- Aquí estoy! lamento la demora! -
Llego y se sentó junto al resto, para will era tan agradable verlos felices, se sentía vivo de nuevo un pequeño momento donde se olvido de todo lo malo, así que aprovecho para hacer preguntas que antes no pudo.
- y... eehh.. ¿Qué es exactamente este lugar? aun no me quedo del todo claro -
-- Un purgatorio. -- Respondió la chica de cabello gris, estando seria mirando su comida.- Donde las almas se quedan a esperar que el de arriba o el de abajo dejen de pelear. -
Will estaba confundido, ¿Purgatorio? ¿Pelear por que? ¿Le afecta ese tema o.. porque esa cara? Tenia mas dudas ahora que antes, quedo mirando al resto, Sabrina parecía no prestar atención a la charla pero Scott miraba molesto a Velen, estaba por decir algo pero sentía que no debía hacerlo. Solo dio un mordisco a la carne que tenia en su plato, guardando silencio.
La felicidad que había se fue, se sentía culpable y se notaba, bajo la cabeza y susurro un ligero ¨Lo siento..¨ que llego a oídos del Ángel, quien lo miro sonriente.
-- Niño no estés mal, Bell solo tuvo un pequeño inconveniente por eso esta delicada! -- Dio un ligero empujón a la mencionada chica, ella solo rodeo los ojos y siguió comiendo. -- Mira, luego de comer ve a mi oficina y responderé tus dudas, ¿esta bien? --
-- S-si! claro! -- eso le recordó a algo de vida, un pequeño accidente que ocurrió en el cuarto de su hermano Mike. Will andaba de curioso y entro al cuarto de ese chico buscándolo para jugar, reviso debajo de la cama y encontró mangas y revistas, una de ellas decía que trataba de un profesor y un alumno. luego llego su hermano y se molesto al punto de quedar rojo.. ¿será que fue por el enojo o algo mas?.. no sabia, le quedo de otra que salirse de allí. Al acordarse bajo un poco la mirada algo tímido, siguió comiendo rogando que nada extraño ocurra.
Al terminar de almorzar, la pequeña Sabrina pidió a todos que llevaran su plato a la cocina, ella siempre se hizo cargo de limpiar y ordenar en la mansión, es por cuenta propia, ni scott ni velen le piden, will piensa que tal vez así fue criada estando en vida. En fin, se levanto y fue a dejar su plato, El muchacho ya había subido. En la cocina también estaba Bell, mucho caso no le hizo solo fue dejo su plato y se fue, sin antes escuchar un susurro inentendible, subió emocionado hasta el segundo piso pero allí.. uff..
- Ehh.. donde es su oficina?..-
Típico. Empezó a caminar mirando las puertas una por una, ya medio nervioso se quedo parado al lado de una puerta con una S en dorado, ¿Sabrina? no sabia. cuando volvió a caminar la puerta se abrió dándole un buen golpe en la frente, retrocedió sobándose y quedo mirando abajo. - Auh..Me dejara marca..-
-- Disculpame Will! no sabia que estabas.. ay por Dios lo siento!.. -- El ángel salió de dicha puerta, asustado y preocupado se le acerco y trato de ayudarlo, lo levanto llevándolo dentro del cuarto que era su oficina. ¨Bueno.. al menos se donde queda ahora.¨
Al entrar, lo dejo sentado sobre el escritorio y empezó a buscar el botiquín, al parecer por reglamento de el todos los cuartos tienen uno, incluso el de will, cuando se dio cuenta de donde estaba sentado sus mejillas se pusieron algo rojas, pero trato de disimular lo mas que pudo. Scott se paro frente a el con un pedazo de algodón y alcohol, al lado del niño había una curita y crema, ¿Tan feo era el golpe?.. su respuesta llego pronto, al mirarlo sintió como un liquido cálido corría por en medio de sus ojos llegando casi a su boca, era sangre, pero después de la masacre que hizo estando con vida mucho no le importo.
-- Bien.. quedate quieto un segundo. tal vez te arda.. -- Dijo el Ángel acercándose mas, Will respiro profundo, pero al hacerlo y recordar las palabras se le volvió el recuerdo, al recordar se hecho para atrás mirándolo fijo y rojo, este niño si estaba traumado. Scott levanto una ceja mirándolo, ¿Qué pensaba ese chico? si murió con menos de 15 años.. ¿si quiera tiene la mentalidad de un niño? Era preocupante para el Ángel ese carácter. -- ¿Qué clase de Reacción es esa?.. ni siquiera toque tu frente como para exaltarte. --
-- Aaahh.. jeje lo siento lo siento!.. -- Lo dijo sentándose de nuevo
Actuaba nervioso como un niño, pero sus gestos lo confundían.. -- William.. eres un niño de bien?. -- No respondía, solo bajo la cabeza apenado, inclusive agarro el algodón y se empezó a curar solo, quería irse estaba apenado, en otro momento hablarían, pero no, Scott es Orgulloso y Testarudo, no se permite el no ser respondido. Cuando Will estaba por ponerse la crema, Scott lo tomo de la barbilla e hizo que lo mirara.
-- Escuchame bien.. en esta casa se responde lo que se pregunta, y yo te acabo de hacer una.. respondeme si eres o no un niño de mente y cuerpo.. -- Nuevamente sin respuesta, un sutil tartamudeo y puro silencio, Scott ya estaba perdiendo la paciencia. Bajo la mano a su cuello, apretándolo un poco y cercándose mas casi tocando su frente. -- RESPONDE... --
Eso asusto al chico, quien rápidamente tomo su mano empujándolo, se bajo del escritorio y se paro firme algo rojo.
-- No Scott!! No soy un niño!.. arruinaron mi inocencia matando a mi familia frente a mis ojos para luego abusar de mi!.. Sufri demasiado en vida y ahora estoy aquí para que me ahorquen?!.. pero tampoco creo que entiendas ya que eres un ángel, un ser de luz.. NUNCA ENTENDERAS EL DOLOR DE UN HUMANO!, NUNCA! --
Con lagrimas en los ojos empujo al Ángel a un lado y salió de la oficina sin esperar respuesta, corrió hasta las escaleras y las bajo al segundo piso, las fuerzas se fueron, quedo tirado en los últimos escalones, recordó el sufrimiento de ese día y no pudo mas. Abrazo sus piernas acurrucado en el suelo, deseando estar en otro lugar, deseando olvidarlo todo por un minuto o tal vez.. deseando un amigo que lo entienda.
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Lamento haber desaparecido, ya estamos de regreso!
Muchas gracias por leer
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Hasta Después De La Muerte
Aventure¿Crees en la vida después de la muerte? Este chico confiaba en que eso era solo un cuento, que a la hora de morir simplemente desapareces, para él, no existe tal paraíso, tal infierno, nada. Pero cambiara su perspectiva cuando el momento llegue, cua...