2- su nombre

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Conwey

Hay estaba yo, soportando a dos  anormales que ya estaban más borrachos que la madre que los parió. Después de los primeros tragos pasamos a pedir botellas, y a esos dos se les fue la garganta y terminaron así.

Mal la iban a pasar conmigo si no se ponían bien para la siguiente jornada que empezaba en un par de horas, yo apenas y me tome tres o cuatro tragos, y ellos con el segundo ya estaban insoportables.

Mientras que ellos estaban a su rollo, riéndose de cosas sin sentido, yo estaba cuestidandome la puta existencia y pregundome que porque cojones me deje embaucar por un estúpido baile.

No quiero presumir, ni nada por el estilo, pero por mi posición social y mi atractividad física, tenía detrás a bastantes pretendientes, tanto hombres como mujeres que me querían tener a sus pies.

Pero conociendome eso era malditamente imposible por eso no entendía como es que alguien a quien acababa de ver me hacia reaccionar con solo verlo bailar, hacia bastante tiempo que no me pasaba eso. ¿Acaso me estaba volviendo loco? O es que estaba frustrado o algo, talvez si, talvez no. Pero en fin.

Pensé que si me tomaba unas copas con mis Comisarios me iba a relajar un poco del día de mierda que tuve, pero como las princesitas no dejaban de darme por culo se me arruinaron los planes, además de que se me puso dura delante de ellos. Ahora tenía que encargarme de dos borrachos de mierda.

Ya entiendo porque me invitaron a beber aquella noche, porque saben perfectamente que yo no soy alguien que se pasa de tragos, y menos por el trabajo.

--conwey, aun no ha respondido mi pregunta-- joder había evitado las mierdas de Volkov, pero hay estaba otra vez, como el porculero que es.

--ya te dije que no estaba mirando a nadie.

--LOS COJONES, venga hombre, que no pasa nada, estamos en confianza y aquí Rodríguez y yo vimos en full HD como se le ponía dura, y dudo mucho que haya sido por un pensamiento porque sabemos perfectamente que estaba mirando a la pista de baile.

--"la madre que lo parió, ¿porque coño tengo a este inútil de mejor amigo?"

Suspire pesadamente al ver lo insistente que era Volkov, siempre lo era con cualquier tontería.

--Mejor dejar de beber yá que en nada empieza nuestro turno, y como no estéis en condiciones para entonces coméis barrotes por dos horas.

La respuesta que tuve de ambos fueron pucheros y suspiros cansados, pero es lo que tiene ser policía.

Después de eso decidimos abandonar el lugar ya que los dos me dieron la razón, porque la tenía, además el día siguiente lo teníamos libre, solo había que tragar mierda un rato más y luego el descanso.

Antes de salir volví a mirar a la pista de baile y aquel chico seguía bailando, se le notaba bastante borracho. Me quedé así unos segundo y de repente cruzamos miradas.

Nos quedamos mirando y fue como si todo a mi alrededor se paralizara, me congele totalmente, era como si su mirada me penetrara hasta el alma, y como si él supiera lo que provocaba me lanzo una sonrisa burlona haciéndome salir de mi ensoñación.

Se la devolvi con una cara asco y el solo se río dando a relucir sus lindo dientes, que aunque no quería admitirlo eran bastante lindos.

"Menudo imbécil" Pensé.

Salí del lugar a pasos grandes, estaba enojado y no se porque. sentía como si hubiera perdido en algo, ¿pero en qué? Esa era mi pregunta, ¿en que?.

MALDITOS OJOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora