La leyenda

Una dolorosa coincidencia.

-"Así te quería encontrar sabandija, ahora si nadie te salvará de tu castigo por lo que hiciste"- gruñó Naruto viendo con mucha molestia al ser más perverso que hasta ahora el Uzumaki había conocido en toda su vida.

-"Ya basta ustedes dos, Naruto no pelees con tu sobrina"- habló Kushina viendo como su hermano mayor le gruñía a su hija que sin que el pelirrojo lo notara se comió su ramen.

-"Esta niña es peor que el zorro kushina, creo que lo mejor para nuestra familia es que no le sirvas más de la comida de los dioses"- gritó Naruto apuntando a su sobrina que solo se reía en silencio mientras le sacaba la lengua a su tío.

-"Mami que significa la palabra prostiputas? mi tío no se cansaba de repetirlas con jiraiya jiji?"- preguntó Mito mirando a su tío con inocencia.

-"Qué?"- preguntó la Uzumaki mientras un aura de color negro, Naruto miró a su sobrina y notó las intenciones de esta.

-"Esa cachorra humana es malvada, me agrada"- comentó el kyubi observando lo que estaba sucediendo.

-"tu te callas, que ahora haré mi movimiento super especial que aprendí cuidando a los hijos de Tsume"- el zorro miró curioso lo que haría su contenedor, en cuanto a Naruto bajó la mirada arrepentido.

-"creo que ya no lo puedo ocultar, traté de ayudar pero veo que mis esfuerzos fueron insuficientes"- el dolor y tristeza en las palabras de Naruto detuvieron a su hermana.

-"Qué sucedió ni sama?"- preguntó Kushina en cuanto a Mito miró a su tío como sonreía mirando el suelo.

-"Kushina chan, tu hija, mi sobrina me sacó dinero sin permiso para poder comer en otra parte ya que dijo que cocinabas demasiado mal y lo único bueno que cocinabas era ramen, hasta el agua se te quemaba o algo así me comentó Teuchi del puesto de ramen al que siempre va Mito cuando escapa de tus comidas"- Mito miró impactada por la tremenda mentira que inventó su tío de la nada, pero no alcanzó a defenderse cuando una de las sandalias de su madre voló en su dirección para chocar en su cabeza, rápidamente Kushina se acercó a su hija y la tomó de su oreja y la llevó a los cuartos del segundo piso -"toma eso ladrona"- pensó Naruto mientras que a su interior el zorro miraba lo sucedido con una gran gota detrás de su cabeza.

-"Mi contenedor es un estúpido"- no había dudas.

-"Mmm cierto tengo un compromiso, ya no podré entrenar con Mito por estar castigada así que es hora de retirarme, hola cuñado"- saludó Naruto a Minato que aparecía en la cocina, este solo levantó la mano antes de escuchar mucho ruido en el segundo piso. Después de una caminata tranquilo en dirección a su destino, al llegar a una armería conocida para el fue tacleado por una niña de cabello cabello castaño con un moño similar a orejas de panda.

-"Si, llegaste tío Naruto, mi mami ya creía que andabas escapando nuevamente"- comentó Tenten sonriendo feliz por la presencia del Uzumaki, Naruto levantó la mirada impactado para ver a la dueña del local que se hacía la desentendida.

-"No sé de donde habrá escuchado eso"- comentó la morocha con una pequeña sonrisa.

-"Supongo que la gente exagera mucho las cosas pero bueno ya estamos aquí así que matanga"- Naruto tomó a tenten en sus brazos y salió corriendo acompañado de la risa de la niña, Akiko solo negó con la cabeza por la actitud del pelirrojo, después de mucho conversar lograron hacer las paces en su relación, aunque de recordar la manera en que cerraron todo, los colores se le subieron al rostro, estaba segura que la sonrisa de ese día solo fue superada a la de los días siguientes, no era Akiko Uzumaki pero Naruto prometió respetarla, a ella y a su pequeña así que solo quedaba disfrutar de los buenos tiempos, Naruto llegó afuera del local para desaparecer en un shunshin de hojas.