capítulo 4: ¿Tiene el diablo mi alma?

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El cielo nocturno de las calles de Los Ángeles era uno de los mejores que Boun había visto en todos sus siglos de existencia. Bueno en realidad era el único ya que el cielo del infierno solo tenía nubes parecidas a las que se creaban cuando iba a llover, pero nunca llovía. Por eso Boun no era muy fan de los días de lluvia. 

Boun se encontraba en un callejón a unas manzanas del Devil, mientras fumaba y jugaba con una moneda que sostenía entre sus dedos pasándola de unos a otros, mientras miraba al horizonte con la mirada perdida sin apenas pestañear. En ese momento solo podía pensar en la escena que había vivido momentos atrás. Después de volver en si, decidió dirigirse otra vez hacia el local, pero antes de dar un paso para girar la esquina una voz femenina dentro de un vehículo llamo su atención y eso hizo que se parara al instante y esbozara una sonrisa. Después de unos segundos decidió girarse y mirar a la chica que se encontraba en la ventanilla de una limusina negra.

-Hola, que ocurre no te acuerdas de mi o que-

-Espera un momento tú no eres esa famosísima cantante, déjame pensar cómo te llamabas. A si ya lo recuerdo. Hola otra vez Kanya-

La chica que se encontraba delante de nuestro guapo diablo tenía la piel blanca, por su pequeño rostro caían unos mechones rubios y entre ellos se podían ver unos ojos color azul como el mar que estaban recubiertos por un maquillaje negro con brillo. También se apreciaban sus finos labios rosados con una base de brillo.

La gente de los alrededores al verla, empezaron a gritar su nombre y hacer fotos.

-¿Me das un autógrafo?- dijo Boun haciendo un puchero sarcásticamente.

-Si me invitas a una copa haré lo que me pidas-

Después de llegar al Devill se sentaron en la barra y como de costumbre Boun pidió su Whisky y su acompañante pidió un Martini.

-Que ocurre, no vas a decirme porque has vuelto-

-Quiero saber una cosa-

-¿El qué?-

-Quería saber si le vendí mi alma al diablo-

-Eso quiere decir que el diablo está interesado en tu alma. Pero no mi gran amiga, yo solo hice mi trabajo, te presente a gente que me debía favores, para así ayudarte-

-Ya pero todo lleva consecuencias Boun-

-Si te refieres al alcohol, las drogas y los selfis en toples, son cosa tuya querida- dijo mientras rodaba sus ojos.

-Hablando de otro tema, de verdad ¿Jonathan Bunnak? De todas las personas de este mundo decides casarte con él -Boun miro a Kanya con cara de desaprobación y medio de asco -Si por lo menos fuera guapo pues no te diría que no, pero siendo un homúnculo no. Menudo gusto querida-

-Pero me produjo un álbum, además me lo presentaste tú-

-Sí, yo te lo presenté para que trabajaras con él, no para que te lo tiraras-

-Es que me confundí- dijo la chica con una sonrisa, mientras Boun la miraba mal.

- Lo dejaste tirado en el altar verdad-

-Sí, eso fue un poco humillante para él-

-Pues yo me reí mucho- le dijo guiñándole un ojo y soltando una pequeña carcajada.

-Sabes el otro día me enteré de que se iba a volver a casar, ahora con una súper modelo y estoy celosa. Hay por dios soy un desastre-

-Querida eso no tiene que ver con dios- rueda los ojos -Escúchame Kanya, no has vendido tu alma al diablo, pero me debes un favor-

En ese momento Boun se puso serio y se giró para mirarla fijamente.

-Mi favor es que pongas orden es tu vida, es lo único que te pido estas malgastándola haciendo estupideces que no solo te dañan a ti, también a quien esta a tu alrededor-

Ella mirando fijamente a Boun sin decir ninguna palabra asintió.

Después de esta charla Boun decidió acompañarla a casa para que no volviera sola ya que era tarde y así continuar charlando hasta llegar a su destino.

-Te lo prometo Boun pondré orden en mi vida-

-No lo hagas por mi hazlo, por ti, por mejorar tu vida-

Después de mirarse con una sonrisa Boun abrazó a Kanya. Pero la paz de ese abrazo no duró mucho tiempo, ya que un coche a gran velocidad que pasaba por el lugar donde se encontraban bajo la ventanilla y de donde se pudo ver como una persona sacaba el brazo que entre sus manos tenía una pistola y en ese momento empezó a disparar sin control hacía ellos vaciando todo el cargador.

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