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Fuera del colegio lo vio, YoonGi y NamJoon estaban allí esperando por el. JungKook se encontraba platicando con ellos, ya que el pequeño alfa salía unos minutos antes, pues estaba en diferente clase que TaeHyung y JiMin.

Su hermano se notaba ansioso y preocupado, con ojeras en sus ojos. Se notaba no había dormido bien y así era. La preocupación de no saber donde estaba JiMin no le dejo dormir. Por otro lado, YoonGi tenía una sonrisa mientras cargaba con dos pequeñas cajas en sus manos.

Ambos omegas se fueron acercando e inmediatamente el rostro ansioso de Nam se fue calmando y la sonrisa del azabache se agrando.

— ¡JiMin! — exclamo el más alto.

Se acerco corriendo a su hermanito y lo abrazo con algo de fuerza y el rubio no dudo el corresponder el gesto.

— P-Por favor perdóname. N-No quería golpearte, solo... fui un estupido.

— Esta bien, NamJoon. No debí dejar a Ddosun en tu habitación.

Ambos se sintieron mejor de haber solucionado ese problema, pero llegando a casa hablarían de lo que ha estado pasando estas ultimas semanas.

Ahora JiMin se acerca a YoonGi, quien le extendió las dos pequeñas pero alargadas cajitas. El omega lo observo curioso pero con una sonrisa.

— Gracias, Yoon.

— Son macarons. Ya sabes, esa galletita francesa.

— Oh si, ya se cuales son. Me gustan mucho.

— Me alegra saber que te gustan.

El azabache acompaño a ambos hermanos camino a casa. Las hojas anaranjadas de los arboles caían al piso debido al otoño que estaba por acabar para dar paso al invierno y con ello traer la nieve a Seul.

Los hermanos Park disfrutaban aquellas épocas del año, donde se divertían haciendo muñecos de nieve y jugando a lanzarse bolas de nieve. Una de las actividades que mas les gusta es poder patinar sobre el hielo en la plaza de Seul donde cada invierno abrían al publico.

En pocos minutos ya habían llegado a la casa, YoonGi se despidió de ambos y se encamino hacía su hogar. Ambos entraron y se sentaron en el sofá para poder hablar.

— Lo siento, admito que mi actitud no estuvo bien. Esta fue una semana llena de exámenes y estaba estresado.

— Yo también tengo algo de culpa, Nam.

— Lo se, pero... — hace una pausa y observa a su hermano — iba a golpearte y yo... no... yo nunca me hubiese perdonado eso.

— Esta bien, Joon. Te perdona por que te detuviste antes de hacer algo.

Ambos se levantaron de sus sitios y se acercaron para darse un abrazo, pero son interrumpidos por el timbre siendo insistentemente tocado.

NamJoon abre y detrás de el JiMin se asoma. Era TaeHyung con un rostro serio; alzo sus brazos y con ello al perro que cargaba.

— Se te olvido el perro en mi casa.

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NamJoon observaba con ojos entrecerrados a su hermano que yacía con ropa formal esperando en la sala de la casa. El omega estaba en el celular chateando con sus amigos mientras esperaba a que YoonGi llegara.

— Joonie, voy a pasar al baño rápido.

El alfa asiente y justo cuando su hermano se encerró es cuando el timbre sonó anunciando que su amigo ya había llegado para llevarse a su hermano. Al abrir la puerta allí estaba, con su elegante vestimenta y un ramo de flores entre sus manos, sonriendo tímidamente cuando nota que es Nam quien abre la puerta.

¡Aléjate de él! (YoonMin) ➳ OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora