Two boys

CAPÍTULO 14.Una simple palabra

Después de aquel incidente en la azotea, Kakashi dejó caer su cuerpo, estaba de cuclillas arrepentido por el comentario que le dijo a Yamato. Revolvió con sus manos de forma exagerada su cabellera para deshacerse de su estrés que lo carcomía por dentro y terminó por resbalar sus manos en su rostro, miró al cielo y soltó un profundo suspiro. Después de unos segundos, se levantó con más tranquilidad y pudo percatarse de la libreta que había dejado caer Yamato.  La levantó y dio un vistazo a la cubierta lisa de color café claro. La abrió por inercia más que por curiosidad. 

Abrió la libreta por la mitad, parecía que todo estaba lleno de letras acomodadas en pequeños párrafos bastante ordenados. Sentía algo extraño al hojear, un cosquilleo en todo el cuerpo lleno de intriga. Leía algunas líneas de manera rápida, parecían fragmentos de una pequeña historia, solo las últimas páginas eran diferentes, incluso la letra era más delgada. Ya no aparecían simples descripciones sin orden, era como una serie de versos. Estaba leyendo lo que Yamato había escrito por la mañana en la biblioteca. 

No hizo falta que lo leyera dos veces para comprender de qué se trataba. Se sentía aún peor por lo que le había dicho a Yamato. Estaba demasiado estresado por intentar alejarse de todos y procurar que los demás no le vieran como una molestia, que malinterpretó los comentarios de su amigo. Después de leer lo que había escrito, comprendió más a fondo la intención que tenía Yamato de ayudarle. Aún no resolvía del todo aquel texto y a que se refería con lo de "matar con sus letras", pero se notaba que estaba muy arrepentido de no poder haber hecho más y fue justo eso lo que le hizo entender a Kakashi, la persistencia que tenía Yamato por saber cómo se sentía y estar acompañándolo después de lo de la muerte de su padre.

Se sentía una basura de persona, había caído en la cuenta de que en vez de evitar ser una carga, estaba tomando una actitud poco madura, la cual terminaba por causar más conflictos y malentendidos. Estaba siendo la carga que quería evitar.

-Estoy siendo un completo idiota... -se dijo a si mismo antes de cerrar la libreta, pero justo ahí , el viento alcanzó a girar una página más. Había pensado que ahí acababa todo el escrito, pero se había equivocado, había uno más. 

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En mi torpe intento por ayudar, siento que soy yo quien termina siendo auxiliado. Tal vez si logre mantenerme a su lado pueda evitar algo como lo que pasó contigo. Aún no lo comprendo del todo, pero siento que a medida que  me acerco más a Kakashi, te comprendo mejor, puedo ver aquello que tu no me enseñaste y que no me dijiste. Es por eso que quiero 

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Ahí terminaba el escrito, parecía que no había alcanzado a terminarlo y Kakashi recordó haber visto a Yamato escribiendo algo cuando abrió la puerta de la azotea, se percató que fue él quien lo interrumpió.  Una sonrisa se le dibujó en el rostro. Cerró la libreta y se dio un pequeño golpe con ella en la frente. 

-Debo disculparme con los demás.. -se dijo a si mismo el peliplata, refiriéndose a Anko y los demás que habían intentado animarlo.

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Para cuando bajó, ya había terminado el receso y ya todos estaban dentro del salón. Sus amigos estaban conversando en circulo y se acercó un poco avergonzado a ellos. Los demás le miraban extrañados, había llegado con la cabeza baja, era extraño ver de aquella forma al peliplata. Como llegó de la nada, todos ellos guardaban silencio, inclusive Asuma le miraba sospechoso, le parecía que Kakashi quería decir algo, sabía leer muy bien las actitudes de las otras personas.

-Los acompañaré en el partido de futbol... -soltó finalmente el peliplata, aún cabizbajo.

Un silencio se mantuvo por unos cuantos segundos pero una risa hilarante de Anko se atravesó, Asuma sonrió ligeramente, Gai caminó hasta detrás de Kakashi y le rodeó del cuello repentinamente, sorprendió tanto al peliplata que finalmente levantó la mirada.