Madame Amelia

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-¿Qué fue lo que ocurrió Sarah?- Amanda y yo entramos a nuestro camerino para cambiarnos nuestra ropa de bailarinas.

-Pues nada, salimos a un bar y ella se pasó de copas. Vomitó afuera del lugar, tuve que llevarla a mi departamento y en la mañana antes de que llegará Cate con Hanna la mandé en un taxi a su casa. Desde ese día no he hablado con ella.

-Bueno amiga pero ¿Qué te sorprende?- Amanda me miró incrédula

-¿Cómo que qué me sorprende?, pues como se puso Amanda, si yo no hubiera ido con ella ¿Sabes el peligro que hubiera corrido?- le respondí

-Amiga entiendo el punto pero es completamente normal, ¿Cuántos años tiene Odette? ¿26?, está en plena etapa de divertirse, del descontrol de juventud, de la fiesta, de los amigos, de los conciertos, de los bares e incluso de las drogas. No estoy diciendo que esté bien pues esas son cosas malas pero como todo mundo tiene que pasar por ese proceso. Tiene que conocer para que cuando tenga nuestra edad ella diga... "Ok ya lo viví ya no me quedan ganas de hacerlo", ella va a madurar pero para que lo haga debe vivir su juventud.

Tú ya lo pasaste, tú ya fuiste esa chica descontrolada que se la pasaba en conciertos, que bebía hasta emborracharse, que fumaba y que incluso llegó a probar drogas. No me puedes molestarte porque ella viva un proceso que tú ya pasaste.

-Lo sé y lo entiendo Amanda, pero me sentí muy incómoda al verla de esa manera, de ver que ni siquiera podía sostenerse en pie. También me preocupa que se ponga así pues le pueden pasar infinidad de cosas.

-Lo que tiene que hacer es hablar con ella y comentarle no como un regaño si no como una amiga que debe tener más cuidado. Quizás no te haga caso pero quizás sí, no te estreses es normal y lo que tienes que pasar cuando sales con alguien menor.

-Te agradezco tus palabras y créeme que si lo haré, hablaré con ella- le sonreí

-¿Cuándo es tu reunión con los abogados?- Amanda cambió el tema

-Tuvimos que desplazarlo, nos vemos el próximo mes, ¿Por?

-Sólo tenía la duda.

La puerta del camerino sonó insistentemente.

-¿Quién es?- pregunté

-Amelia Von Streen- sonó detrás de la puerta

-Mierda es la dueña de la compañía- susurré- ¡En un momento abrimos!, denos unos minutos.

Amanda y yo terminamos de cambiarnos, nos arreglamos un poco el cabello y finalmente abrimos la puerta.

-Adelante señorita Von Streen- Amanda dio paso a que aquella mujer de 80 años entrara, vestía ropa negra, peinaba con una cola de caballo alta, su piel blanca y sus ojos verdes y duros nos miraban.

Amelia era la dueña de la compañía, una de las mejores bailarinas, con tremendo porte y a pesar de su edad una belleza deslumbrante, medía aproximadamente 1.70 y lo que la caracterizaba eran las joyas preciosas que vestía.

-¿En qué podemos ayudarle madame?- respondí nerviosa

-Quise venir como iban con los ensayos, faltan dos días para la presentación ¿Está todo listo?

-Sí señora, ya estamos listos, arreglando los últimos detalles.

-¿Quién de ustedes es Sarah Paulson?- Amelia preguntó con voz fría

-Soy yo, ¿Qué pasa?- respondí nerviosa

-Me han llegado chismorreos detrás del telón. Parece ser que todos aquí se han enterado que usted y una bailarina mantienen una relación amorosa.

Créame señorita que me importa muy poco que haga fuera del teatro con su vida privada, pero soy enemiga de que dentro de mi teatro y de mi compañía pasen estas cosas...

La sangré se me congeló y sentí una punzada en mi pecho del lado izquierdo.

-Me comentaron que usted mantiene una relación con la señorita Odette y que incluso han llegado a verlas tener intimidad dentro del camerino e incluso las han llegado a escuchar, repruebo esta actitud en sobre manera. Las demás bailarinas están molestas porque alegan que se le dio el papel protagónico porque usted se la estaba "cogiendo"

-Señorita le juro que eso no es cierto...- dije rápidamente

-No me interrumpa, no he terminado- ella me interrumpió- Si pudiera la correría a usted y a ella pero faltan dos días para la presentación y no me puedo quedar sin personaje principal. Van a terminar la presentación y la señorita Amanda se encargará de preparar a otra de las chicas como Odette.

Usted está despedida de la compañía, se le pagará lo que falta en su contrato, le daremos una liquidación y la señorita Odette será expulsada de la compañía. No hay explicaciones y ruego ni usted ni la joven se acerquen a mi oficina para pedirme quedarse aquí, si tienen alguna duda pueden contactar con mi representante.

La señora Amelia salió del camerino caminando tal cual había llegado, con la espalda erguida sacando el pecho y una soberbia que se notaba a kilómetros de distancia.

-¿Qué sucedió?- preguntó Amanda aún sorprendida

-¿Amanda dijiste algo?- le pregunté aguantando las lágrimas

-Claro que no Sarah, no le he dicho a nadie sobre esto, y sé perfectamente que la señora Amelia es enemiga de los romances detrás de escena y sobre todo que es una mujer homofóbica.

-No puede ser posible esto, ¿Quién fue la persona que dijo semejantes cosas?- comencé a llorar- Amanda... me van a quitar a Hanna- rompi en llanto

Amanda se acercó a mí y me dio un fuerte abrazo mientras me besaba la frente. 

La Joven Bailarina "Le Jeune Danseur" (Atracción prohibida Pt. 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora