Es hermoso vivir en un mundo lleno de colores.
¿Verdad?
Levantarte y ver el amarillento resplandor de la luz del sol en tu cara, ver el verde en el césped y la copa de los arboles, las casas todas tintadas de muchos colores y hermosas tonalidades...
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— ¡HYUNG HAY QUE LEVANTARSE! —gritó saltando en la cama junto a un dormido Jungkook.
La pereza cerrando sus parpados y la almohada aun pegada a su cara no hacia nada para desear querer levantarse y seguir con tan exasperada rutina de todos los días. No quería volver al infierno al que llamaba escuela. Ayer volvió de la cárcel con su cabeza doliendo a mas no poder y sin entender nada de lo que le habían dejado de tarea.
— Ye...on..jun —se quejó entre cortado con cada salto de su hermano aun con los ojos cerrados— ¿Por qué... no... sal... tas en... otro... lado? —volvió a hablar enterrando la cabeza en su almohada, sintiendo como su cuerpo iba moviéndose de arriba a bajo.
No entendía que era lo que le pasaba a su hermano. Intento hacer memoria pero nada vino a su mente ¿Hoy era su cumpleaños' ¿Navidad? ¿Reyes Magos? No entendía porque tanto entusiasmo en que se levante, pero solo sentía los constantes saltos sobre la cama causando que el rebotará.
— ¡HOY MAMA ME LLEVARA A TÚ ESCUELA! —gritó con alegría y euforia, el mayor de ambos dejo salir el aire que contenía en su interior en una especie de quejido largo y profundo .
Jungkook quiso decirle que era ilegal gritar y tener tanta energía apenas uno se despierta, sumando eso y que además de que era muy temprano como para tener esa energía encima. Se puso a pensar en que punto de su vida llego que ahora es Yeonjun el que lo molesta cuando aun recordaba que era el, el que molestaba a su hermano mayor de la misma forma.
De un salto, Yeonjun bajo a la cama haciendo un estruendo al estrellarse contra el suelo y corrió a donde estaba el ropero de su hermano. Un segundo luego de estar frente del gran mueble se puso a pensar en que ropa usa su hermano y que se iba a poner ese día.
Jeon Yeonjun, es el mas chiquito de tres hermanos con once años. Es el jeon mas lindo según él. Divertido, extrovertido y muy alegre, era como el lado opuesto de su hermano Jungkook que era retraído y no era muy sociable contando que no tenía muchos amigos.
En cambio Yeonjun tenia amigos por todos lados y si en ese lugar no tenia se haría nuevos amigos.
— ¿Y eso es bueno porqué...? —preguntó con pereza a lo que se refregó los ojos y lentamente los abrió siendo recibido con el techo gris oscuro. Algo que lo acompaña hasta ese día y cosa que no cambiara hasta el día que se muera probablemente.
Si bien el techo se veía oscuro, en el estaba escrito en negro y blanco la frase que lo acompaña desde que tiene memoria.
"Todos los días son hermosos, con o sin colores. Sonríe que eso muestra el arco iris en tus ojos"
Leyó un par de veces en su mente y se sentó en la cama. Abrió aún más los ojos con pesar y mirando sus sabanas extras blancas, las paredes blancas, su ropero y todos los demás muebles gris oscuro.
