capítulo 3: Ohm

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Después de un tiempo de que el joven demonio mirara con cara de desaprobación al otro joven plantado en el medio de la sala, decidió volverse hacia Aya y pedirle dos whiskys.

-Por favor Aya el mío doble- dijo Boun mientras la chica intentaba ocultar su risa.

Después de esperar unos pocos segundos Boun cogió los dos vasos y salto sobre uno de los sillones en el centro de la sala y le ofreció uno de ellos a su hermano.

-Boun ya sabes que yo no bebo alcohol-

-Mejor, más para mí- y de un trago bebió los dos vasos sin poner ninguna expresión en su rostro.

-Y dime... que te ha hecho volver Ohm-

-Tú, porque crees que he vuelto hermanito sino-

-Tengo una liguera idea. Aunque seas mi hermano mayor no significa que debas preocuparte por mí, haz igual que nuestro padre desde que me desterró a reinar el infierno por el resto de la eternidad- lo mira mal -Por favor Ohm di lo que tengas que decir y lárgate. Pero si lo que vienes a decirme es que padre quiere que vuelva no lo hare, ni ahora ni nunca, hasta el final de los tiempos-

-Debes volver. Sabes lo que ocurre cuando el diablo abandona el infierno Boun-

-Arréglatelas como puedas ya que tú puedes hacerlo todo y eres el hijo favorito de nuestro padre-

-Ya no lo digo solo por nuestro padre, que ocurre con las profecías Boun y si se llegaran a cumplir- empieza a recitar -Profecía número 666, el día que el demonio...

-Si si, que el demonio encuentre a su primer amor los demonios caminaran por la tierra causando el mal en todo aquello existente. Lo recuerdo perfectamente, pero lo más probable es que eso nunca pase-

-Y si pasara Boun que harías-

-Nunca va a pasar me entiendes- dijo Boun cogiendo con sus manos el cuello de la camiseta de Ohm con fuerza mientras lo miraba a los ojos con frustración.

En ese momento Aya fue y los separó para que no causaran ningún estruendo en lo que los mortales pudieran enterarse.

-Quedas avisado Boun-

Después de lo sucedido Ohm decidió despedirse he irse y en ese momento en un instante el tiempo volvió a la normalidad y empezó a volver a escucharse la música del Devil.

-Boun- dijo la diablesa acariciando el hombro de Boun mientras este tenía la mirada fija en dirección al suelo sin decir ni una palabra. -Porque dices que nunca vas a encontrar a esa persona-

En ese momento el joven levanto su cabeza otorgándole una sonrisa 100% sincera a la joven que ahora se encontraba enfrente de él.

-Crees que no he intentado encontrarlo durante estos años desde que vine a la tierra, incluso antes de poner un pie en ella- le dijo Boun soltando una lágrima que callo por su mejilla haciendo que este se pusiera nervioso y bajara su mirada en dirección al suelo.

-Oh, no llores mi pequeño demonio, yo te ayudare a encontrarlo te lo prometo- Aya para no ser una persona a la que se le diera bien dar cariños se acercó a Boun y le dio un abrazo.

-Bueno pequeña que continúe la fiesta, yo voy a salir a fumar, luego vuelvo- Boun se separó de los bazos de su endemoniada amiga y acarició su cabeza, para luego poner rumbo hacia la salida de la discoteca. 

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