-Áɴɢᴇʟ

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Recuerden, siempre esperen lo inesperado.

Att: Pablo de los backyardigans.

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Los meses pasaron volando, junto a ellos todas mis preocupaciones, y valla que eran muchas.

Puedo decir que entre Taehyung y yo la confianza había crecido cada vez más.

Y también puedo decir que comenzaba a amar estar con el cada minuto de mi vida!

FLASHBACK

No podía encontrar a Taehyung por ningún lugar de la casa, Namjoon quién no decía ninguna palabra de donde podía estar tampoco ayudaba del todo.

—Señorita, el señor Kim la espera en el balcón—

—¿Y hasta ahora me lo dices?— solté un suspiro abrumador.

Subí las escaleras pero al mirar hacia abajo noté que Namjoon no venía detrás de mi como habitualmente lo hacía, le pregunté el porque no me acompañaba y me dijo que esta vez me esperaría ahí y no afuera de la puerta como las demás veces.

Me pareció raro pero seguí caminando hasta llegar al balcón.

Al llegar al lugar, pude notar la hermosa decoración, había luces y algunos pétalos de rosas en el suelo, miré asombrada a Taehyung quien por su parte traía en sus manos una caja con fresas bañadas en chocolate, y un ramo de ¿snacks?. Este hombre tomó muy enserio las palabras "a una mujer se le enamora con comida".

–¿Tae?— me sentía completamente nerviosa y maravillada al mismo tiempo.

Al oírme me miró con una gran sonrisa —Kim Jennie, desde que te conocí supe que serías la persona indicada para mi. . . .y es ahora que te pregunto, ¿quieres ser mi novia oficialmente?—

¿Bromeaba? ¡mi corazón quería explotar en este instante!

—¿Porque tardaste tanto en preguntar?—dije con una gran sonrisa en mi rostro, lo abracé fuertemente y cerca de su oído dije "claro que quiero".

FIN DEL FLASHBACK

Aún no puedo creer lo raro que sería contarle a Saori que le entregué mi corazón a mi "secuestrador".

Pero ya han pasado meses, quizás ya todos me olvidaron.

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—Ángel déjate vencer— habló Taehyung a mi lado.

—¿Porque haría tal cosa?— lo miré y le di una suave sonrisita.

Ambos nos encontrábamos en la sala jugando videojuegos, acabábamos de apostar la última rebanada de pizza y yo claramente no me dejaría perder.

—Porque eres mi hermosa novia y me amas?—

–Sabes que siempre te gano, deja de intentarlo— lo miré de reojo.

—¿Porque eres tan mala con tu novio?—

—No soy mala soy-. . .¡si te gané!— grité —como iba diciendo, solo soy algo competitiva—

—¿Compartirás el pedacito de pizza conmigo?— me miró con un lindo y adorable puchero.