23 - Viaje (parte 2)

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El sol golpeaba mi cara, sonidos de pájaros y olas a la lejanía hacían parecer esa mañana hermosa. Claro, más aun hermosa sabiendo que por fin se apagaría el vibrador. 

Ya habían pasado tres días desde que estábamos en la cabaña pero esa noche fue una de las mas tortuosas. 

Aun me encontraba atada a los pies de la cama con un vibrador encendido en mi vulva, no podía hacer nada para evitar la vibración. Estuve toda la noche así, luego de ser abierta por mis amos aun con semen escurriendo por mi cara me colocaron el vibrador y se fueron a dormir con mis gemidos de fondo. No sabia hasta que hora estuve despierta debido a que no podía dejar de correrme una y otra vez, solo pude quedar dormida gracias al cansancio que eso había provocado en mi, al despertar aun seguía con el vibrador encendido, era un dolor delicioso pero ya no tenia fuerzas para resistir. 

Apagaron el instrumento de tortura placentera y mi entrepierna estaba roja a mas no poder. Me subieron a la cama y con las piernas abiertas, melisa trajo una crema hidratante la cual paso por toda el área.

-Lo hiciste bien tesoro, dejaremos descansar tu vagina de perrita por un día- Dijo pasando con su típica delicadez, el contacto de mi piel hirviendo con la crema helada era exquisita

-Gracias ama, enserio no se ni como pude dormir incluso soñé con que me follaban jajaj- 

En eso jake llega y besa mi cuello hasta llegar a mi vulva. 

-De seguro te usaban bien rico en tu sueño, quedaste muy irritada en tu entrepierna preciosa y yo que quede con ganas de abrirte- comento jake acariciando mis muslos delicadamente. 

Melisa paso sus dedos por mi cabello, comenzó a quitarse la ropa para cambiarse y bajar a tomar desayuno. Yo aun agotada por la ardua noche vibrando, no pude colocarme en pie para hacerle comida a mis amos

-Te dijimos que descanses un poco, yo cocinare esta mañana ¿Bajaras ahora amor o usaras tu juguete?- consulto a jake 

-En unos minutos bajo, tenme listo el café- Ella asintió y bajo

-¿Que agujero desea usar amo?- Me dirigí cordialmente a mi dueño como se me había enseñado

-Tu culo, aun debes dejar descansar tu bonita vagina- Posterior a eso beso mis labios y me puso en cuatro, con un poco de lubricante en su pene vino la presión en mi ano, el cual ya acostumbrado a ser usado dio paso libre a jake. 

Como toda una chica para videos de adultos me encontraba gimiendo y moviendo mi trasero lo mas rápido posible, sentir como su pene me abría es una dulce adicción. Me alegraba pensar que antes de ser sumisa ni un dedo entraba por ahí atrás y ahora solo un pequeño empujón bastaba, incluso muchas veces no usamos lubricante. 

Mi pelo jalado por sus manos me hacia sentir aun mas indefensa, con la otra mano golpeaba mi culo una y otra vez hasta dejarlo rojo. 

-Muy bien luna, mi puta sumisa aprendiste muy bien- Dijo haciendo sentirme muy orgullosa y a la vez mas excitada

-¡Si amo!¡Mas fuerte lo supli..- Basto solo eso para que la intensidad aumentara, subi mi cadera y baje mi cara, hasta que comencé a correrme seguido de sacudidas de mi cuerpo. 

Jake estaba feliz y con un golpe metió todo lo que pudo su pene dentro de mi y acabo. 

Al desconectarse de mi, todo su semen escapo con el. Desde mi culo podía observarse todo su "leche especial". Al soltarme caí para al lado sin energías. 

-¡Felicidades laura, pudiste correrte solo haciendo anal!- Me acaricio mi espalda y luego se coloco al frente de mi

-Pero no pediste permiso para acabar, así que serás castigada mas tarde ¿Entendido?- Dijo jake con su cara más seria, asentí con una cara de excitación mantenida. 

Mascota de la casaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora