CAPÍTULO 1|CONTRATO

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- Necesito ése préstamo-- dije muy convencida

- se que lo necesita pero las políticas de nuestro banco son claras. Usted no tiene un trabajo fijo, apenas hace manicura y sus ingresos son menores a lo que usted solicita en calidad de préstamo, lo siento mucho señorita Duarte

- Es que usted no entiende, necesito medicinas para mi mamá, ella tiene una enfermedad muy grave y mi papá apenas tiene dinero

- Señorita, no se puede hacer nada. Inténtelo en otro banco.

Esas fueron las palabras de la asistente de préstamos del Banco G&C. Recuerdo todavía las ganas de morir, de no tener esta vida, de no tener que luchar con esta carga.

Empecé a caminar hacia la puerta del Banco y escuché una voz que hoy admito, jamás podré olvidar

Gruesa, nítida y firme; ésa fue la voz que escuché. Y venía de un hombre alto, con un cuerpo tonificado, su rostro se veía cansado y hasta parecía molesto. Serio como nadie en la vida, sus cejas estaban fruncidas.

- Señorita!-- dijo el hombre elegante.-- acompáñeme-- ordenó y entré a su oficina-- tome asiento; escuché que necesitaba un préstamo pero se lo negaron, lo que no escuché fue la cantidad que usted solicita.

- ehh...-- titubeé-- 20 mil dólares....vi que ofrecen eso a los microempresarios

- ¿cuál es su microempresa?

- Soy manicurista. Trabajo con uñas acrilicas, ése es mi fuerte y me va bien en serio.

-¿cuánto gana al día?

- 50 dólares gano en los días más bajos.

- Y eso no es suficiente-- dijo el señor

- Si! Eso fue lo que me dijeron-- volví a sentirme triste

- Cuénteme, señorita Duarte ¿qué hará con el dinero?-- preguntó y parecía que en cualquier momento me iba a regañar.

- Quiero comprar la casa en la que vivo con mi madre y remodelar un espacio para atender a mis clientas y así poder tener mucho más dinero y pagar el tratamiento de mi mamá.

- Es muy costoso el tratamiento?

- Cada sesión cuesta 600 dólares

- Costoso!-- dijo el hombre-- Señorita le haré una pregunta muy fácil con una respuesta fácil, ¿qué sería capaz de hacer usted por recibir 5 mil dólares mensuales?

-¿disculpe?

- No creo que tenga que repetir la pregunta, yo hablo claro.

- ehh...Si...es que...no sé

-¿no lo sabe? Que decepción!-- se puso de pie Y caminó hasta la puerta de su oficina, casi parecía echarme

- No! Espere, yo sería capaz de todo. De todo!-- dije muy rápido y mis manos estaban heladas.

- El día de mañana la espero aquí a las 10 de la mañana, puntual. La veré con mi abogado.

***
Fui al día siguiente, muy emocionada. Algo me decía que iba a salir de esa reunión con un trabajo nuevo.

Apenas ingresé, el guardia de seguridad del Banco me dijo que el gerente me estaba esperando en el 4to piso en la sala de reuniones.

Subí y en efecto ahí estaba él, nuevamente serio y elegante. Conversaba con otro hombre de mayor edad y se veía preocupado. Golpeé apenas la puerta y alzó la mirada, con una seña de su mano me pidió que entrara.

- Buenos días, permiso-- dije nerviosa y me quedé parada frente a ellos dos mientras veían unos papeles

- Siéntese-- dijo el gerente

Contrato de AMOR Donde viven las historias. Descúbrelo ahora