él era; según todos, un desgraciado bastardo. que para "colmo de sus familiares" era un omega hombre.. una total desgracia cayó para su entera familia, en forma de una atracción libida de un ser oscuro.
❧BeastxWirt☙
❧AU! brujas☙
❧Omegaverse AU!☙
❧Ma...
Semanas después. Horario: 9:35 de la mañana Narrador: ???
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El día era nublado, el otoño había empezado pero los cultivos igualmente seguían intactos; aun, la mañana empezaba y los leves llantos de aquella criaturita habían alertado a todos, mucho más a los mellizos quienes no podían siquiera verlo porque temblando lloraban y se iban con las cabras.
Entré a la nueva habitación que habían hecho para él.. Allí como siempre estaba Enoch, esa cabra negra de grandes cuernos que alguna vez quise sacrificar... Junto a una cama de madera con un colchón que él trajo de la casa de su padre.
Lo vi, estaba en una cuna sollozando mientras él estaba a su lado tratando de calmarlo.. No sabíamos cómo, pero sobrevivió.
[··Ω··]
── lo sentimos mucho, señores..── dijo la partera mientras estaba por retirarse, grande fue la sorpresa de todos al ver cómo de la puerta salía tambaleando aquel joven "anteriormente fallecido"
── E-Edell...── pronunció, todos veían exaltados al joven mayor, quien tambaleaba mareado sosteniéndose en el marco de la puerta. Estaba vivo y deseaba con ansias ver a la criaturita que contuvo en su vientre esos meses, esperando con anhelo el poder verlo, el poder cargarlo y besarlo.
[··฿··]
El joven que tuve me miró con lágrimas en sus bellos ojos, estaba arrodillado al lado de su cría quien también sollozaba a la par de él
── M-Madre... Mi leche no alcanza..── me lloró, suspiré. Así que era esa la razón de su llanto.
── ¡Gregorie!── llamé en un tono alto pero no tanto para asustar al pequeño cachorro de alpha, mi hijo menor se acercó corriendo al escuchar mi llamado, se colocó en el marco de la puerta temblando mientras miraba con miedo hacia donde estaban Wirt y su hijo. No lo tomé en cuenta, ya que era muy probable que él y Pacífica estuvieran celosos al ya no tener toda la atención. ── Trae la cubetilla de leche tibia que había preparado para ustedes, les haré más cuando termine aquí, ¿está bien?── él asintió mientras se iba a buscar lo que le pedí, a la par yo me acerqué a Wirt y me arrodillé a su lado para tocar su hombro. ── Wirt... Nunca debes dejar a tu hijo sollozando en su cuna, siempre tenlo en brazos.. Él deberá querer sentir tu calor y fragancia natural para calmarse Wirt.── le expliqué mientras tomaba en mis brazos a la criaturita de piel tan blanca cómo la nieve, incluso más blanca que la de Wirt. ── Mañana conseguiremos algunas yerbas para ti, Wirt...── él quien anteriormente estaba cabizbajo me miró con tristeza en su expresión y mirada. ── Debes alegrarte, cariño... Tu cachorro tiene muy buen apetito y tú estás haciendo todo lo posible para dejarlo satisfecho, Wirt..── él sonrió con tranquilidad tras mis palabras. ── ve y busca el biberón de Edell, mientras trataré de calmarlo..── le dije al ver cómo mi hijo menor entraba por la puerta con la pequeña cubeta de metal que contenía la tibia leche.
Luego de media hora, Wirt logró calmarlo por si mismo..
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