Una carta y una promesa construyen una historia que hace que, con el tiempo, entre ellos sobren las palabras, pero su pasado hace eco en el presente mientras sus conocidos afrontan su nueva realidad. ¿Que pasos darán ahora para seguir con sus vidas...
Tras unas horas de caminata por los senderos, el grupo de Ash, Miette y Marnie regresa al Centro Pokémon de Ciudad Ambrette, donde el azabache se comunica con el Profesor Sycamore y la Profesora Magnolia para comentar los hallazgos del meteorito en la Cueva Brillante.
"Sin duda es un hallazgo enorme, que hay que manejar con mucho cuidado" comenta la Profesora de Galar.
"De seguro hubo algún fenómeno reciente que expuso el meteorito, y no es un lugar cualquiera puesto que geográficamente es uno de los puntos más cercanos entre Galar y Kalos. Muchas gracias por la ayuda Ash, yo mismo iré hoy a Ambrette para estudiar el meteorito y hablaré con la oficial Jenny para que asegure el área" complementa el Profesor Sycamore
"Agradezco también que consideraras llamarme, le diré a Sonia que viaje a Kalos para apoyar la investigación, sería el primer caso de un nodo energético natural fuera de la región de Galar así que, Augustine, te encargo hagas los preparativos" dice la Profesora Magnolia.
"Por supuesto, será un placer apoyar a Sonia en lo que necesite" responde con gallardía haciendo que la profesora y Ash lo miren poco convencidos.
"¿Segura que no quiere aprovechar de salir con ella profesor?" pregunta el azabache haciendo que el profesor se coloque nervioso.
"Sonia no tiene tiempo para palabras bonitas y cursilerías, Augustine" dice la profesora de Galar con una leve molestia en su tono de voz.
"Oigan, tranquilos jejejeje, no se preocupen" dice nervioso el profesor de Kalos
"Mejor dejaré que ustedes vean los detalles, estamos en contacto entonces, hasta pronto Profesor Sycamore y Profesora Magnolia" sentencia el azabache despidiéndose de los investigadores y saliendo de la zona de llamadas para encontrarse con Marnie y Miette quienes compartían con sus nuevos Pokémon.
"Se ve que Kangaskhan y Cubone están mucho mejor" observa el entrenador.
"No son tan agresivos como se encontraban en la cueva" decía Miette mientras jugaba con Cubone en sus brazos.
"Si, este Kangaskhan me ayudará mucho con las prácticas y creo que ya le cayó bien a Morpeko" dice Marnie mientras la cobaya Pokémon se encontraba junto al hijo del Pokémon paternal en su bolsa.
"¡Peko!" dice sonriendo.
"Kaaa" responde contento el hijo de Kangaskhan.
"Entonces solo queda ir al laboratorio fósil y ver lo que haremos con las rocas que encontramos. Vayamos" sentencia el azabache mientras el resto asiente.
En el laboratorio fósil son recibidos por Thaddeus, quién se encontraba maravillado al escuchar la historia de cómo encontraron las piezas y, al revisarlas, les ofreció usar la tecnología del centro para revivir a los Pokémon fosilizados argumentando que las lecturas indican una alta probabilidad de restaurarlos.
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