Falsa Felicidad NejiTen

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—Perdón, era el trabajo —su rostro mostraba un poco de prisa y sospeché que la llamada fuera sobre trabajo, por alguna razón sospeche otra cosa.

Sari asintió sonriendo y nos llevo a otro lugar donde nos entrevistaran, Neji quiso tomar mi mano nuevamente pero yo la aleje. Se dio cuento de mi distancia con él ya que no lo volvió a intentar. Tarde en darme cuenta que Sari también notó de mi distancia con Neji.

—Bien, aqui les harán unas cuantas preguntas, por favor siéntese en un momento llega la persona encargada de la entrevista —Sari salió dejándonos solo en aquel cuarto.

—¿Sucede algo Tenten? —Neji pregunto tan rápido a como salió Sari

—No nada —dije sin mirarlo. Tenía mi celular en mano y fingí estar haciendo algunas cosas para evitar hablarle

—¿Por qué evadas el que tome tu mano? —pregunto.

—No creo que sea necesario estar tomados de las manos todo el tiempo, no somos niños —me senté en el sofá que estaba en el cuarto

—Veo que sigues molesta —se sentó aun lado mío dejando un pequeño espacio.

Nos quedamos callados, esperando a que la persona que nos entrevistara llegara. Saco su celular y comenzó a escribir, sonaba cada que le llegaba un nuevo mensaje.
De momento la puerta se abrió, rápidamente guardó su celular y se dejo ver a la persona que nos va a entrevistar.

—Hola perdonen la tardanza, mi nombre es Kurenai seré quien los entrevisté. —se sentó frente a nosotros y sacó su libreta.

Comenzó a preguntarnos algunas cosas básicas de ambos, nuestros gustos y cosas así. Las cuales me resultaban difícil de contestar porque yo no sabía nada de él. Aunque me sorprendió las respuestas tan acertada que Neji dijo sobre mí, cosas que yo no le conté pero presiento que me investigo. Sin embargo yo tuve que inventarlas y él solo afirmaba que eran ciertas. Llegamos al final de las preguntas Kurenai comenzó a preguntarnos sobre la relación.

-Todo el mundo habló sobre lo increíble que fue su boda, pero también quieren saber ¿cómo fue que surgió su amor?

-Todo fue repentino, yo había salido de una larga junta y decidí entrar a tomar un trago en un bar a unas cuantas calles de la oficina. -Neji habló tan calmado y tranquilo -. Cuando entre ella fue la primera en atenderme, no me había fijado en su rostro hasta que me entregó mi trago en ese momento quede cautivado así que en ese momento le pedí matrimonio. Pero me rechazó enseguida.

-¿Que pensó en ese momento señora Hyuga? -Kurenai se dirigió a mí ahora.

-Pensé que era la primera vez que tomaba y decía disparates por el efecto del alcohol.

-¿Que hizo usted, señor Hyuga?

-Seguí insistiendo, no me iba a ir se ese lugar hasta que dijera que si.

-¿Sabía quién era el señor Hyuga? -volvió a preguntarme

-No realmente, cuando me enteré pensé que estaba loco por querer casarse con alguien como yo teniendo tantas mujeres a su alrededor.

-¿Cuánto tiempo le tomó convencerla?-le preguntó

-Un mes -mintió -me di cuenta que quería pasar el resto de mi vida con ella y no la dejaría ir por nadie. -me voltee a verlo

Después de decir eso, me miró y su mirada cambió a una dulce. Un escalofrío recorrió mi cuerpo, era la primera vez que él me miraba de esa forma. Me sentía totalmente extraña, no sabría cómo describir el sentimiento.