Levantó temerosa su mirada y se encontró con unos fulminantes ojos dorados pertenecientes a la chica ex-inconsciente.

-P-pero tu te desmayaste -susurró asustada, pero igual seguía preocupada. -¿Estás bien?
La de cabello bicolor que la había estado mirando inexpresiva hasta el momento, curveó sus labios en una pequeña sonrisa, y su sonrisa fue abriéndose hasta delatar sus notables colmillos. Esto no era un buen presagio.
Sin dudarlo se lanzó sobre la castaña impactándola sobre el duro suelo, la chica gritó pero fue callada por una mano apretando su boca.
Viney sintió la respiración pesada de Amity sobre su cuello, intentó aventarla pero la diferencia de fuerza era demasiado notable. Sintió una fuerte punzada en su cuello, los colmillos de la pelimenta se enterraban con profundidad y salvajismo sobre su piel, dolía como el infierno. Se agobió con el inmenso dolor en su cuello y la pérdida constante de sangre hasta que finalmente se desmayó.

La atacante finalmente la dejó, se levantó arrastrando su mochila y se limpió la boca como si no hubiera hecho un acto tan horroroso. Salió de la enfermería sin ver un solo alumno, al parecer las clases habían acabado.

Caminó tranquilamente hacia su casa, esa ya no era Amity Blight. Ahora era un demonio el que habitaba su cuerpo.

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-Me distraje mucho tiempo, debí poner un letrero de que habría reunión de personal hoy -susurró para sí misma. La enfermera regresaba con rapidez a su lugar de oficio. Había olvidado avisar que no estaría esa tarde. -sólo espero que nadie haya venido.
Entró al lugar pero vió todo en desorden. ¿Quién había causado eso?
Observó una de las camillas notablemente arrugada, alguien definitivamente había estado allí.
Se acercó para ordenarla, pero se dió cuenta de algo perturbador: había una chica inconsciente con restos de sangre derramándose por su cuello.

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El demonio disfrazado de la presidenta estudiantil de Hexside: Amity Blight, se miró al espejo pintando sus labios de un intenso color rojo -su nuevo color favorito- y sonrió ante su nuevo cambió de look.
Ya no se veía como la ñoña de antes, su largo y perfecto peinado había sido sustituido por una voluminosa y salvaje cabellera, su estúpido vestido rosa había pasado a unas brillantes mallas de tactopiel, una blusa básica blanca y una deslumbrante chaqueta de cuero roja. Se veía como toda una Bad girl.
Verificó una última vez su apariencia frente al espejo, verificando que su grueso y bien dibujado delineado de ojos estuviera perfecto.
Desbloqueó su teléfono y sonrió con malicia al entrar al chat.

Luz

¿Entonces nos vemos hoy a las 5? ;);)
3:35pm ✔️✔️

¡Seguro, Amity! Nos vemos en la casa búho.
                       3:36pm ✔️✔️

Muero por verte 🖤🖤
3:36pm ✔️✔️

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Uff, ahora sí empieza el drama~

Posiblemente publique el capítulo al rato, ya me emocioné xD

Espero les haya gustado, y no olviden votar ❤️❤️

¡Hasta la próxima!