Desperté aun en la jaula, creo que me había despertado primero, ya que aun tenia la frazada sobre mi jaula y no escuchaba a nadie. Durante la noche no sentí frio y dormí cómodamente, no pensé que dormir en una jaula podría ser tan genial.
-Amor ya hay que levantarse- escuche decir a jake
Se levanto y por lo que escuche se metió al baño, no sabia si decir algo o no, en eso alguien levanta la frazada de la jaula y me asusto
-Hola pequeña ¿Cómo dormiste?- Era melisa
-Bien la verdad fue muy cómodo y raro jaja ¿ya puedo salir?- Pregunte
-No, aun no te sacaremos, espera un poco mas deja arreglarnos y cuando tengamos el desayuno listo te vendremos a sacar- dijo melisa y yo solo pude asentir, ella sonrió y se metió al baño, parece que los dos se empezaron a bañar.
Mientras los esperaba recordaba que ya era lunes y tenia que volver a casa a medio día, llegaba mi madre y luego debía ir a trabajar, pero no podía dejar de pensar en la situación en la que estaba, todo lo que sentí y aprendí con ellos, era loco e increíble ¿acaso todo este mundo podía ser para mi también?.
Ellos actuaban normal, como si fuera lo mas común del mundo tener a su vecina en una jaula, bueno creo que ya hasta era un poco normal esas situaciones, aunque la costumbre no quitaba que se humedeciera mi entrepierna. Jake paso a mi lado me saludo y me acaricio la cabeza como siempre hace, antes de salir para la cocina. Melisa demoro un poco mas en el baño, salió con bragas y sin sostén, sus pechos se veían suaves y hermosos en especial por un lunar en su pecho izquierdo que para mi me hacia verlo aun mas bello, se puso sostén y ropa frente a mi como si no estuviera en su habitación y termino saliendo del cuarto.
Me desperté cuando jake abría la jaula, al parecer me había quedado dormida esperando salir, fuimos a la mesa para comer, habían hecho pan con queso derretido y jugo.
-Y cuéntanos ¿Cómo fue dormir así pequeña?- Pregunto jake mientras comía su pan y el queso luchaba entre el pan y su boca
-Fue muy loco, me acomode muy bien y fue como dijiste no pase frio dormí super bien, nunca pensé que diría lo siguiente pero me gusta mucho esa jaula jaja, gracias por hacerme probar y enseñarme varias cosas este fin de semana-
-Que bueno que te gusto y no te preocupes, es lo mejor aprender cosas y conocer nuevas experiencias- dijo melisa
Cuando terminamos de desayunar, ordenamos y lavamos juntos, luego me fui a bañar para irme a casa y esperar a que llegue mi mama, pero cuando salgo de la ducha no encuentro mis braguitas
-Te iras sin braguitas- dijo melisa desde la puerta
-Pero ¿por que?-
-Simplemente porque yo lo digo, es una buena forma para terminar un lindo fin de semana- Me lanzo un beso
-Esta bien solo porque tu me lo pides melisa- Desvié la mirada
Me sonroje al ponerme mi pantalón y no sentir ropa interior abajo, ordene mis cosas y deje limpia mi habitación que use solo una noche ya que use una jaula la segunda. Al acercarme a la puerta los vi a los dos esperándome y me abrazaron.
-Si necesitas ayuda o pasar un lindo rato ven a visitarnos la pasamos muy bien contigo, espero no haberte pasado a llevar con nuestras locuras- dijo jake
-Gracias y tranquilos no hicieron nada malo disfrute todo lo que pase con ustedes, ahora que tengo sus números de celular, es más fácil comunicarme con ustedes, dejare mi osito aquí con ustedes ya que a mi madre no le gusta tener peluches en casa-
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Mascota de la casa
Fantastik¿Qué harías si en un momento inesperado, sin darte cuenta, tu vida cambia al conocer a tus nuevos vecinos? ¿Cederías ante ello, cederías ante la tentación del control y la perversión, incluso si esto puede afectar tu vida? Relató fantasioso erótico...