c u a t r o

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8:30 pm

J U N G K O O K

Ya llevábamos una hora desde que salimos del hotel, y al parecer la suerte estaba de nuestro lado. Ya que no habíamos sufrido ningún ataque, pero aún así debíamos mantener la guardia. Namjoon iba al frente y se aseguraba de tener el área despejada.

Íbamos a mitad de la calle cuando comenzamos a escuchar unos gritos, volteé a ver y me fijé que venían persiguiendo a alguien. Alerté a los chicos y corrimos a escondernos en unos arbustos. Luego vimos cómo alcanzaban al pobre señor, primero lo golpearon y luego procedieron a desmembrarlo. Cerré mis ojos e intenté borrar la horrible imagen que había quedado en mi mente.

Los asesinos huyeron y salimos de nuestro escondite, solté un suspiro largo y luego me apoyé en una pared.

—Debemos encontrar refugio pronto —habló Jin—. No podemos seguir exponiéndonos así en la calle, sería cuestión de tiempo para que nos maten.

—Apoyo a Jin hyung —habló Jimin—. ¿Y si vamos tocando puertas? —preguntó—. Más de alguien nos ayudará.

Miré mi alrededor y habían varias casas, no se veían muy lujosas, pero si cálidas.

—Cada uno podría ir tocando una puerta —habló Yoongi.

—Está bien —respondimos todos al unísono.

Pero cuando íbamos a separarnos alguien comenzó a dispararnos desde una ventana, solté un grito y todos comenzamos a correr nuevamente. Pero Jimin cayó al suelo y junto a Hoseok lo levantamos, una bala había caído en su pierna derecha.

Llegamos hasta el final de la calle, donde había una casa. Los chicos comenzaron a tocar desesperadamente la puerta mientras pedían ayuda.

—¡Por favor! —gritó Taehyung—. ¡Mi amigo está herido!

—¡Necesitamos ayuda! —gritó Namjoon.

L U

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L U

Escuché como tocaban desesperadamente mi puerta, miré la pantalla que mostraba las grabaciones de la cámara de seguridad y me fijé que habían siete chicos afuera, se veían muy asustados, también me parecían vagamente conocidos.

Luego de pensar unos minutos, me acerqué a la puerta hablé.

—¿Qué me asegura que no podrán hacerme daño? —pregunté.

Alguien los calló del otro lado de la puerta, aclaró su garganta y habló.

—Somos extranjeros y nunca lastimaríamos a alguien... es inhumano —habló—. Por favor... ayúdanos.

LA PURGA • BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora