seras mio

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Narrador omnisciente

El día comienza y sebastian empieza a prepararse para trabajar, se pone el esmoquin que le asignaron, ayer su jefe le dijo que por cuestiones de puntualidad enviaría a alguien para que lo recogiera a eso de las ocho apenas son las siete así que se fue a desayunar y luego se cepillo los dientes cuando termino suena la bocina de un auto que le señala que ya es hora de ir a su trabajo,llegaron en unos 30 minutos y en la entrada se encontraba el señor mayor que ayer se entero que se llama Tanaka, tenía una sonrisa amable mientras me pedía que lo siguiera a la cocina,le dio una explicación de que debería hacer y le dio un recorrido por la mansión y dijo que intentara no perderse, dijo que su amo era de mal despertar por lo que no sé preocupara por si por la mañana esta de mal humor o incluso no me hablaba.

Narra sebastian

Cuando terminaron de explicarme lo que debía hacer era casi medio día por lo que nos pusimos a preparar el almuerzo, soy bastante bueno cocinando así que no tuve problemas con eso pero Tanaka me dijo que llamara al joven amo a la mesa para que almorzara por lo que me quite el delantal y me coloque el saco para verme nuevamente perfecto y arreglado.

Camine hasta la misma puerta donde ayer había tenido la entrevista toque dos veces y espere una respuesta hasta que oí un "pase" y abrí la puerta recibiendo la mirada penetrante de ciel que me miro de pies a cabeza para después sonreír ligeramente, eso me incomodo un poco.

-vaya te vez muy bien en traje.

-gracias amo, venia a informarle que el almuerzo ya esta listo.

-de acuerdo pero llámame ciel por favor.

-no quería faltarle al respeto, apenas lo conozco.

-ya me conocerás, además era una orden no una petición.

Mientras decía esto volvía su vista a los papeles que estaba revisando yo solo pude tragar saliva y resignarme con lo que me había dicho hice una leve reverencia y me retire pensando que este chico es algo raro.

narra ciel

Vaya sebastian se ve tan hermoso con ese traje, incluso mas de lo normal, después de que se retiro de mi oficina no pude evitar pensar que era jodidamente tierno y obediente no puedo esperar para cumplir con mi plan, pero eso por ahora no podrá ser, baje a la cocina y me encontré con Sebastian y Tanaka colocando la comida en la mesa y no me pude resistir en pasar mi vista por el trasero de Sebastian y vaya.....no tiene culo.....bueno eso no importa mucho de cualquier manera.

Me senté en la mesa y disfrute de la maravillosa comida que habían preparado Sebastian y Tanaka, era de esperarse pues ¿como no podría mi hermoso mayordomo ser capaz de algo tan simple?

Después de que termine de comer me levante de la mesa, agradecí por la comida y me fui entregándole una ultima mirada picara a sebastian que solo se sorprendió y fingió no haberlo notado, vaya que es tierno, fui a mi oficina a intentar trabajar un poco mas pero mi mente no me ayudaba, dándome ideas de como cojer con Sebastian que hacían que se me parara a cada rato y haciendo que tuviera que desahogarme urgente mente, así paso el resto del dia hasta que note que ya era de noche y también hora de poner en marcha mi plan.

Llame a sebastian a una habitación que había en la parte subterránea de la mansión, tardo un rato en llegar probablemente no la encontraba.

-que se le ofrece joven amo.

-te dije que me llamaras ciel y te llame para hablar sobre algo podrías sentarte.

Sebastian se sentó en la silla que le dije yo solté una leve carcajada y pulse un botón que hizo que unas piezas metálicas sujetaran sus muñecas y tobillos él se asusto obviamente, camine lentamente hacia la puerta y la cerré con una llave magnética para después mirarlo y confirmar que tenia miedo, camine hacia el meneando mis caderas de un lado a otro para después tomar su barbilla haciendo que me mirara a los ojos.

Síndrome De Estocolmo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora