Diario, al menos no se convirtió en uno de ellos, no creo que ella hubiera durado mucho en su condición, aunque eso mismo decían de mi y mírame.
A mi mente llega la imagen de mi abuelo, cielos, yo amaba a ese anciano y digo amaba porque el destino quiso que su función acabará en este planeta, siempre fuimos muy unidos, las vacaciones las pasábamos juntos, cada vez que podía iba a visitarlo, aprendí mucho con el, el día de su funeral no lloré, creían que era una forma de hacerme la fuerte, pero no, simplemente no sentía la necesidad de hacerlo, me recupere muy rápido, sigo amando a mi querido abuelo, sigo recordando pero nunca sentí tristeza, creo que es lo mismo que sucede ahora.
Me inclino y veo de cerca su rostro, esto no es bueno, se supone que los Zombies muerden, no apuñalan, Daniela tiene el cuello cortado, murió de desangramiento.
-Aldo. -le llamo en un susurro.
-Creí que tardarían un poco más en llegar.
-¿Qué quieres decir?
-Personas que ya perdieron la cabeza, buscarán y harán de todo para poder sobrevivir, se sintieron en peligro y atacaron, es lo más lógico, solo un mes, un maldito mes y comienzan a aparecer. -Me mira y luego al cuerpo- Ve si tiene algo útil en los bolsillos, aunque lo dudo.
No se quien se cree para hacerme tocar los cuerpos muertos de personas, ¿Por qué no lo hace y ya? Cómo el está a cargo hago lo que pide, en sus bolsillos no encuentro nada, la miro una vez mas al rostro y veo que en su cuello cubierto de sangre hay una cadena con un dije ovalado, lo tomo y veo su contenido, una foto de Ana es lo primero que veo y junto a ella un anillo de compromiso, creo entender que es lo que sucede. Cierro los ojos de Daniela y sigo mi camino con Aldo tras de mi, quien susurra algo que no logro escuchar.
-¡¿Un hotel?! ¿Nos quedaremos en un hotel? Te recuerdo que este lugar debe estar plagado de ellos sin mencionar que esta hecho de vidrios, fáciles de romper. -Digo viendo al gigantesco hotel.
-Universidad, nos quedaremos justo al lado. -Sostiene mi cabeza entre sus manos y la voltea en dirección a la universidad, oh eso tiene más sentido.
-¿Y como piensas entrar?
-Por la puerta.
-Qué gracioso.
-¿Por donde más?
-Buen punto, ¿Cuál es el plan?
-Revisaremos el perímetro, tu izquierda, yo derecha. Si encuentras a uno tendrás de matarlo, si son más no te arriesgues, luego nos encargaremos, siempre tranquila. -Fue su último "consejo" antes de desaparecer.
La universidad es inmensa, no terminaremos nunca de limpiarla, deben haber cientos de Zombies en ese lugar, tal vez exagere pero en verdad debe estar invadido. Camine por las calles sin cubrirme, estaba despejado y silencioso, podía apreciar los autos abandonados, las casas y tiendas destruidas, cuando llegue no estaba así, se veía todo... normal, siempre he considerado que soy muy conformista y me adapto a cualquier situación, eso es lo que sucede ahora, una niña de quince años sola, con muchos caníbales a su alrededor, debería estar escondida llorando y esperando a que su hermano mayor la encuentre, pero aquí estoy, buscando a esos mismísimos caníbales, no encontré nada nuevo por lo que me devolví, Aldo todavía no llegaba así que me acerque a las rejas para asegurarme si estaba cerrado, por suerte -o desgracia- estaba abierto, el sonido que provocó la puerta al abrir me dio escalofríos, seguí caminando, Wow, es lo único que puedo decir a esto, destrucción, es la única palabra que podría definir lo que sucede ahora, el edificio está casi intacto, si no fuera por los vidrios rotos, la sangre que por cierto esta pintando el hermoso edificio color gris y varias personas que creo que cometieron suicidios, estaría como nuevo.
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The Last?
General FictionAlison, una adolecente de 15 años, mimada e ignorante del mundo exterior, sobreprotegida por su hermano, tiene que aprender a sobrevivir en un mundo que ya no es para humanos, acompañada de lo unico que no la puede traicionar, su querido diario.