9. Cátedra

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Jalar. Tirar. Morder.

Ese proceso lo repitió Taehyung sobre su pircing del labio como un TIC nervioso completamente estresado. Soltó un gemido al mover su mano sobre su pene sin conseguir su tan anhelado orgasmo, volvió a subir y bajar ¡Maldición! Y no pudo, no lo hizo, no importaba cuanto se imaginara a su alfa haciéndolo, su lobo no lo dejaba terminar.

Ah~alfa— gimió, moviendo su mano más rápido.

Quiero a alfa.

Su omega se agitó

¡Maldito perro pulgoso!

Se quejó en su mente frustrado.

Quiero a alfa.

Vivió a decir su omega interior lo había jodido todo el día con ese mantra, ¡ni siquiera masturbarse en paz podía!.

Completamente insatisfecho dejó de estimularse, metiendo su miembro en sus pantalones sin haber acabado. Abrió la puerta del baño de su habitación revolviéndose el pelo, antes de quedarse congelado sujetando el pomo viendo a un sonriente Namjoon sentado en su cama sobándose su pequeño vientre.

—¿Problemas?— inquirió el mayor con una ceja levantada y una sonrisa burlona en sus labios.

Taehyung boqueó como un pez completamente avergonzado, su cara tornándose del mismo color de su cabello. No había nada más vergonzoso que el que el esposo de tu primo te encuentres después de intentar masturbarte en su su casa. Incómodo.

—Y-yo...- — Trató de hablar Taehyung buscando una excusa.

Namjoon soltó una carcajada.

—No tienes que excusarte, yo también fui joven. El masturbarte no es nada, incluso puedo pretender que no te escuché si te hace sentir mejor— compartió el mayor sonriente.

La cara de Taehyung se calentó aún más.

—¡Hyung!— chilló con las mejillas explotando.

Namjoon volvió a reír.

—Esta bien, ya no te molestaré. Solo venía a decirte que Jin te ha invitado a una celebración en la iglesia—Taehyung hizo una mueca— porque no vas tal vez te diviertas — insinúa el omega mayor.

El pelirrojo lo piensa, rememorando que la primera vez que fue a la iglesia hayó a su lindo corderito.

Vamos Taehyung, nuestro alfa espera.

Lo motivó su lobo. Taehyung lo sopesó, estaría rodeado de mujeres y ancianos mojigatos con una clara perspectiva de que podían juzgarlo solo por como se veía, sonrió, pero él estaba preparado para sacarles el dedo medio si algo llegaba a molestarlo.

— Tienes razón hyung, tal vez me divierta— tomó su chaqueta dispuesto a ponersela .

—Taehyung— llamó el mayor— deberías ducharte antes apestas a...— el moreno le hizo una seña con la mano de arriba a abajo moviendo las cejas.

—¡Namjoon hyung! — regañó el menor.

—Solo decía — el omega se encogió de hombros saliendo de la habitación.

.

.

Taehyung sabía que llamaba la atención, vaya que lo hacia. Sobre todo de abuelas católicas con ínfulas de creerse superiores sólo porque van a misa los domingos.

Mordió el palillo que había sacado de su chaqueta para distracción, mientras veía a un montón de niños y niñas buenos sentados en los bancos de madera los cuales le habían  aplanado el culo en los diez minutos de estar sentado en ellos. Lanzó un suspiro al aire, llevaba unos veinte minutos ahí y ya quería lanzarse de la ventana, podía sentir las miradas sobre él, Seokjin pasaba de vez en cuando muy sonriente agradeciéndole que se diera el tiempo de venir.

Pero la real razón para estar ahí, era su pastorcito.

Alfa.

Chilló su omega.

Sip, por una parte quería complacer al pulgoso y por otro a él mismo, flexionó los brazos en su pecho recostándose de nuevo sobre la columna de piedra caliza donde llevaba una buena parte desde que había llegado.

¿Alfa?

Preguntaba su lobo.

—Lo siento pulgoso al parecer hoy no veremos a nuestro alfa— susurró para sí mismo, escuchó gimotear a su omega.

No tenía caso esperar más, se despegó de la columna dispuesto a irse lanzando una última mirada a su alrededor a petición de su lobo y ¡Si! Al fin lo vió caminando recto con una pequeña sonrisa incómoda, recibiendo una que otra venia de los niños buenos que lo miraban con adoración.

Taehyung retuvo un gruñido y a su omega, para que no se lanzase sobre aquellos pubertos por ver demás a su alfa. Se movió sigiloso siguiendo al azabache, hasta verlo entrar en el confesionario, una gran idea se implantó en su cerebro alentado por su lobo y secundado por su diablo en su hombro izquierdo. Vigiló que nadie se acercara y cuando ninguno de los presentes estaba viendo se metió donde iría el sacerdote para las confesiones.

Oh padre, perdoname porque he pecado— xx retuvo un grito al escuchar la voz suave y aterciopelada de su alfa, la cual no había podido escuchar en su último encuentro sino la del lobo.

Pero un pequeño pánico lo invadió cuando el alfa esperaba que él hablara.

—¿Padre?— preguntó de nuevo el joven.

Se pasó las manos por el pelo pensando una solución.

—Si hijo— se llamó maldito en tres idiomas diferentes antes de volver a escuchar al azabache hablar.

Padre debo confesar algo importante— escuchó el carraspeo del menor al otro lado— he encontrado a mi pareja destinada—  el omega festejó interiormente tapándose la boca con una mano. ¡Su alfa lo reconocía! ¡Alfa! Celebraba su lobo corriendo como un cachorro — Pero es una aberración de la naturaleza, es un omega hombrey su globo de felicidad fue pinchado como una vil broma.

N/A:

Hi!! Feliz año nuevo 2021🎆💞

No estaba muerta, estaba de parranda...nah no tenía internet.😣

Espero les guste el cap, con mucho Love❤

Alguien me dice como se llama esa película

Sweet Devil (KookV)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora