Los dos se encontraban en la habitación del bicolor, era sábado y ambos habían estado de acuerdo con quedarse juntos dentro de la residencia. Eran las tres de la tarde y veían una película, sentados sobre la cama y acurrucados. Ya tenían cinco meses de noviazgo, por lo que ya tenían la confianza suficiente para visitar la habitación del otro.
En pocas partes de la película, había escenas eróticas, que a uno le incomodaban y al otro le daban curiosidad, ya que ninguno había tenido una experiencia de ese tipo.
Transcurrió la tarde y cayó la noche, se dieron cuenta de que en la habitación, la oscuridad dominaba. De pronto, él rozó la mano de Yaoyorozu en un intento de querer levantarse y ambos sintieron algo recorrer su cuerpo, se miraron al sentir aquella electricidad que los invadió por un segundo y ninguno supo describir lo que sintió en ese pequeño roce.
Ella desvío la mirada al poco tiempo, se quedó sentada en la cama mientras que él se levantó y fue a la mesa de noche a ver la hora, se sorprendió al ver la hora que era, pero lo que más le preocupó era que la habitación de Momo quedaba al otro lado del pasillo y durante la noche apagaban las luces, por tanto tenía miedo de que le pasara algo.
Luego, de un momento a otro, Todoroki se acercó a ella y la besó, al inicio era suave y cálido, pero conforme pasaba el tiempo, se fue tornando más intenso y apasionado...
Hasta que se vieron obligados a separarse un segundo debido a la falta de aire, luego de recuperar la respiración, el mitad y mitad se acercó a ella de nuevo y la tomó por la espalda con suavidad para acomodarla. Luego, con una mano, le soltó el cabello, deslizando la liga que lo sujetaba hacia abajo con delicadeza para no lastimarla. Quedando él encima.
Ya acostada, Todoroki comenzó a recorrer su cintura bajando lentamente hasta sus piernas y ella enredó sus brazos al rededor del cuello del chico mientras jugaba con su cabello. Él se separó un momento para quitarse la camisa y luego quitársela a ella.
Bajó su boca para quedar a la altura del cuello de Momo, que se le aceleró la respiración cuando sintió al chico besar esa parte de su cuerpo; no pasó mucho para que él se sintiera impaciente y comenzara a bajar la falda de Yaoyorozu con sumo cuidado para después tirarla al suelo.
Él se quitó el pantalón y lo aventó de igual forma que con las prendas de Momo.
Dejó un camino de besos pasando por su cuello, su hombro y terminando en uno de sus pechos; mientras que con sus manos, acariciaba la cintura, cadera y piernas de YaoMomo, pero ella no se quedó atrás, con las yemas de sus dedos, comenzó a recorrer el pecho y abdomen del chico, hasta detenerse un poco antes de llegar a su ropa interior.
El bicolor aprovechó que Yaoyorozu se arqueó ligeramente para llevar su mano hacia la espalda de la peli negra y quitarle el sujetador, que desprendió con un movimiento rápido y continuó besando y mordiendo los pechos de su novia, que gemía a un volumen bajo mientras se mordía el labio inferior con los ojos cerrados por la placentera sensación que le causaban las acciones del chico.
Él siguió bajando hasta encontrarse con la ropa interior de la ojinegra, que deslizó con delicadeza por sus largas piernas.
Yaoyorozu juntó un poco sus piernas para evitar que el chico viera su intimidad, esto era por vergüenza ya que era su primera vez, hasta que el mitad y mitad le susurró algo al oído:
-Tranquila, también es mi primera vez...
Al escuchar sus palabras, dio un pequeño suspiro y se dejó llevar. El chico dirigió su boca hacia ella y comenzó a besarla de nuevo, ambos sentían su cuerpo arder bajo el tacto del otro y sentían la necesidad de ir por más, pero ninguno se atrevía a decirlo... Entre jadeos, caricias y roces, él se acercó a ella y la besó otra vez, la chica logró sentir algo duro en su entrepierna, tenía una idea de lo que podría estar pasando en la ropa interior del bicolor, más no tuvo el valor de preguntar, aunque ninguno pudo evitar un sonrojo al tener dichas sensaciones, pensamientos que para ella eran sucios pero inevitables y el deseo de querer ir más allá... Y no fue sino hasta que él decidió retirar su última prenda, dejando su miembro a la vista y a una Yaoyorozu sorprendida por lo que precensiaba.
La miró con una cara que decía "quiero hacerlo" y ella asintió, aunque aún temerosa por lo que pasaría después. Finalmente, introdujo su miembro dentro de ella y comenzó a entrar y salir con movimientos lentos pero constantes; hasta que la chica no pudo aguantar más y comenzó a gemir a un volumen no muy bajo pero tampoco tan alto como para que afuera la escucharan, ahí fue cuando el mitad y mitad supo que debía acelerar un poco el ritmo, mientras seguía entrando y saliendo con más fuerza. Los sonidos que ambos producían eran distintos, él gruñía y jadeaba, por otro lado, ella gemía y trataba de morderse el labio con todas sus fuerzas con la intención de reprimir sus sonidos, aunque le era imposible, pues ninguno podía negar que era una sensación muy placentera que ninguno quería dejar, pero como sabemos, todo incio tiene un final.
Así que de un momento a otro, él sintió que estaba a punto de acabar, pero con todo lo que sentía en ese instante, no pensó en las consecuencias y acabó corriéndose dentro de ella.
Y aunque quería seguir dándole esas y muchas más sensaciones a su novia, su cuerpo no decía lo mismo, y se notaba por su respiración agitada y las pequeñas gotas de sudor en su frente.
Ella no sabía si deseaba continuar, aunque era cierto que estaba más que satisfecha y había obtenido su orgasmo, no sabía lo que rondaba por la cabeza del bicolor.
Volteó a verlo y él negó con la cabeza, dándole a entender que habían terminado. Ambos se pusieron su ropa interior y se dispusieron a descansar, quedando ella acurrucada sobre su pecho y él con una mano acariciando su brazo, hasta que ambos cayeron rendidos.
El primero en despertar fue Shoto, que revisó su teléfono para poder ver la hora, aunque no era algo que le preocupara porque era domingo y ese día usualmente estaba desocupado. Por fin vio la hora y eran las 8:45 a.m., pero antes de volver a dormir, observó a la chica que dormía plácidamente sobre él, su respiración era calmada y en su cara se dibujaba una pequeña sonrisa que reflejaba la felicidad de poder dormir junto a la persona que amaba.
El chico decidió no despertarla y brindarle un beso en la frente, para luego volver a acomodar su cabeza junto a la de ella y dormir hasta que quisieran.
La próxima en despertarse fue ella, que levantó la cabeza un poco para encontrarse con su novio aún dormido, de igual forma vio la hora y eran las 10:22 a.m., a su parecer no era tan tarde y menos en domingo, pero antes de que pudiera volver a colocar su cabeza sobre la almohada, escuchó un "buenos días" que provenía del chico que tenía a su lado.
-Momo: Buenos días, ¿dormiste bien?
-Sí. ¿Descansaste?
-Ajá, ¿quieres bajar o nos quedamos aquí?
-Mmm... Pues, si quieres, podemos bajar.
-Yo creo que si, tengo hambre.
-Bien, pues bajamos.
Ambos se pusieron su ropa y salieron de la habitación, pero luego, un mensaje llegó al teléfono de Shoto.
"𝘏𝘰𝘭𝘢 𝘩𝘦𝘳𝘮𝘢𝘯𝘪𝘵𝘰. 𝘔𝘢𝘮á 𝘲𝘶𝘪𝘦𝘳𝘦 𝘷𝘦𝘳𝘵𝘦, ¿𝘪𝘳á𝘴?"
A lo que él respondió diciendo que quería presentarle a alguien.
-Momo, ¿tienes planes para hoy?
-No, ¿por qué?
-Me gustaría que me acompañaras a un lugar, quiero que conozcas a alguien.
-De acuerdo, iré a mi cuarto a vestirme y luego regreso.
-Bueno, te espero abajo.
Ella se fue a vestir y bajó como habían quedado, él iba terminando su desayuno cuando la vio bajar. Llevaba un vestido color azul cielo con zapatos de piso de igual forma azules y el cabello atado en coleta como solía llevarlo.
El chico tomó su mano y salieron de la residencia, para luego dirigirse a un edificio blanco y alto, ella estaba confundida, ¿quién estaría ahí? No dejaba de hacerse esa y mil preguntas más hasta que quedaron frente a una puerta, él la abrió y ella quedó sorprendida al ver a una mujer de cabello blanco que se encontraba mirando hacia la ventana.
-Madre, estoy aquí. Y traje a alguien que quiero presentarte.
-Hola hijo, ¿es la chica de la que tanto me has hablado? Es hermosa.
-G-Gracias. Buenos días, mi nombre es Yaoyorozu Momo.
-Se podría decir que te conozco, Shoto no para de hablar de ti y de todas tus cualidades. Aunque veo que no se equivocaba al decir que eras hermosa y educada.
-Gracias, toda mi educación se la debo a mi madre, me llevaba a clases donde me enseñaron a comportarme "como una señorita".
-Pues valió la pena, eso te convirtió en lo que eres ahora, y me da gusto conocer a la chica que robó el corazón de mi hijo. Quiero que sepan que siempre tendrán mi apoyo, en la situación que sea.
-Gracias, ah...
-Rei.
-Rei-san, gracias por aceptarme como la pareja de Shoto, en serio lo amo.
-Lo sé linda, sé que mi niño está en buenas manos.
-Quería que se conocieran porque cuando nos vayamos, iremos a casa. Quiero que conozca a Fuyumi.
-¡Oh! Bien pues, no les quito más su tiempo. Seguro que Fuyumi estará muy feliz cuando conozca a Momo-chan.
-¿Quién es "Fuyumi"?
-Mi hermana mayor, quiere conocerte desde hace tiempo.
-Bien, vayan. Regresa pronto hijo.
Finalmente, se despidieron y tomaron camino a la casa en la cual vivía Fuyumi.
Tocaron estando afuera de la puerta y una chica mayor salió a abrirles, esta tenía el cabello color blanco con mechones rojos y lentes, se veía adulta.
-¡Shoto! Te extrañé mucho.
-Yo igual.
-Oh, veo que trajiste a alguien.
-Ella es Momo.
-Cierto, la recuerdo. No parabas de hablar de ella cuando venías. Mucho gusto, soy Todoroki Fuyumi.
-Buenos días, el gusto es mío. Yaoyorozu Momo.
-Y no te equivocaste cuando decías que era muy educada, y además linda.
Los invitó a pasar, ya una vez adentro, comenzaron a hablar sentados en los sillones de la sala.
-¿Y bien?, ¿cuánto tiempo tienen juntos?
-Cinco meses y contando.
-Wow Shoto, tu primera novia y ya tienen tanto, ¿para cuándo la boda?
-Tranquila, luego pensaremos en eso.
-¿Así que Yaoyorozu, eh?
Esa voz, el bicolor la reconoció de inmediato y volteó hacia el lugar del que provenía.
-Shoto, quiero hablar contigo.
Él solo soltó un pequeño gruñido y salió junto a su padre.
-¿Qué quieres ahora?- Dijo mientras su tono cambiaba drásticamente de relajado a serio y algo molesto.
-Esa chica, ¿es tu novia?
-Sí. Y no dejaré que interfieras con mi relación.- Decía decidido y sin miedo alguno.
-Al contrario, me parece bien que te relaciones con ella.
-¿En serio?- Desconfiado.
-Sí, su familia es de muy buenos recursos y tiene un gran poder e influencia.
-Ya decía que no podía ser, era demasiado bueno para ser verdad. Pero de una vez te digo una cosa, yo elegí a Momo no porque tenga dinero o poder ni influencia, sino porque la amo y no dejaré que tus deseos egoístas terminen con mi relación.
-A mi no me hables de esa forma que soy tu padre.
-¿Un padre hace lo que tu hiciste?, ¿o "apoya" a sus hijos con algo por interés? NO. Y aunque tenga tu sangre, jamás me voy a parecer a ti, así que que te quede claro; Momo y yo estamos juntos por amor, no por interés ni deseo de poder.
Sin nada más que decir, se retiró a paso firme hasta que llegar a la sala, donde Fuyumi lo miraba asombrada y YaoMomo algo feliz por la confesión de su novio, pero también nerviosa por las intenciones de Enji. El chico no quería estar cerca de su padre por el momento, y Fuyumi intentaba tranquilizar el ambiente, ya que se notaba la tensión que había entre ambos; Momo mientras tanto, se mantuvo sentada al lado de Todoroki, al poco tiempo, Enji se fue sin decir nada, el ambiente cambió y volvió a respirarse la tranquilidad en la habitación.
Continuaron hablando sobre la U. A., su relación, entre otras cosas.
Cuando se dieron cuenta, ya eran las cuatro de la tarde y tuvieron que irse, no sin antes despedirse ambos de la chica que seguía feliz por su hermano.
Finalmente, se fueron de ahí y regresaron a la Academia, al llegar se encontraron con cierta niña de piel rosada y "ojos de mapache" como solía apodarla Bakugou, Ashido se acercó a ellos y les preguntó si querían jugar "Verdad o reto", ya que había invitado también a los demás para reunirse en la sala y jugar.
Ya con todos ahí, Mina dio inicio al juego:
-Ashido: Bien, ¿empezamos?
-Todos: ¡Si!
-Kirishima: Bueno, elijo que, ehm... ¡que Sero empiece! ¿verdad o reto?
-Sero: Verdad.
-Mina: ¿Alguna vez has tenido una cita?
-Sero: N-No.- Dijo un poco avergonzado.
-Mina: Bueno Sero, te toca elegir a alguien ahora.
-Sero: ¡Kaminari!
-Pikachu: Elijo reto.
-Sero: Te reto a que... ¡Abraces a Bakugou! Solo cuenta si dura cinco segundos o más. Si es que no mueres antes.
Lentamente, el chico eléctrico se fue acercando al rubio cenizo, suplicándole al de arriba que no lo matara y lo abrazó.
-¡¿QUÉ CARAJOS HACES IDIOTA?!
Mientras Mina contaba los segundos para tomar el reto como cumplido, el explosivo seguía luchando por quitarse encima a quien se aferraba a él para cumplir el reto que le había tocado.
-Ashido: ¡4! ¡5! ¡RETO CUMPLIDO!
-Kaminari: Al fin, agradezco que no me mataras Bakugou.
-Bakugou: ¡CÁLLATE RATA ELÉCTRICA!
-Mina: Bueno, ¿a quién eliges ahora?
-Denki: Hmm... No estaría mal a... ¡Uraraka!
-Ochako: Reto.
-Pikachu: Te reto a que te mantengas levitando hasta que el juego acabe.
-Uraraka: O-Ok.
Usó su quirk en ella y levitó, apenas estaba a centímetros del suelo, así que no le costaba tanto mantenerse así.
-Uraraka: Elijo a Bakugou.
-¡¿QUÉ DEMONIOS QUIERES AHORA?!
-¿Qué eliges?
-Verdad.
-Bueno, ¿es cierto que Utsushimi Camie y tu están juntos?
-¡NO RESPONDERÉ A ESO!
-Elegiste verdad, tienes que hacerlo.
-Si.- Lo dijo a un volumen casi inaudible, pero que con suerte solo ella y Kirishima lo escucharon, aunque este último ya lo sabía.
-¡TÚ!- Dijo señalando a Deku.
-¿S-Si Kacchan?
-¿Qué eli-... Espera, ¡¿cómo me llamaste?!
-¡P-P-Perdón!
-¿Qué eliges, verdad o reto?
-Creo que reto.
Con respecto a la respuesta del peliverde, Bakugou hizo una sonrisa maliciosa y al fin dijo lo que próximamente tendría que cumplir:
-Te reto a abrazar a "cara redonda".- Él sabía que le costaría un poco hacerlo, ya que sabía que a su compañero lo ponía muy nervioso estar cerca de alguien del sexo contrario.
-¿Q-Qué?
-Un reto es un reto, bastardo.
-(Suspira) ¿Cuánto tiempo tiene que durar?
-Cinco segundos como mínimo.
Hasta que Midoriya se decidió, caminó a paso lento hacia Uraraka y la abrazó, a lo que ella se sonrojó.
-Todos: ¡1! ¡2! ¡3! ¡4! ¡5! ¡RETO CUMPLIDO!
-E-Elijo a Iida.
-Reto.
-Te reto a correr tres veces seguidas por la sala.
-Wow, qué difícil.- Decía Bakugou con sarcasmo.
Iida hizo el reto, corriendo por tres veces seguidas al rededor de la sala tratando de hacer círculos y no lastimar a nadie.
-¡Elijo a Mineta!
-Kirishima: Por cierto, ¿Mineta qué hace aquí?
-Venía para saber qué tipo de preguntas o retos les ponían a las chicas.- Sin una pizca de disimulo.
-Iida: ¿Qué eliges?
-Mineta: Reto.
-Iida: Te reto a que dejes de ver a las chicas de esa forma hasta que acabe el juego.
-Mineta: Hmm... Eso es imposible.
-¡Cumple!
-Ashh, bien.
Sorprendemente, dejó su mirada pervertida y la cambió por una "normal".
-Mineta: ¡Eligo a Todoroki!
-Bicolor: Reto.- Dijo neutral.
-¡Te reto a que beses a Yaoyorozu en frente de todos!- Le retó a propósito, porque sabía que ellos nunca harían eso en público.
Ambos se sonrojaron, pues hasta ahora nadie los había visto como lo harían próximamente a menos que estuvieran solos y el ambiente fuera adecuado.
Lentamente, los dos se voltearon a ver y él se acercó para besarla y de esta forma, cumplir el reto. Los ponía muy nerviosos hacer eso en público, mientras que los demás preparaban sus cámaras para tomar fotos y videos de algo que muy seguramente, verían una vez en la vida.
Hasta que la espera llegó a su fin, todos los presentes quedaron asombrados y algunos hasta con miradas tiernas y dulces por lo que precensiaban; claro que no perdieron la oportunidad de tomarles fotos y uno que otro video corto, la experta en formar shippeos y parejitas entre sus compañeros estaba más que feliz, viendo a una de sus mejores amigas darse un beso con quien tanto amaba.
Y aunque al inicio les habían dicho que como mínimo debía durar cinco segundos, ellos ya tenían como diez, sino es que más. Ya que se desconectaban del mundo cada vez que se besaban. De un momento a otro, olvidaron que había más personas observando y Momo llevó su mano a la nuca y cabello de su tan querido mitad y mitad, mientras que él comenzaba a sujetarla de la cintura. Pero el momento se vio interrumpido de nuevo por la misma persona:
-Kirishima: Ahh... Chicos, ya se, pueden soltar. Reto cumplido.- Dijo un poco incómodo, ya que recordó el pequeño malentendido que tuvieron aquella vez.
-YaoMomo: Lo-lo sentimos, tal vez nos dejamos llevar un poco.
-Tooru: ¿Para cuándo la boda?
-Mina: ¡Si! Quiero ser dama de honor.
-Momo: Wow, wow, wow. Tranquilas chicas, todo a su tiempo.
-Todoroki: Elijo a Mina.
-¿Y-Yo?
-(Asiente): ¿Verdad o reto?
-Reto.
-Quiero que les des un beso en la mejilla a Kirishima.
-Es-tá bien.
Se acercó al pelirojo y depositó un beso suave en su mejilla para luego irse de nuevo a su lugar con un sonrojo que si no fuera por el color de su piel, todos lo habrían notado.
Después de que todos pasaran e incluso hicieran segunda ronda, todos decidieron ir a sus habitaciones, ya que era domingo y al día siguiente irían a clases. Al otro día, todos estaban entrando a los salones, cuando en eso Todoroki tomó con cuidado la mano de Yaoyorozu y le pidió que lo acompañara, y así lo hizo.
Llegaron a un pasillo donde nadie los vería y Momo lo miró extrañada.
-Shoto, si nos quedamos aquí, perderemos clases.
-Tengo permiso de Aizawa-Sensei, le dije que no tardaríamos mucho.
-¿Q-Qué quieres hacer?, ¿necesitas hablar de algo?
-No precisamente, en realidad, es más bien una propuesta.
-¿Pro-puesta?
-(Suspiro): Desde hace tiempo quiero pedirte algo, pero no teníamos tanto juntos para hacerlo.
-¿C-Cuál es tu propuesta?
Finalmente él se acercó a ella y tomó su mano mientras la miraba a los ojos.
-Yaoyorozu, quiero pedirte que te cases conmigo.- Le dijo manteniendo un tono tranquilo.
-¡¿E-Eh?! Somos muy pequeños aún, apenas tenemos dieciséis años.
-Lo sé, sería cuando salgamos de aquí luego de graduarnos.
-(Suspiro): Acepto.- Respondió con una sonrisa.
(En el salón)
-Kirishima: ¡Sabía que te diría que si!
-Kaminari: ¡Así que al graduarnos habrá boda!
-Bakugou: Tch, como si eso emocionara tanto.
-Pikachu: ¿Y tu? ¿cuándo se lo pedirás a Camie?
-Kirishima: Hmm... Seguro se lo pedirá cuando estén solos, y después puede que pase otra cosa.- Con sonrisa pícara.
-Bakugou: Kirishima, ven un segundo.
-Deku: Ay no...
Bakugou lo llevó fuera del aula donde no pudieran verlos.
(Explosión)
-¡AHHH! ¡AY AY AY AY AY AY AY!
-Bakugou (entra al salón): Listo, ¿ahora qué?
-Midoriya: Auch, pobre Kirishima.
Hasta que en ese momento entró Jirou junto a Ochako y Mina, Kirishima le pidió a Ashido que lo acompañara afuera, de igual forma que hizo Kaminari con Kyoka.
Finalmente, ambos se declararon a las chicas y ellas correspondieron. Hasta que después de meditarlo por tanto tiempo, Uraraka ¡por fin se le declaró a Izuku! Él aún con su nerviosismo y tratando de no tartamudear tanto, logró confirmarle a la castaña que sentía lo mismo...
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Una vida juntos. [TodoMomo].
FanfictionSINOPSIS: Con personalidades un poco diferentes al igual que sus historias. Pero conforme se conocen y se acercan al otro, se dan cuenta del sentimiento mútuo que crece entre ambos. ¿Se trata de algo pasajero, o de su alma gemela? AVISOS Y ACLARACIO...