Capítulo XXX

99 20 0
                                    

• Choi Soobin •

Sentí una sensación extraña al observar como el pelirrojo tomaba a Yeonjun de la cintura evitando que se apartará de el atrapando sus labios en un besó que revolvió mi estómago.
Dí medía vuelta para alejarme de el lugar cuando aquel llamado me hizo sentir escalofríos.

—¡Soobinie!

Volví a girar hacia el peliazul quién alejaba al mayor de el rápidamente, el más alto al percatarse de mi presencia sonrió triunfante tomando del brazo al peliazul para tomar su mentón y besarlo nuevamente, observé aquella escena, observé a él peliazul tratar de empujar al pelirrojo pero sin embargo este lo había arrinconado a la pared cercana.
S

in darme cuenta ya había lanzando mis pertenencias al mayor para luego empujarlo lejos de Yeonjun, este solo volvió a sonreír con burla.

—¡Te arrancaré esa maldita sonrisa!— grité.

Sin pensarlo golpe a el mayor haciendo que cayera al suelo, Yeonjun estaba gritando algo que realmente no escuchaba, solo quería matar al idiota, en unos segundos ya estaba sobre el golpeando su rostro mientras tomaba su camisa con fuerza, sin embargo no bastó mucho para que esté comenzará a responder de igual manera, sin darme cuenta una pequeña multitud estaba a nuestro alrededor observando la escena que realmente no me importaba, más sin embargo estaba concentrado en golpear el pelirrojo quién no tardó en empujarme lejos de el una vez pudo ponerse de pie.

—¡Eres una maldita escoria!— exclamé limpiando mi labio el cual estaba sangrando.

—¡Soobinie basta!— el peliazul gritó una vez estuvo frente a mí.
Un par de lágrimas descendían por sus mejillas mientras tomaba mi brazo con fuerza.

—¡Te arrepentirás de esto, imbécil!— gritó volviendo a acercarse a mi, en ese momento me di cuenta de lo que había hecho, me estremecí ligeramente al observar como el mayor se acercaba, más sin embargo ya no sabía que hacer.

—¡Nadie va a pelear aquí!— una voz interrumpió. La profesora Rose había aparecido colocándose en medio de la pequeña multitud— ¿Quién eres tú?— preguntó al mayor— No deberías estar aquí.

—Solo pasaba— se excusó, reí por lo estúpido que había sonado eso.

—Deberas ir a dirección o de lo contrario tomaremos acciones legales por haber herido a un estudiante— pronunció ella, sonreí al ver como el pelirrojo se removió ligeramente, la profesora se giró hacia mi— ¿Choi Soobin?— dijo con sorpresa— nunca espere un comportamiento así de tu parte— me quedé callado ante las palabras que la mayor pronunciaba— también vienes, ahora, ambos— pronunció dando la vuelta seguido de ambos.

—Soobinie— el mayor musitó tomando mi mano— Esto es mi culpa, déjame ir a hablar, tú no mereces ser castigado.

Sonreí para tomar las mejillas del mayor— yo lo golpeé, es mi culpa, tú no hiciste nada malo, Junnie hyung— abracé ligeramente al mayor, me quejé ante el dolor que aquello me causo— yo dije que lo cuidaría.

El mayor no dijo nada, di la vuelta siguiendo a la profesora junto con el pelirrojo, de alguna manera ver los golpes que ahora decoraban su rostro me hacían sentir bien de alguna manera.

+✖+◀

—¿¡Una pelea!? ¿¡En que demonios estabas pensando, Soobin!?— gritó mi madre— Estoy harta de este comportamiento, acepte que tuvieras el auto, que salieras sin avisar, incluso no reclamé cuando tus calificaciones descendieron, pero esto, esto no lo puedo aceptar, ¡Suspendido, Soobin!— reclamó— Te suspendieron, gracias a que fuiste un buen alumno no te expulsaron— suspiró— sólo dime qué pensabas.

No dije nada y sólo baje la vista ante la mirada intimidante de mi madre, ella tenía razón, todo parecía haberse venido abajo de poco en poco, pero de alguna manera me sentía bien sabiendo que Yeonjun lo estaba.

—¡Respóndeme!

—M-mamá— hablé casi en un murmullo— El estaba tomando a Yeonjun a la fuerza— confesé bajando la mirada— No pude resistir, el estaba apunto de llorar mientras que No' parecía disfrutar el verlo de tal forma— suspiré sintiendo unas lágrimas descender por mis mejillas— Mamá, no estoy orgulloso de lo que hice, pero tampoco estoy arrepentido.

Mi madre no dijo nada y sólo me observó con los ojos abiertos hasta donde sus párpados les permitieron, soltó un suspiro para luego acercarse a mi y pasar su mano por mí cabello, tomé su cintura entre mis brazos recargando mi cabeza en su abdomen.

—¿Yeonjun es quién te ha puesto así?— lo medite un par de segundos, realmente el mayor había cambiado poco a poco mi vida, pero me gustaba tenerlo en ella— ¿El es con quién te quedas?

—Yeonjun hyung no tiene la culpa mamá, el es alguien bueno, lo prometo— musite.

Ella tomó lugar a mi lado recostandome sobre sus piernas mientras acariciaba mi cabello y mejillas con suavidad.

—Soobin— murmuró ella— lamentó haber alzado la voz, debí preguntar primero lo que pasaba, sé que debe de haber una razón, tú no eres así— se disculpó— lo siento, quiero que sepas que soy tu madre y estaré aquí, cariño.

Mordí mi labio ligeramente meditando si debía comentar aquello con mi madre o guardarlo.
Quizá debía decirlo para que ella me pudiese dar un consejo, pero la idea de que me rechazará apartir de ahí estaba presenté, suspiré lentamente y observé a mi madre con una sonrisa.

—Mamá— hablé ganando su atención— Me gusta Yeonjun— confesé.

—¡Lo sabía!— un gritó se escuchó ganando nuestra atención, ambos giramos a la puerta donde Hueningkai estaba llegando a casa—Lo siento— se disculpó—¡Estoy en casa!— gritó contentó— iré a mi habitación— comentó subiendo rápidamente.

Giré a ver a mi madre quien pareciera aún estar pensando en lo que había dicho unos segundos antes, la idea de que no fuera a aceptarme de ahora en adelante me invadió causando un temor, desvíe la vista ante la idea, pero una sensación relajante me invadió al escuchar una leve risa de mi madre.

—Debí darme cuenta antes, sabía que tú nunca te levantarías temprano de no ser que hubiera algo importante— comentó haciendo que desviará la vista avergonzado.— Deberías traerlo a cenar, quiero conocerlo, debo saber quién hace feliz a mi hijo.

—No sé, si yo lo haga feliz mamá— confesé, ella alzó la ceja en respuesta y movió su cabeza dándome a entender que siguiera hablando— ha pasado tiempo desde que nos hicimos cercanos, pero el parece no querer hablar, no sé qué hacer, cuando trato de hablar sobre algún tema de su vida, evita la conversación, ¿Y si no confía en mí?

—Soobin, cariño, el debe tener sus razones, te tiene confianza si no lo hiciera te habría estado evitando desde el principio— sonrió pasando su mano por mí cabello— lo hará cuando sienta que deba hacerlo.

Lo medite unos segundos, quizá tenía razón y no debía forzar al peliazul a hablar de algo que no estaba listo, ella golpeó ligeramente mi brazo habiendo que me levantará, sin pensarlo la abracé fuertemente— gracias, mamá— dije.

—Cariño soy tu madre, voy a amarte y a cuidarte— respondió— ahora ve a tu habitación, cambia tu ropa y baja con Kai para cenar— asentí y la solté para así caminar hacia mi habitación.

Giré la perilla y entre encontrando a Hyuka abrazando uno de sus peluches para girar hacia mi con una sonrisa.

—Entonces... Yeonjun— comentó con una risa.

—Callaté.

—Le dije que le gustaría— sonrió.

Eternally // YeonbinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora