Síndrome De Estocolmo

Pasado

Narra Sebastian.

Me desperté con un poco de dolor de cabeza y ganas de vomitar, me levanté peresozamente de mi cama para llegar al baño.

Cuando llegue y mire mi reflejó en el espejo me di un poco de pena por mí apariencia tan demacrada, tenía los ojos hinchados, el cabello despeinado y mi aliento olía a licorería, tome mi cepillo de dientes y me lavé la boca mientras intentaba despertarme mejor.

Suspiré recordando todo lo que pasó anoche y comencé a desvestir me para entrar a la ducha y quitarme la pereza  y jaqueca con un buen baño de agua helada.

Mientras me lavaba el cabello empecé a pensar en lo que pasó después de el inconveniente que tuve con Ciel en su baño.

Me sentía avergonzado y confundido, mi cabeza no puede llevar el ritmo de todas las cosas que pasan en mi vida.

Aún no logró averiguar nada sobre el contrato de Ciel con mi madre y ahora  no puedo dejar de pensar en por que hice lo que hice.

Como se supone que mire a Ciel a los ojos ahora?

Espero que hoy no pueda recordar nada de eso...

Apenas termine de vestirme la puerta metálica se abrió dejando ver a Fred que traía un semblante tranquilo, como de costumbre.

Fred-Buenos días Sebastian.

Sebastian-Buenos días Fred.

Fred-Como te sientes viejo, te duele algo ?

Sebastian-Un poco de migraña y me duele la mano, aparté de eso todo bien.

Fred-Es normal que te duela luego de la madrisa que le pusiste a esos tipos, no sabía que sabías pelear, cómo Ciel nos tiene ordenado vigilante a cada hora pensé que eras más indefenso.

Sebastian-Si sé pelear pero no me gusta.

Fred-Es comprensible.

Sebastian-Oye y ya que lo mencionaste, como se encuentra Ciel?

Fred-Ha cierto! Para eso venía, el se encuentra bien pero tiene demasiada trabajo pendiente así que me pidió que te dijera que hoy no te podrá ver.

Sebastian-Oh entiendo, gracias por avisarme.

Fred-No hay de que amigo, bueno yo me voy que también tengo trabajo, tu has lo que quieras hoy.

Fred me pidió que saliera para poder cerrar la puerta ya que no me apetecía quedarme durmiendo todo el día.

Nos despedimos en el living y yo me en camine a la cocina par ver si podía ayudar en algo.

Curiosamente no había nadie en la cocina más que el señor Tanaka que me saludo con una amable sonrisa apenas me oyó entrar.

Estaba lavando algunos vegetales para  el almuerzo y me pidió que lo ayudará, obviamente acepte pensando que podía conseguir algún tipo de información sobre que tenía que ver mí madre con esta familia.

Tanaka-Espléndido día, verdad Sebastian jo jo jo.

Sebastian-Jaja si tienes razón, hace un clima hermoso.

Tanaka-Hoy no ayudarás a Ciel?

Sebastian-Oh no, hoy pidió estar solo así que te iba a preguntar si necesitas ayuda con algo.

Tanaka-Oh ya veo, pues estoy algo atareado con el almuerzo, te puedo molestar pidiendo que piques los vegetales ?

Sebastian-No es molestia.

Me recogí las mangas para lavarme las manos y empezar con la tarea que me encargo Tanaka.

Mientras cortaba los vegetales Tanaka preparaba las carnes tarareando una canción de cuna o algo parecido, tome aire intentando encontrar las palabras y el valor para preguntar acerca de mi madre.