Cap. 18

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-¿Qué?- preguntó  Tim tras el gran monólogo del caballero oscuro. Su ojos mostraban confusión, el argumento de Bruce daba respuestas a muchas incógnitas, como la del comportamiento del demonio, la habitación en la que le vió dentro, el favor que le había pedido..... todo tenía algo de sentido pero por otra parte, el extraño comportamiento de Bruce en ese día del juicio no encajaba, había algo, algo más tras todo eso.

Tim se había quedado mirando a la nada, estático, pensando en todas las posibilidades; "cambio de horario", "estrés", " un caso importante", e incluso tal vez algún problema en las empresas Wayne, pero eso seguía sin justificar ese extraño comportamiento.....

Todos sus pensamientos pasaron a segundo plano cuando la mano de Jason pasó delante de sus ojos.

-¡Estupendo!- dijo divertido- Primero la cagas conmigo, luego con esa niña y ahora rompes a mini Sherlock. - añadió Jay mientras reía.

-Esto es serio, Jason.- le reprendió Dick

-¡Oh vamos! -dijo con una sonrisa socarrona- Esto es el Karma.....

Y mientras ellos hablaban, una pregunta volvió a dejar todo en tensión.

-Entonces....¿sabes dónde está?

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METRÓPOLIS

Una familia e invitado, cenaban en la mesa redonda del comedor, los varones charlaban sobre nuevos ejercicios y entrenamientos, mientras que Louis, les miraba, pero mientras los observaba se daba cuenta que el oji-esmeralda no se comportaba como en las otras ocasiones en las que le había visto. Dudó por apenas un instante, pero su espíritu de periodista le provocaba mayor curiosidad, tenía una teoría y debía probarla.

Decidida, y aprovechando que seguían hablando los Kent, y que el adolescente no, le miró y le dijo:

-¿Quién es ella?

Damián al instante la miró con la mirada fruncida mientras sus ojos se oscurecían, apoyó completamente sus espalda en el respaldo, se cruzó de brazos y mirando a John añadió:

-Eso. ¿Quién es ella John?

Al momento se dio cuenta del error que había cometido, él nunca replicaría con algo tan infantil, por muy astuto que fuera. John le miraba sin entender, Clark, el cual se encontraba masticando una gran cantidad de spagetti se quedó mirando a su mujer, hijo e invitado sin tragar.

-Clark, traga.- dijo su mujer mientras desafiaba con la mirada a Damian.- Soy periodista, madre y mujer de superman. Si no me lo dices lo averiguaré.

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"El hogar del gusano feliz" era un lugar demasiado peculiar, los jueves por la tarde llegaban distintas bandas de moteros de diversas partes del estado; se emborrachaban, jugaban a los dardos o a las cartas, se insultaban y acusaban de traposos unos a otros mientras seguían bebiendo y fumando, las rondas de bebidas iban y venían, monedas de poco valor rodaban por el suelo, invisibles ante los dueños de billetes y borrachos en el suelo. Los tintineos de los brindis resonaban cual eco en una caverna, pero eran callados por la fuerza descomunal de los canticos de los más "alegres". 

Era como volver a la prehistoria, Anne había observado cómo dos moteros, altos y de aspecto bastante intimidante, se peleaban a navajazos por unos simples frutos secos; el cómo un baño recién limpiado era envuelto en sustancias de desconocida procedencia. Y el cómo uno de ellos se impresionaba de la magia de un simple encendedor. 

Pero ahí estaba desde hacía 7 semanas, con Liam, también conocido como Willie, miembro de una banda de moteros bastante agresivos y sanguinarios, los cuales se encontraban ahí mismo y cuyo capitán acababa de vomitar sobre las deportivas de Anne.

Una mueca de asco fue la principal reacción de Anne, para luego acercarse a una papelera y expresar con la misma sinceridad que su atacante y su asco. 

Liam se acercó a Anne para disculparse en nombre de su capitán, pero él también estaba borracho, a pesar de su recuperación y de lo sufrido decidió festejar su vuelta y la marcha de Anne, cayendo semi-inconsciente al suelo, rozando la papelera en la que acababa de vomitar la joven. 

Con una mirada al camarero y un giro de su dedo índice, dió a entender que se iba , y eso hizo. Evitó como pudo a la plaga de moteros dormidos de la escalera, baño, salón y comedor de la segunda planta para acceder a un pasadizo que llevaba a una casa franca desmantelada y actualmente, hogar de los moteros. 

Cuando llegó se cambió de ropa y salió por la ventana, ya no tapiada, que llevaba a un callejón. De ahí, se sentó en un banco entre un parque infantil y un orfanato.

Con la capucha tapando su rostro, los vaqueros rotos, y las deportivas aún manchadas de algo de vómito,....cualquiera pensaría que fuese a raptar a unos niños, traficar con drogas o consumirlas, e incluso tal vez ser la soplona de algún albergue o de algún prostíbulo traficante de personas . Pero no, estaba ahí para hablar con alguien, alguien a quien no había visto hacía mucho tiempo. 

-Hola- dijo desde el otro lado del banco

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La noche había terminado, el sol comenzaba a salir lentamente, deslumbrando a quienes miraban las interminables cristaleras que inundan Gotham, el frío seguía reinando el lugar, las profundas heladas de los días anteriores causaron la detención de la búsqueda de los supervivientes del cuartel de A.R.G.U.S . Todo había cesado, no habían más pistas, ni testigos, ni vídeos de cámaras de seguridad, ya no había nada. El rastro de Anne se había enfriado, o eso creían. 

El caso de Anne era revisado una y otra vez por un adicto al café, un resucitado y el chico maravilla. Jason no hacía más que golpearse la cabeza con la mesa con el mismo ritmo monótono desde hacía ya 2 horas; Dick, cambiaba de posición en el sofá largo cada 15 min, cuyas posturas iban acercándose más al contorsionismo, lo cual asustaba más al callado y reservado Tim que no hacía más que dar vueltas una y otra vez en la silla del bat-ordenador mientras leía con una mano y tomaba café con la otra. 

-Venga, de nuevo.-dijo Tim por cuarentaitresava vez

Jay suspiró una vez más, para luego añadir:

-No está en las ruinas de su antigua casa, no está en su instituto, no está en la casa de su abuelo, no está en la casa de ninguna compañera o posible amiga suya,  ni en ningún motel, hotel, albergue, orfanato, hospital, hospital psiquiátrico,.....ni en ningún prostíbulo....-dijo para volver a sus cabezazos

-Espera, ¿prostíbulos?-añadió Dick

-¿Qué?-añadió Jay- Podría ser....

-NO. -dijeron Tim y Dick 

-¿No? ¿por qué? ¿Acaso no crees que haya jóvenes desesperados que recurren a ese modo de vida ? ¿O gente secuestrada de sus países y traídos a este para obligarles a prostituirse?

-No, Jay, a lo que me refiero es que he encontrado una opción, mirar cómo balbucea el chico....

-Son solo alucinaciones......-añadió Jay

-Pero, ¿y si no lo son?.

Tim comenzó a analizar la imagen y a copiar las palabras que salían en la pantalla, luego hizo unas búsquedas e imprimió unas 10.000 posibilidades cercanas a la zona de los sucesos.

-¿Excursión?

Es mi maldición. (Damian Wayne y Oc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora