3. Entrenamiento

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Un mes después

JiSung estaba sudando.

El sudor tenía mojada toda su espalda y la camiseta del equipo de fútbol se apegaba a su cuerpo por esto mismo, el abrasador sol que había ese día sobre su cabeza no ayudaba en nada a la situación y ciertamente, por muy exagerado que suene, Sung ya no tenía ganas de vivir.

No lo soportó más y se dejó caer en el césped, tratando de regular su respiración.

—¡Vamos, JiSung-ah!—gritó MinHo desde el otro lado del campo—. ¿Eso es todo lo que tienes?

Decidió ignorarlo, no quería discutir con el guapo, sexy, idiota y engreído capitán. Hace un mes que había entrado en el equipo y de verdad que estaba sufriendo, diecisiete años sin hacer deporte le estaban pasando la cuenta.

En el equipo llegaron a la conclusión de que era horriblemente malo en los deportes y siendo honestos, él no se ofendía porque siempre supo que aquello terminaría en desastre y que era un asco, no sólo jugando fútbol, sino en todos los deportes habidos y por haber. Ganas de renunciar no le han faltado, sin embargo, sus padres seguían obligándolo a ser parte del equipo y las amenazas con enviarlo a Suiza eran cada vez más constantes.

Otra persona que parecía reacia a dejarlo abandonar el compromiso de ser parte del equipo era MinHo, aunque fuera un peso extra para el capitán, este se quedaba una hora después de clases con JiSung, con la esperanza de que con más entrenamiento podría mejorar su capacidad pero no, los deportes no eran los amigos de Han JiSung y parece que nadie es capaz de entender eso, solo Felix, SeungMin y JeongIn, que cada vez lo veían más adolorido debido a los entrenamientos.

Hace media hora que habían terminado las clases y la escuela estaba completamente desierta, ¿quién quería quedarse hasta tarde un día viernes? La respuesta es simple: nadie. Ni siquiera el equipo estaba presente a pesar de que ese día había entrenamiento aunque eso se debía a que MinHo lo canceló para centrarse en ayudar a mejorar las habilidades de JiSung.

MinHo bufó al ver la exagerada reacción de JiSung al dejarse caer en el césped. ¡Hace sólo diez minutos habían empezado a entrenar! Cada vez se convencía más de que Han no tenía ni un pelo de jugador de fútbol y eso lo lleva a preguntarse por qué quiso entrar al equipo.

Trotó por el campo, acortando la distancia y llegando hacia donde el agonizante chico se encontraba tapando sus ojos con su brazo y tratando de calmar su respiración, vio que el sudor cubría gran parte de su cuerpo y la ropa se apegaba a este mismo. Un rápido pensamiento llegó a su mente de ellos dos en una situación parecida, pero con JiSung acostado desnudo sobre una cama y él sobre el menor, con ambos cuerpos sudando y respiración acelerada.

Parpadeó.

"Concéntrate, Lee MinHo" se regañó en su mente.

No era la primera vez que fantaseaba con el cuerpo y también con el culo de JiSung y está completamente seguro de que no será la última, sin embargo en aquel momento debía dejar de lado sus hormonas y concentrarse en el equipo.

—Ya, levántate—ordena.

—No quiero—negó el menor.

—Tienes cinco segundos para levantarte o te hago correr diez vueltas alrededor del campo, tú escoges.

—Ay, hyung...

—Uno—comenzó a contar—, dos, tres—Han no daba indicios de querer levantarse—, no me hagas llegar a cinco.

—Ya, bueno, me levanto—dijo JiSung y con mucho esfuerzo de su parte, se levantó del césped—, amargado—murmuró.

MinHo fingió no escucharlo, aunque no pudo evitar rechinar los dientes.

Soccer Player // MinSungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora