Falsas ilusiones y amistades verdaderas

Parte 7

Un día como otro cualquiera, Sara estaba con sus dos amigos en la plaza. Se encontraron a Fernando y Ramón y estuvieron hablando un buen rato.

Cuando ellos se marcharon ella recordó el día que les conoció y se echó a reír, se dio cuenta de que ya no la dolía tanto aquella apuesta, al contrario pensaba que si no hubiera existido esa apuesta no hubieran pasado tantas cosas maravillosas en su vida, hubo algunas malas, cierto, pero con las buenas que había vivido juntos a ellos se recompensaba.

Pepe sacó a Sara de sus pensamientos diciéndola que si querian ir a casa suya a ver pelis de miedo, ya que era lo que más les gustaba a los tres.

Fueron a casa y se pusieron a ver los 7 capítulos de Saw.

Después de verse los 7 capítulos, llegó la madre de Pepe y les ofreció algo para cenar, cenaron los 3 en el cuarto con Pepe.

Cuando llegó la hora de irse, Sara recibió una llamada de su madre:

Mamá: Sara hija, hoy no iré a casa a dormir, han ingresado a una amiga mía y voy a hacerla compañía hasta que llegue su familia de Valencia.

Sara: Vale mamá, ¿te llevo algo de cena?

Mamá: No gracias, si quieres se pueden quedar a dormir tus amigos en casa, pero no trasnocheis mucho.

Sara: Vale

                     COLGÓ

Sara instantáneamente les dio la noticia a sus amigos, mientras Pepe preguntaba a su madre si podía ir, Fran llamaba a casa para preguntar.

A Pepe la madre le dijo que no porque era Domingo y tenían una especie de día familiar, iban a estar reunidos gran parte de la familia desde las 10 de la mañana hasta la noche, pero a Fran le dijeron que si.

Fran y Sara marcharon a casa de ella, cuando llegaron Sara le dio un pijama que tenía allí de un primo suyo y ambos se cambiaron de ropa.

Estuvieron viendo películas hasta quedarse dormidos, Fran en la madrugada se despertó y cogió a Sara en brazos para llevarla a su cama, justo cuando la iba a posar en la cama ella se despertó:

Ella: ¿Qué haces bobo?

Él: Te traía a la cama boba ya que los dos nos dormimos en el sofá.

Ella: Gracias, la próxima vez despertarme, no era necesario que cargadas conmigo hasta aquí.

Después de una larga conversación nocturna, se hecharon en las dos camas nido de Sara, ella arriba y el abajo.

Una horas después Sara comenzó a moverse y se cayó encima de Fran, los dos se despertaron por el golpe y se echaron a reír.

Los dos se volvieron a la cama, pero esta vez al revés, él en la cama de arriba para que no se cayera de nuevo.

A la mañana siguiente,  ambos despertaron abrazados en la cama de abajo.

Cuando se despertaron y se dieron cuenta comenzaron una guerra de almohadas.

Se vistieron, pusieron música y llamaron a Pepe a ver que tal llevaba el día familiar, estuvieron hablando un buen rato de lo mucho que se aburría.

Cuando colgaron siguieron escuchando música hasta que llegó su madre.

Mamá: ¿Qué tal lo pasasteis?

Sara: Bien, ¿que tal tu amiga?

Mamá: Mejor, pero aún no llegaron sus familiares asique me cogeré un bocata y volveré a donde ella. Si te dejan tus padres te puedes quedar aquí haciéndola compañía Fran.

Fran: Vale ahora llamo o si no que se venga ella a la mía para que mis padres dijo quieran.

Mamá: Como prefirais.

Al final Sara cogió sus cosas y fue a casa de Fran.