𝑩𝒖𝒆𝒏𝒐𝒔 𝑨𝒊𝒓𝒆𝒔 𝒆𝒔 𝑨𝒎𝒐𝒓 |𝒀𝒔𝒚 𝒂| (𝒕𝒆𝒓𝒎𝒊𝒏𝒂𝒅𝒂)

Capítulo 10.

Hace un año.
(III/III)

—Ojalá entiendas por que tome la decisión de aceptar la beca. Deseo que entiendas que a pesar de que te dije todo eso no quiero que las cosas terminen mal entre nosotros.

Menciono cargada de una melancolía que hasta a mi me llego a tocar el alma.

—Te quise mostrar Buenos Aires para que lo ames tanto como yo, para que pudieras apreciar su belleza y para que puedas sentirla. Y se que quizás estés enojado por que no te dije nada y el por que acepte esta oposición, que quizás pienses que no te quiero o que si tanto aprecio esta ciudad ¿por que me voy?—hablo como si leyera mis pensamientos, pero que exactamente no eran esos—Y quiero decirte que no te lo dije antes por que quería disfrutar cada noche a tu lado sin tristezas. Acepte la beca por que luche tanto por cumplir mi sueño y me lo merezco, además de que yo te apoyé siempre tu sueño de ser cantante y ojalá me entiendas de la misma forma en la que yo lo hice.

Intento hacerme entender cosas que ya me habían quedado casi claras, pero sabía que era necesario mencionarlas, para que luego no se creen esas preguntas que tan solo nos hunden más.

—Te amo muchísimo y me duele el alma tener que dejarte, pero así debe ser y de verdad me duele tener que alejarme de esta ciudad.

Se freno por unos segundos antes de continuar hablando.

—¿Y quién entiende lo que siento yo al despegarme de aquí?—pregunto pero al instante se respondió ella sola—nadie.

Así que solo le quedo suspirar para volver a comenzar mientras a mi las piezas me comenzaban a encajar.

—Quería que la admires para que lo sientas aunque sea un poco. A parte aunque vos creas que no le debo todo a esta ciudad, lo hago—sonrió como quien ve a lo que más ama en esta loca vida—En especial a esas noches solitarias en Buenos Aires, de esas en las que no estás para nadie, en las que sentís que queres que el mundo cambie, en las que crees que no eres importante, pero sueñas en grande. Esas noches en Buenos Aires, esas que en las que tenes que confiar, ya que todo llega temprano o tarde. Lo que ves al fin te volverá, solo busca mejorar—dijo ya cansada y con un dolor podía sentir en cada palabra.

Parecía como si ante sus ojos lo estuviera perdiendo todo, para ganar algo que ni siquiera parecía querer pero sabía que era lo mejor.

—Pero a pesar de todo solo puedo decirte gracias, hermano, por hacer de tus sueños y de mis sueños motores. Sin vos nada de esto hubiera sido posible, y se que amistades como estas son inquebrantables, porque Buenos Aires es amor—dijo esa bendita frase que luego tendría todo el sentido del mundo—Vámonos a perdernos esta noche así que nadie nos venga a decir ni a mi, ni a vos, ni un reproche. Después de todo bajo el cielo estrellado la tentación rima canciones, el placer se presenta sin fuckin' horario y sin limitaciones—hablo con una sonrisa usando ese inglés tan malo que tiene.

Quizás esta noche entendí muchas cosas. Que cuando miraba a la ciudad enamorada también me miraba a mi de la misma forma, que sintió tanto y yo no me di ni siquiera cuenta. Comprendí que sin percatarme empecé a amar aquella ciudad. Empecé a notar que era verdad que Buenos Aires es amor.

Quería quedarme con ella todo la noche. Deseaba que no se vaya y se que ella tampoco quería irse ni siquiera a desayunar. Como ella no busco dormir ya que la magia siempre está acá y nunca es tarde.

Quizás en ese momento me di cuenta que la amaba y que estaba perdidamente enamorado de ella.

¿Pero de que servía decirle todo aquello si se iría hoy mismo?. Ya daba igual. Ya no importaba nada.

Quería seguir hablando pero no la deje, eso nada más nos pondría peor. Solo me limité a acercarla a mi y abrazarla con toda mi fuerza, por que la extrañaría como a nadie. Por que me iba a hacer falta y por que Buenos Aires se iba a apagar un poco con su partida y mi mundo se caería sin verla tan solo un día.

Sé que ella y yo lo sabemos, porque Buenos Aires es amor.

Y así se quedaron los jóvenes aquella noche de noviembre. Con el corazón roto sin estar preparados para la despedida.

Se quedaron llorando y amando en silencio, con el corazón a mil y los pensamientos en lo más bajo.

Dos locos enamorados que no pudieron estar juntos, quizás por cobardía o por inseguridades. Nadie lo sabrá más que ellos.

Miles de cosas pasaban por su cabeza pero tan solo se quedaron mirando la ciudad que los unió.

Si quieren saber que le iba a decir la chica a él era muy simple, algo que le quería preguntar hace tiempo pero que había cambiado la pregunta en muchas ocasiones y esa fue "¿que ves cuando me ves?" Si, ella solo quería saber que sentía el chico pero decidió no hacerlo, con su silencio bastaba para saber que él la quería como una hermana. Si tan solo la chica hubiera preguntado seria distinta esta historia. Si la cobardía y las inseguridades de una relación fallida no hubieran ganado a Alejo, la historia seria distinta. Pero así paso y para ellos fue una historia única al igual hermosa, llena de amor y oportunidades.

Otra de las verdades es que la chica no solo quería que él pudiera y sintiera la belleza de Buenos Aires. Quería que sintiera eso cada vez que la vea a ella. Quería que apreciara la ciudad de una manera única, pero que al igual que ella sintiera que la ciudad con el otro era aún más hermosa. Sofía creía que no lo sintió pero Alejo experimento todo eso y más, por que en cada salida primero se fijaba en ella y en su encanto, para después prestarle atención a la hermosa ciudad.

Por que ella y su presencia hacían que Buenos Aires sea hermosa.

Toda una aventura fue la que unió aún más a estos jóvenes. Fue gracias a Buenos Aires que ellos pudieron ver más haya de lo que ves a simple vista. Pudieron sentir el amor que ronda en la ciudad y el cariño que estaba en ellos, las múltiples oportunidades en las que pudieron decir lo que les pasaba pero no las aprovecharon, y vivieron en carne propia las chances de poder cumplir cada uno de sus sueños. Todas las emociones que sintieron al recorrer la ciudad acompañado del otro.

Les faltó mucho por ver y conocer, pero ellos pueden decir que conocieron lo más hermoso que hay en Buenos Aires, que fue el amor. Que la ciudad parecía más brillante con el otro en ella. Que pudieron experimentar toda una montaña rusa de oportunidades y emociones.

Buenos Aires les había dado algo que nadie les dio antes, la esperanza de encontrar algo tan hermoso, la oportunidad de conocerse y de vivir todas esas locuras en la ciudad, pero lo principal les dio la oportunidad de amarse y de apreciarse más que a nada. Les había dado todo y mucho más, por eso ellos estaría agradecidos por siempre a la ciudad, ya que había creado un lazo indestructible y todo por que para ellos Buenos Aires es amor.
La ciudad de las oportunidades y de la esperanza.

Era todo eso y más para lo que alcanzan mis palabras a explicar.
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Ay deos que lindo:'), nunca disfrute tanto escribiendo una historia lit, no se por que pero bueno, acá esta la ultima parte y si creen que es el final no lo es, por que falta un cap que es como un extra o algo así, pero bueno nada eso :)).