Sweet Devil (KookV)

6. dulce demonio

"El edén era el jardín más hermoso de la tierra...lástima que dos inútiles desnudos la jodieron"

—Omega—susurró el alfa y Taehyung se quedó quieto al escuchar la voz ronca de la bestia interior del chico—Al fin te encontré.

Taehyung tembló en su lugar como si la tierra bajo sus pies se estremeciera, casi igual a la primera vez solo que en esta ocasión aquel hermoso alfa lo miraba a él, directamente a sus pupilas. Su lobo corrió en su interior eufórico mientras perseguía su cola como un tonto cachorro, solo que, un poco más cachondo ya que rodaba y mostraba su pancita en señal de sumisión. El tacto caliente de la piel de su mejilla, fue casi radiactivo para el pelirrojo como cientos de microondas enviadas por su cuerpo, pero los ojos del alfa volvieron a la normalidad y la burbuja se rompió al igual que su tacto sobre la piel del azabache, quien dio un paso atrás rehuyendo de su mano al ver como una cantidad casi alarmante de personas los miraba, eso era malo para el pequeño alfa, muy malo.

Taehyung soltó un quejido de reproche, el aún no quería separarse.

—¿Q-qué hiciste?— gesticuló hacia el omega.

Taehyung levantó una ceja al ver el cambio. Otra vez el miedo se asentaba en las pupilas de su alfa y si, descubría quien era el causante le rompería cada hueso del cuerpo, el podía ser un omega, pero aún podía golpear a alguien sobre todo por su pareja.

—No hice nada—anunció el omega.

—No vuelvas a hacerlo. No vuelvas a tocarme- su voz trató de sonar dura, pero falló, tomó la biblia del suelo, que sin saber se cayó — Y alejaté de mi — pidió por último.

El pelirrojo se quedó helado ante las palabras.

Jungkook se dio la vuelta para irse a paso rápido con la respiración agitada, sobre él todos aquellos ojos juzgándolo a cada paso.

El chillido de su omega interior trajo de nuevo a Taehyung a la realidad, joder eso fue intenso, ni siquiera recuerda si con alguna de sus parejas sintió lo mismo solo un toque lo mandó al cielo, lastimosamente su alfa lo bajó a la tierra con un duro golpe. El pelirrojo arrugó el entrecejo confundido, su padre siempre que le contaba como conoció a su madre dice que fue casi instantánea la conexión que ambos se sonrieron y acercaron ¿Entonces por qué su alfa le pidió alejarse? El omega sentía que el azabache quería construir una barrera entre ellos, no sabía porque pero iba a averiguarlo, y el precioso alfa nunca escaparía de su garras.

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