¡Gēge, noticeame! ➳ Tendery (EN EDICIÓN)

veintiuno

John miró con la boca abierta en una expresión incrédula a Chittaphon por unos segundos antes de emitir un simple.— ¿En serio?

Sintió que, a diferencia de JinSol, en esta ocasión había resultado todo ridículamente rápido, más teniendo en cuenta que se propusieron el investigar dos personas esa semana. ¿Acaso había algún tipo de magia a su favor?

— Síp. -contestó con sencillez el tailandés y se dispuso a buscar alguna canción en su laptop.

Ese sábado Seo había llegado a su casa para pasar el rato, algo ya normal en él —de hecho su casa empezaba a parecer la de John también— y Ten le contó lo que antes le habían dicho JiSoo y Julia.

— Eso significa que no fueron ellas, y entonces eso significa... -el más alto cerró levemente sus ojos antes de abrirlos de golpe y señalar a Chittaphon con su dedo índice.- ¡Que fue KunHang!

El menor saltó levemente en su lugar ante el fuerte tono de voz que utilizó Seo y no pudo evitar mirarlo con un pequeño deje de molestia y sus mejillas sonrojadas cuando lo escuchó reírse.

— Yah, eres un tonto. -formó un puchero y giró a ver su laptop nuevamente, no tardando en reproducir una canción llamada Why not?

— Como sea. -fingió limpiarse una lágrima y entonces volvió a señalarlo.- ¡Te dije desde un principio que había sido él!

— Y yo te dije que no. -lo miró serio.- Además, ¿cómo puedes decir que es él? Aún falta alguien más, puede ser él. 

Cada vez que Seo le insinuaba el que KunHang podía ser el emisor de esa carta sentía algo raro en su pecho, algo que a día de hoy aún no sabía describir. No consideraba que fuera incomodidad, pero tampoco era un sentimiento agradable.

A diferencia de las otras tres chicas, KunHang ha sido el único de aquella lista con el que ha conversado y compartido amenamente sin ser algo completamente forzado, aunque eso se le acreditaba al hecho de que compartían amigos en común.

KunHang lucía muy inocente y agradable, jamás ha llegado a mencionar que esté interesado en alguien —al menos cuando él está presente— y parecía ser alguien reservado con ese tipo de temas a decir verdad, y aquella declaración que fue dejada en su casillero fue... muy explosiva.

Un resoplino provino de John antes de tomar su celular y desbloquearlo.— Te gusta el camino difícil. -murmuró antes de elegir una foto de su galería y extenderle el teléfono al tailandés, este lo tomó y vio la foto de un chico degaldo y de cabello un tanto grisáceo.- es Lee TaeYong, por alguna extraña razón, el director le permitió que no estuviese en ningún grupo este año. Cuando todos están con sus respectivos grupos él sólo se queda caminando por los pasillos.

— A veces me pregunto cómo sabes todo esto. -miró unos segundos más la foto antes de mirar a John.- A veces es siempre.

— A veces es mejor no saber. -le respondió y la habitación se habría sumido en silencio si no fuera por la música que aún sonaba.

Si no lo conociera, John sería completamente el tipo de hombre del que el tailandés correría.

» Nah, mentira, tiene una cuenta en instagram y a veces hace lives ahí o postea fotos cuando ya se aburre de sólo caminar por los pasillos. -Ten parpadeó repetidamente cuando el celular de John estuvo muy cerca de su rostro, mostrando la mencionada cuenta con el nombre de ty_track.

— A ti te gusta asustarme y luego devolverme el oxígeno de un solo golpe. -se quejó Leechaiyapornkul y el mayor sólo rió.

— Ahora que lo pienso, ¿y YangYang? -indagó y bloqueó la pantalla de su celular.

— Encerrado en su cuarto, desde hace como dos días se la pasa todo el día escribiendo con DeJun. -se encogió de hombros, restandole importancia a ello.

Y aquello que decía era más que cierto, Chittaphon jamás había visto a Liu tan apegado a su celular desde que empezó a hablar con Xiao, simplemente desaparecía del mundo en el momento que empezaba a hablar con él y dejaba de hacer todo lo que estaba haciendo en ese momento.

Cuando tomaba ese celular era solo DeJun y él, nadie más.

Ten, al igual que KunHang también había notado este repentino acercamiento de los chicos, pero por más curiosidad que tuvieran o por más que indagaran, ambos siempre solían dar el mismo tipo de respuestas, asegurando que sólo exageraban.

YangYang disfrutaba de cada anécdota graciosa que le contaba el mayor, sentía que hablar con él era sinónimo a jamás aburrirse y eso era algo que agradecía. Mientras que muchas veces sus compañeros de clase solían describir su personalidad como una muy "imperactiva", Xiao constantemente la alagaba y eso le brindaba una linda sensación cálida en su pecho, siempre era capaz de sacarle una sonrisa.

Claro que, en todo esto, siendo incosciente de la manera alocada en la que el corazón de DeJun latía cada que recibía un mensaje suyo. YangYang era muy inocente aún para notar los sentimientos del otro.

Y a la vez, muy inocente como para reconocer lo que estaba sintiendo.

Editado 11/O3/23