Capítulo 4

985 88 9
                                    

—Dame...—arrebatando el cubierto de la mano de la chica azabache.

—Hey...¡NO!...—Jade movía de un lado a otro aquel pequeño tazón que contenía cereal con leche. No quería compartir ni un poco con la morena.

—Por favor...— Siguiendo con el cubierto aquel tazón que se movía frente a ella en repetidas ocasiones.

—Puedes hacerte uno, que manía de querer hacerte con mis cosas.— Con una mano sostenía  el tazón, intentando no derramar el contenido, mientras que con la otra apartaba a Tori, para tenerla a una distancia no peligrosa, manteniendo a salvo a su cena.

La chica morena después de varios intentos y algo de forcejeo, por fin pudo obtener una probada de aquello. Jade suspiró hondo y le cedió lo que había preparado.

Se levantó y permitió que la chica, se sentará en el que antes había sido su lugar.
Jade había perdido su cena y Tori había ganado una, una que por supuesto no tuvo que molestarse en preparar, aunque no fuese complicado.

En otras circunstancias Jade no le habría cedido absolutamente nada, pero, quizá en estos momentos la chica necesitaba más aquello que ella misma.

La morena ahora mismo estaba usando una de sus sudaderas y le quedaba un poco grande, apenas era notable. La chica aún no reunía el valor suficiente como para volver a casa a traer algo de ropa.

Ahora, prácticamente toda su ropa y su habitación estaban impregnados del dulce aroma de la castaña. Aquel aroma siempre le parecío agradable, aunque un tanto exagerado. Podría reconocerlo de otros más sin problemas, pero la verdad es que jamás creyó que impregnaria sus fosas nasales.

Una hora más tarde, después de que ambas habían tomado una ducha, se encontraban en el sofá, viendo televisión, una película de niños. Que a Jade le parecía un tanto aburrida, pero que a Tori le encantaba por alguna extraña razón. La chica veía atentamente cada escena de la película, mientras la pelinegra acariciaba el tostado cabello de su compañera.

Ambas se quedaron dormidas, el televisor continuaba encendido, la película seguía su curso.

La madre de Jade llegó a casa, visualizó a ambas, consumidas por el sueño. Victoria estaba recargada en el pecho de su hija, mientras que Jade mantenía una posición un tanto incómoda, le dolería el cuello al despertar por la mañana. Tomó el control remoto y apagó la televisión. Se dirigió a la habitación de su hija y trajo un par de cobijas para ambas. Tori se removió un poco, pero no despertó. Jade parecía como si hubiera muerto, a no ser por su respiración, su madre ya hubiera llamado a la ambulancia.

Ellen sonrió. Siempre se había preguntado si estas dos habían tenido algo más que una amistad. Aunque, siempre obtenía la misma respuesta por parte de su hija y una sonrisa apenada de parte de la chica castaña. La madre de Victoria también creía que estas tuvieron o tenían algo más. Esto no pasó a más de ser una teoría, porque jamás habían sido algo más que mejores amigas.

Quizá durante algún punto sintieron atracción, pero jamás al mismo tiempo. Y eso sí lo habían admitido a sus respectivas madres, más no lo admitieron frente a la otra.

Jade jamás acepto que durante algún tiempo, sintió algo más por Tori. Mientras que con la castaña sucedió prácticamente lo mismo.

Sí, eran muy amigas, pero era una relación muy diferente a una amistad usual. Tori solía ser un tanto celosa en cuanto alguien nuevo quería mantener contacto con la azabache. Pero, en ocasiones, con otros viejos amigos, también se ponía un tanto posesiva y evitaba a toda costa que la chica pálida estuviera con otros y no con ella.
Mientras que Jade, sentía un poco de celos de Beck, pero jamás lo demostró.  Siempre intentó justificar para sí misma, que aquello que sentía no era más que preocupación.

Pero, ¿se había desvanecido ese amor que se tenían después de aquella fuerte discusión?

Aún se sentía la tensión en el ambiente, ambas se veían un tanto reservadas. Se habían dicho cosas horribles hace poco menos de dos meses. Quizá, en este caso, el amor que decían tenerse sobrepasó sus problemas.








[Bueno, quiero confesar, que partes de esta historia han pasado en la vida real. Conmigo por supuesto, pero, no nos reconciliamos, ella se fue con su Beck, mientras que yo elegí mi orgullo, antes que seguir con aquella amistad, que era mala para ambas.]

Si tienen quejas o sugerencias, son bienvenidas.

Fɪɴᴅ U AɢᴀɪɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora